THE GLASSES

21. PERDICION

—¡No puede ser!—dice Hazune con tanta impotencia, se acerca y me apunta con un cuchillo en mi garganta—mientes, por lo que te hice a tí y a tus amigos—trata de enfatizar con tanta furia—Dijiste que ibas hacer lo imposible por este reino, te crees dueña de este mundo, y niña ten presente que yo soy la única reina, y tú una impostora.

—No miento, es la verdad, entré en su mente.

—Imposible, nadie puede ver las memorias de un Ghelas. Ni Hazune—interrumpe Nicolás. 

—De verdad....—traté de explicar pero su ira puede más.

—No estoy para engaños, Nine es una Ghela muy poderosa, buscada hace miles de años, y vienes tú—aprieta el cuchillo un poco más fuerte que siento que si sigue puedo sangrar—y vienes tú de la nada, a decir que ella es una de la realeza.

—Primero, no me he considerado mentirosa y ya llevo mi vida escondiendome por decir y creer lo que pienso, aquí con el nuevo supremo reprimen a tu gente, tu pueblo lleva años pidiendo libertad.

Inmediatamente tomo su brazo y lo empujo ella trata de tomarme pero la esquivo rápidamente.

Saca su espada para apuntarme, ya lo intuía así que me apresuro y tomo la del principe. Noto algunos rostros sorprendidos de parte de la realeza del norte.  La dos espadas hacen ecos de fuertes ráfagas, empujando con determinación a nuestros alrededores.

—Lo siento Hazune, pero yo quiero saber la verdad, tengo todo el derecho, y haré que este mundo sea mejor, con o sin tu ayuda—con esas palabras, la amarro junto a su fiel compañero, con las plantas que estaban a su alrededor, lanzo un hechizo que no puede desatar en menos de 72 horas, asi me da la oportunidad de llegar al Centro de The Glasses.

Esta dimensión la había leído varias veces, aquí práctican hechicerias las capas moradas, porque son más libres y no hay escrúpulos. La dimensión "Perdición" prácticamente es para estos tipos de cosas, tenía que saber cada parte de ellas, tenía que ser más lista que Hazune, porque ella es poderosa y aún mis poderes no los controlo del todo. Lo que si no me acuerdo es como transporté a todos acá.

—Ya veo—una sonrisa cínica se refleja en su rostro, y dejo atras mis pensamientos—Lo tenías todo calculado, nos trajiste aquí, sabiendo que en esta dimensión los hechizo prohibidos son más fáciles de ejecutar y legales, ya que aquí no se cumplen las reglas.

—Te pago con la misma moneda. Agradece, que no te duermo y que en eso no te mueres, como tú lo hiciste conmigo.

—Estas perdida Skay, la próxima no te tendré compasión, estarás muerta. Es una promesa.

—La próxima seré tu salvadora y me tendrás cuentas, vámonos príncipe Alexander—alzo mi mano y desaparezco las ataduras que les hizo Hazune a los demás—necesito buscar primero a unos fieles amigos.