THE GLASSES

14. ROCK

Skay Strong

Un par de lagrimas rodeaba mis mejillas, la paz inmensa que sentía en ese momento era única. 

—Eres un án...—las palabras ni pueden salir de mi boca, es algo increíble. 

—Realmente pensé que no lo era, antes de estar así, solo era un humano. Te veo y me recuerdas a mí, Skay.

Observo cada detalle, su voz es muy dulce, suave y melodiosa, algo que te da paz.

Su aura brillante resplandece encima de él y me doy cuenta que le da vida a los árboles que se encuentra destrozado por la batalla.

Mis pensamientos los tengo bloqueado, sé que podría leer mi mente y también mi corazón, pero, estoy a la defensiva de que no sea real y sea el enemigo, hay una gran posibilidad de que él es real, porque no veo signos de maldad ni siquiera mi instintos están alerta antes su semejanza. Noto que su mirada está un poco perdida, divaga en mi cristal y muestra una leve sonrisa.

Doy un paso hacia él—¿Humano, acaso eso es posible? Digo, no sé cómo funciona el ciclo de un ángel o como llegar a ese puesto pero...—trato de ver sus movimientos. Y no siento amenazas realmente es un ángel de luz.

—No eres la única, no debes sentirte amenazada, ni prófuga de algo que solo eres inocente y que por una ambición te quieran destruir. Tus pensamientos deben ser limpios y puros, no tengas remordimiento, nadie sabe lo duro que ha sido tu vida, sobrevivir a tantos monstruos y momentos no agradables a tu corta edad—da un suspiro y luego me observa, su rostro irradia belleza—eres grandiosa Skay.  Tu deber es volver a traer la paz y el equilibrio de ambos mundos.  Tu mamá está orgullosa.

Mi cuerpo sintió una sensación al escuchar esa palabra "mamá" luego  dió justamente en mi corazón para poder soltar un par de lágrimas. Me hace falta su calidez, ni siquiera su rostro recuerdo. Absolutamente nada de ella. Es un impulso querer conocerla y saber su cariño.

—No es necesario que digas una palabra, tu corazón ya me habló. Solo vine a dejarte un código dentro de tu cristal y en el momento indicado sabrás utilizarlo, sé que puedo sonar muy...

Sus palabras quedaron entre cortadas, lo tomé desprevenido con un gran abrazo.

—Gracias, aún no se tu nombre, hay cosa que no entiendo, este mundo, mi origen todo es un poco confuso y...

—Tranquila Skay poco a poco la verdad saldrá pero The Glasses ha sido corrompido por la maldad y debes restablecerla, lastimosamente no recuerdas nada, pero solamente tú podrás, tus poderes se van desarrollando a la evolución física, mental y espiritual y no todos en esta dimensión son buenos, debo irme pero luego nos comunicamos. Tus amigos vienen.

Sentí la energía de ellos, él estaba en lo correcto.

—¡¡Skay!!—los muchachos se acercan, y veo que él se va desvaneciendo poco a poco con una luz inmensa.

—Por cierto, nunca te presentaste...—dije, pero él ya se había ido.

Gracias Angelito, creo que así te llamaré. Sonrío.

—¿Skay estás bien?—dice Charles preocupado.

—Estoy mejor que nunca, siento que debemos irnos, en Rock alguien me espera.

—¿Quién Skay?—dice Jackson.

Observo su mirada fría, y ninguno sabe quién nos espera, pero presiento que me espera algo en esa dimensión, aparte, sé que me encontraré a mi hermano o sino a su creador—Muy pronto lo sabrás—digo y luego le sonrio.

Tomo un breve respiro y siento la inseguridad de Melanie, y me hace recordar a mi familia, cuando se preocupaban y leía sus pensamientos para luego ayudarlos. De verdad los extraño y necesito saber de ellos. Me acerco rápido y le digo—Tranquila, vamos a seguir un camino nuevo, los llevaré conmigo.

Sonrío levemente viendo la línea azul que creó Nick. Gracias niño.