#13 Past

315 50 28
                                    

San llego realmente mal ese día, su aroma cambio por completo a uno sumido en tristeza. ¡Ni siquiera se puso a trabajar! Solo murmuro un "Quedate conmigo Woo" mientras me abrazaba cuando llegó. En resumen, su estado de ánimo era una basura, San me pidió que si podía ir a su habitación con él, a lo que dije que sí. Subimos las escaleras, pero yo me desvié rápidamente hacia la mía para ponerme mi pijama. Salí lo más rápido posible y fui hacia allí.

—¿San? ¿Puedo pasar?—. Piqué a la puerta con suavidad.

—Pasa.

Me adentré en la habitación, una tenue luz proveniente de la mesita de noche iluminaba la estancia. San estaba de pie, vestido con un pijama negro. Tenía algunas lágrimas en los ojos que luchaban por salir y los puños blancos de tanto apretarlos.

—Hey San...—. Me acerqué a él y cogí sus manos, no iba a dejar que se hiciera daño a sí mismo. —¿Podrías explicarme qué he pasado? Sabes que no pasa nada si no quieres decirme—. Acaricié el dorso de su mano con cariño.

—Creo que me siento listo para explicarte... Muchas cosas, pero no todas—. Se sentó en la cama mientras me miraba a los ojos. —¿Podemos acostarnos? Es largo de contar...—. Hice un pequeño asentimiento y me tiré a la cama junto a él.

—Es bastante extenso y no me gustaría resumir nada...

—No te preocupes, cuéntalo como te sientas cómodo—. Giré mi rostro para ver el del Alfa, sus ojos brillosos daban directamente hacia el techo, como si estuviera perdido.

—Bien, todo empezó cuando yo me presenté como Alfa, pero yo no era un Silveri. Yo nací como un Alfa recesivo... Eso, por supuesto, no les gusto nada a mis "padres", por qué claro, esas personas ni siquiera se merecen ese jodido título. Papa empezó a experimentar conmigo, quería que yo fuera un Alfa poderoso "Es por tu bien hijo, serás poderoso y tendrás el mundo en tus manos", pura mierda. Sus experimentos dieron frutos y mi padre realmente creo una especie superior de alfas, hablo con su jefe sobre lo sucedido y decidió hacer un experimento a gran escala, esta vez añadiendo omegas. La señorita Kim y mi padre empezaron todo eso, y realmente fue un éxito, porque si no, tú no estarías aquí con tus ojos morados brillantes y tu superfertilidad—. Río un poco mientras me miraba. — Yo no pasaba demasiado tiempo en el laboratorio, solo sé que papa me decía que allí había un omega bonito al que yo solía ir a ver, como si mi lobo y yo superamos que él era nuestro omega. Pronto un día la señora Kim y ese omega desaparecieron, el pequeño se convirtió en un omega Dysania con éxito y la señora Kim murió—. Tomo un respiro y cerro los ojos acercándose más a mí.— Al poco tiempo yo dejé de asistir allí y empece la secundaria, donde conocí a Mingyu. Él... él fue mi pareja por un tiempo, realmente lo amaba demasiado, pero era un secreto, porque mis padres siempre decían que el amor era una distracción y que debía centrarme en mis estudios y mi futuro. Unos meses después tuve el valor de presentarles a Mingyu y todo... Todo se fue a la mierda. Mis padres se enojaron demasiado conmigo diciendo que saliendo con un omega cualquiera no tendría éxito y solo me distraía. Poco después murió. — San se aferró fuertemente y escondió su rostro en mi cuello. — Mis padres lo mataron. Ellos nunca me trataron con amor ni mucho menos con cariño y amabilidad, para ellos solo era y soy un robot que les beneficia. Después de todo eso me volví la persona que ves ahora, nunca pude experimentar demasiado las emociones bonitas, como el amor, la felicidad... Simplemente, me sentía neutro, como si hubiera un vacío muy grande en mi pecho. Y sé que yo te gusto, sé que tienes sentimientos por mí, por qué dijiste que te "Gustaba un poquito" pero tú mismo te delatas solo. — Se me acaba de bajar la presión, tráiganme una coca. — Y la verdad es que hace tanto tiempo que no experimento estos sentimientos, que no entiendo nada, estoy perdido. No te quiero hacer daño por qué eres un chico muy amable y cariñoso, incluso hiciste cosas por mí que nunca nadie hizo. Estoy agradecido contigo, y creo... creo que tu también me gustas, pero necesito tiempo.

— ¿Ya terminaste de hablar?—. El Alfa asintió. —Dios tengo mucho que procesar—. Reí.

— En resumen, mis padres son una basura y no se sobre sentimientos.

— Mmh, en eso tienes razón si me permites decirlo claro, no creo que el amor te distraiga, el amor te llena y te hace feliz, ¡Y cuando eres feliz eres más productivo!—. Abracé a San.

— Supongo que sí.

— Sigamos conmigo, realmente me sabes leer bien—. Pinche su mejilla con mi dedo, San no salía de su escondite en mi cuello. — Tienes razón, tú si me gustas San, increíble el mal gusto que tengo para los alfas como para que me agrades tú.

—¡Hey! Respeto.

—Silencio Alfa mequetrefe, estoy hablando—. San gruñó un poco y se dio la vuelta. —Lo que decía, entiendo que estés confundido y no sepas que sientes por este maravilloso hombre que tienes al lado, pero yo te daré el tiempo que necesites Alfita. Ahora date la vuelta y mirame Choi San—. El Alfa seguía sin darse la vuelta, así que decidí darle un abrazo de oso por la espalda.

—Quitate, no quiero contacto con omegas tontos—. Mordí su hombro. —¡Yah, eso dolió!—. Se giró encarándome y empezamos a reír como locos.

— ¿Qué me hiciste Jung Wooyoung?

— Te hice 5 amarres, 2 males de ojo y algunas cosas más. Pero no le des tanta importancia—. Le saqué la lengua divertido.

— Realmente eres estúpido.

— ¡Respetame maldito Alfa!

— Obligame—. Dijo con burla

— No tengo medios que lo hagan posible, pero esta me la guardo, que lo sepas.

— Deja de ser tan molesto, ¿Quieres ver una película?—. Agarró el control de su mesilla.

— Quiero un besito.

— Wooyoung...—. Hice un puchero.

—Está bien.

Y así pasamos la noche, juntos. Viendo cualquier basura televisiva mientras reíamos y éramos felices, San por fin empezaba a ser feliz.

𝗠𝗘𝗟𝗧𝗜𝗡𝗚 𝗢𝗙 𝗦𝗡𝗢𝗪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora