Caminamos con lentitud por el camino, mi cara totalmente iluminada por el paisaje tan desconocido y familiar al mismo tiempo. Nuestras manos estaban entrelazadas mientras él me guiaba con dulzura por el lugar. Si aún no había tropezado era gracias al cuidado que estaba teniendo de guiarme correctamente mientras adoraba el paisaje.
Cuando llegamos a la hondonada mis orejas cayeron de la impresión y mi corazón comenzó a latir como loco.
Podía sentirla, la sentía por todo mi alrededor como si siempre hubiera esperado que llegara a ese lugar para poder encontrarnos con más cercanía que nunca.
Eywa...
—¿Te gusta? —Neteyam se posicionó a mí lado y me miró con una sonrisa, pero con un destello de duda en sus ojos.
Sonreí ampliamente con los ojos llorosos y asentí sin mirarle.
—Me encanta... Nunca habían hecho algo así por mí.
Tragué con fuerza y di una vuelta sobre mi cuerpo, aún asombrada por el alrededor.
—Tal vez deberían haberlo hecho antes —Neteyam agarró mi mano y nos acercó a las preciosas ramas rosadas que caían del árbol.
Le miré expectante y él asintió, agarrando su trenza a la vez que soltaba nuestras manos.
Hice lo mismo y ambos las conectamos al Árbol Madre, terriblemente cerca la una de la otra, pero sin llegar a tocarse.
Nada más hacerlo, comencé a oír a alguien cantando una especie de canción. No había oído algo así antes, ni tampoco me sonaba de ningún lugar, pero era realmente abrumadora. Estaba cargada de sentimiento, de emociones entremezcladas... Pero sobretodo un aura de tristeza, de dolor.
«Solo tienes una oportunidad»
De nuevo oí esa voz, pronunciándo la misma frase pero susurrante. Lo que antes era un aviso se tornaba como una advertencia, el tiempo se agotaba y aún no sabía de qué...
Respiré cada vez con más dificultad hasta que sentí que alguien entrelazaba mi mano con la suya.
De un momento a otro toda la oscuridad del momento desapareció, intercambiándolo por energía cálida y suave. Era la primera vez que sentía esa sensación. Mi corazón golpeaba mi caja torácica dificultándome un poco el respirar pero no de una forma desagradable, sino como una emoción que crecía y te dejaba sin aliento pero con calidez.
En mi mente apareció una imagen...
Dos colas de Na'vi se entrelazaban con suavidad a la vez que sus cuerpos se rozaban con cada respiración. A su alrededor se podía sentir una aura más poderosa que la propia Pandora, algo nunca antes visto...
Un amor entre dos almas, tan puro como para arrasar todo a su paso.
No eran tanto las imágenes, sino las sensaciones. El sentir que había algo que amabas más que a tu propia vida, más que a cualquier cosa.
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Skawng // Neteyam
Hayran Kurgu❪ Neteyam ❫ -Toda la energía es un préstamo... que algún día hay que devolver ❪ 𝘓𝘪𝘦 𝘴𝘪 𝘰𝘦 𝘕𝘦𝘵𝘦𝘺𝘢𝘮𝘶𝘳 𝘕𝘢𝘸𝘮𝘢 𝘴𝘢'𝘯𝘰𝘬𝘶𝘳 𝘮ì𝘧𝘢 𝘰𝘦𝘺ä 𝘈𝘵𝘢𝘯𝘵𝘪 𝘯𝘨𝘢𝘭 𝘮𝘰𝘭𝘶𝘯𝘨𝘦 𝘔𝘪𝘱𝘢 𝘵ì𝘳𝘦𝘺𝘵𝘪, 𝘮𝘪𝘱𝘢 '𝘪𝘵𝘢𝘯𝘵𝘪 𝘓𝘢𝘸...