7. OSCURO II

152 6 7
                                    

—¡Reacciona, hermana!—dice Jay nervioso.

Todo era una visión, pero fue tan real que primera vez tengo miedo. Mis visiones nunca fallan.

Veo a Jay y está asustado. Sus ojos de ternura me transmiten ese sentimiento no grato, un desespero que no puede hacer nada para ayudarme.

—Tranquilo todo estará bien—miento, sé que se avecina algo malo, tengo que protegerlo. Aunque mi visión nunca ví a mi hermano.

Le doy una sonrisa, me acerco a las ventanas y las cierro para que la luz de la luna no afecte.  Aún pienso lo que me dijo Charles, que no saliera y mucho menos a medianoche.

—¿Por qué las cierras?—pregunta de manera suave y sutil.

Lo observo y...

—Skay...— esa voz es tan familiar, volteo a todos lados pero no hay nadie.

Nada de esto me gusta y siento que ya lo viví.

Es mi visión, se hará realidad.

Estoy escuchando las voces. Y debo estar alerta y proteger a mi hermano, si subo veré el destello de la habitación y entraré a aquel espejo, pero si evito esa predicción de igual manera pasará, sea con el mismo destino o diferente a esa escena, hay muchas posibilidades. 

—Skay no me evites, ven antes que sea demasiado tarde—esa voz otra vez, pero eso no estaba en mi visión, algo ha cambiado.

—¡SKAY!—grita mi hermano con mucho dolor, observo que unas cadenas los toman de las piernas, las mismas que ví y no pude hacer nada.

Alargo mis uñas y trato de cortar las cadenas pero no puedo, vuelvo nuevamente y nada, es imposible, mis rasguño nos les hace daño. Él gime de dolor. Trato de utilizar mis manos para separar las cadenas de mi hermano, pero no puedo, mi poder está muy débil.

—S-Skay, por favor ayúdame, estoy asustado.

Mis lágrimas salen fácilmente, pero no es tiempo de llorar, pero verlo de esta manera me duele. Trato de tomar las cadenas pero lo que hago es hacerle daño, si mi visión era que me mostraba ir a ese espejo entonces iré.

El amor que le tengo a mi familia es lo más importante, ellos son mi motores por la cual lucho y me mantengo viva. 
Sin ese amor tendría es oscuridad en el corazón. No importa, si sacrifico mi vida, al verlo los vale.

—Hermano, dile a papá que todo va estar bien, he tomado una decisión y es que voy a...

—No, n-no vayas hermana, hay otra solución, Jack va a...

—Lo siento hermanito, pero necesito que vivas y juegues como otros niños, no debes temerle a tus miedos porque ellos te harán crecer como persona, mereces tener paz, jugar, amar, vivir sino tienes esa estabilidad vivirás lleno de amargura, dolor, sufrimiento, y no acabará lo que estamos pasando si sigo escondiendome, no estamos enfrentando la realidad y cuando lo haga todo volverá a la normalidad, solo recuerda que te amo Jay—sus lágrimas rodaban sus mejillas fácilmente.

Me doy la vuelta, sé que debo hacer, pero... pero siento una gran energía, un aura muy bello, jamás presenciado por mi naturaleza, esa luz la percibo de...

—¿Jay?—dije dudosa, al ver la gran energía que resplandece en él, las cadenas se van apartando poco a poco. Él sigue llorando, y me observa con tristeza, noto que está lastimado.

—No quiero que te vayas, una vez que cruces ese espejo, irás a tu destino y no volverás hermana, lo he visto, he llorado, se que a mí corta edad debería estar haciendo otras cosas, pero no somos una familia normal, eso no existe, y lo siento hermana pero lo que pasará es porque no voy a dejar que estés sola, también tomé una decisión espero que me perdones. 

THE GLASSESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora