Capitulo 26
Tobie
Un leve sonido me despierta de mi relajante sueño para hacerme mirar en dirección a el baño. La luz esta encendida y todo aún esta oscuro. Caigo otra vez en la cama y dejo caer el brazo en el lado de Siena. Entonces descubro que no esta. Vuelvo levantar la cabeza, extrañado y miro en dirección del baño. La puerta se abre de golpe y ella sale. Lo que más me extraña es que este vestida. Levanta la mirada a mi y queda inmóvil.
– Oh, demonios. Te he despertado.– dice acomodandose una coleta para después sentarse a mi lado.
– ¿Qué haces despierta?
– Voy al gimnasio.
– ¿Qué hora es?.– digo estrujandome los ojos y ella me pasa las manos por el cabello.
– Las cuatro y media de la mañana.
– Oh, vamos, azucarilla. Vuelve acostarte.– digo atrayendola y ella niega con la cabeza mientras sonríe.
– He perdido una semana entera. No puedo faltar otra más. Además me gusta ir al gimnasio.
Ella se pone de pie y enciende la lámpara. Entonces la detallo mejor, lleva puesto un top gris, unas zapatillas negras y unos pantalones deportivos que le quedan muy provocativamente. Toma su sudadera que esta en la silla del escritorio para ponersela y volver a sentarse.
– Ya me tengo que ir. Nos vemos en clases.– dice dandome un beso en los labios y yo dejo escapar un suspiro de frustración.
Entonces su móvil suena y ella lo saca del bolsillo de su sudadera. Lo miro de reojo y es un mensaje de una tal Tavy. Siena sacude la cabeza con una sonrisa y vuelve a meter el móvil.
– ¿Una amiga?.– diga ya despierto por completo y ella sacude la cabeza.
– No. Es un amigo.
– Mmmmm ya.
Espera... ¿Ha dicho amigo? ¿No que decía Tavy?
Me incorporo y ella levanta una ceja, confundida.
– ¿Qué haces? Vuelve a dormir.
– Ya me has despertado por completo. Además hoy tengo entrenamiento y que mejor que iniciar el día con una buena rutina en el gimnasio.– digo sonriendo y ella pone los ojos en blanco.
– Ay, Tobie. Estas loco.– dice sacudiendo la cabeza mientras mira su móvil.
– Dame cinco minutos.
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Siena me ha dicho que el gimnasio no queda muy lejos de la residencia y ha dicho que es mejor que nos fuéramos caminando y la verdad no me gustó nada saber que ella siempre a esa hora sale para hacer ejercicios. El camino a el gimnasio fue casi parecido a una película de terror combinada con una de suspenso. Cada segundo que pasaba pensé que en cualquier momento saldría alguien y nos apuñalaria. Pero llegamos sanos y salvos.
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El Vuelo Del Fénix - Trilogía Fénix (#1) [+18]
Teen FictionNo muchos conocen la historia del fénix y como varias personas nos vemos reflejados en el. Cómo salimos de las cenizas después de habernos quemados por completo y volver con un brillo inigualable. Bueno así sucede con nuestra Siena. Para nadie es un...