ESTA HISTORIA DA COMIENZO EN EL CAPITULO 41 DEL MANGA.
EL ASESINO MAS SANGUINARIO QUE EL MUNDO HAYA CONOCIDO HA SIDO LIBERADO EN TOKIO, POR LO QUE ALGUNOS SUPER HEROES TENDRAN QUE HACER EQUIPO CON LAS LYCORIS NO SOLO PARA DETENER A TAN BRUTAL AMEN...
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Hospital central de Tokio, 30 minutos antes.
Harumi y las chicas se encontraban a la espera de alguna noticia por parte de los doctores con respecto a la obtención de las muestras de sangre para Ume, mientras que Kurumi continuaba investigando en todas las bases de datos de los bancos de sangre de Japón.
- ¿encontraste algo Kurumi? –pregunto el maestro Mika.
-Aun nada, ya investigué en todos y cada uno de los bancos de sangre del país y ninguno posee el tipo de sangre de la señora Ume. –contesto Kurumi.
-Pero seguro tiene que haber alguna muestra en algún lugar. –dijo Shirapon.
-Créame Harumi-San, revise con lujo de detalle no solo en bancos de sangre, sino en laboratorios y hospitales y ninguno posee dicha muestra.
-Entonces eso quiere decir que Ume-San va a... -dijo Nene.
-Eso me temo... todo indica que a la señora Ume no le queda mucho tiempo y no hay nada que podamos hacer. –dijo Kurumi.
-No, eso no puede ser... pobre Ume-San. –dijo Harumi.
-Creo que lo único que podemos hacer por ella es orar. –dijo Shirapon.
-Esto tiene que saberlo Mei-Mei... voy a tratar de contactar con ella de nuevo. –dijo Himeko.
Pero en ese momento, el doctor aparece ante Harumi y el grupo.
-Buenas noticias, ya tenemos la muestra de sangre para la señora Ume. –dijo el doctor.
- ¿Cómo paso eso? –se preguntó un desconcertado maestro Mika.
-Bueno al principio habíamos perdido toda esperanza en encontrar la muestra de sangre, hasta hace unos minutos que un hombre llego a la recepción preguntando por Ume Aihara, le preguntamos si era algún familiar suyo y como respuesta, este saco de un maletín un par de bolsas que contenían el mismo tipo de sangre que necesitaba la señora Ume, en estos momentos ya comenzamos con la transfusión, ahora todos pueden estar tranquilos ya que con esto la señora Aihara vivirá.
-oh gracias a dios, por un momento pensábamos lo peor. –dijo Himeko.
-Nos gustaría conocer a la persona que le salvo la vida a Ume-San para darle las gracias. –dijo Shirapon.
-Desde luego, se encuentra en la recepción en este momento, síganme. –dijo el doctor.
En instantes, Harumi, Himeko, Nene, Shirapon, el maestro Mika, Mizuki y Kurumi fueron a la recepción para conocer a aquella persona que logro conseguir la muestra de sangre para Ume, al llegar el doctor señalo a un hombre de porte elegante el cual vestía un traje verde obscuro y corbata negra, el cual estaba conversando con uno de los doctores.
