Capítulo 42: Quien mejor puede conocer el pasado, parte III.
La hija de un preciado amigo.
Luego de que el señor Bernardo me dijera que Luciana fue en su día una famosa y reconocida actriz, me dediqué por varios días a verme todo el repertorio de películas en las que ella había aparecido, y entendí por qué llegó a ser tan exitosa. Cada trabajo que hizo era increíble, y cuando pensaba que su actuación no podía ser mejor, veía la siguiente película en la que trabajó y me sorprendía mostrándome algo cada vez mejor, e incluso la gran variedad en las personalidades de sus personajes y el talento que tenía para poder hacer que el espectador sintiera lo que ellos, me enamoró.
Con ello, no me refiero a que en ese momento estuviera enamorado de Luciana, para mí, el mundo se había vuelto gris desde el momento en que Victoria había fallecido, y estaba convencido de que aún si Luciana tenía una vida parecida a la de Victoria y llegaban a haber momentos en los que me recordara a ella, eso no sería suficiente para que yo amara a Luciana, porque no me veía estando enamorado otra vez, además de que, para alguien como yo, que trabajaba bajo las órdenes del señor Esteban, no podía permitirme tener sentimientos que dificultaran mi misión.
Salí al mundo como Nael Halffter, un exitoso empresario que había ascendido con rapidez, fue realmente extraño al principio presentarme en una oficina como el jefe de todos y no tener nada que hacer, pues yo solo era la imagen pública del dueño de la sucursal de supermercados, el que hacía el trabajo, era un hombre que había accedido a atribuirme todos sus logros luego de que el abuelo del señor Esteban, el señor Tahiel Roger, le lavara el cerebro.
Pronto vi en los periódicos la noticia de que el esposo de Luciana había muerto en un accidente, aunque yo sabía que ese no había sido un accidente, sino un asesinato cometido por 14-17-22, el hermano más pequeño de Blaise, quien, aunque sólo llevaba dos años desde que había perfeccionado su poder y comenzó a hacer misiones, era por mucho, el arma homicida más hábil que el doctor Dean había creado, y la favorita del señor Esteban, aunque por supuesto, a Blaise y a Asher no les hacía ninguna gracia que su hermanito brillara como asesino.
Me presenté al funeral como un conocido del fallecido, realmente no había muchas personas presentes, y la única que lloró fue Luciana, mientras que sus hijos, Andrés y Renata, parecían indiferentes ante la muerte de su padrastro, y hasta un poco aliviados, cosa entendible por la clase de basura que escuché que era.
Es por eso que sorprendió ver a Luciana tan acabada, luego de verla como una hermosa y elegante mujer a la cual admirar, la Luciana de aquel día estaba por los suelos, se había vuelto muy delgada, las mejillas las tenía tan hundidas como las tendría cadáver, sus ojos se veían hinchados y vidriosos, y debajo de ellos tenía unas ojeras tan oscuras que ni el mejor maquillaje podía cubrir del todo, su pelo tan brillante y sedoso de color rubio se había vuelto crespo, y noté también algunos moretones en sus brazos y piernas. De verdad me sentí en presencia de Victoria una vez más.
Cuando terminó el entierro, los hijos de Luciana salieron corriendo del lugar sin esperar a su madre, y el resto de las personas le ofrecieron breves palabras de aliento a la viuda que no parecían entrar en sus oídos. El señor Bernardo, quien también se encontraba ahí, me hizo señales de que me acercara a ella aprovechando que ya todos los demás se habían ido y ya solo quedábamos nosotros, así que, tras un largo suspiro, me obligué a caminar hacia la viuda y hablar con ella.
Terminé volviéndome, una vez más, en un par de orejas útiles que una mujer llena de dolor necesitaba, escuché las mismas quejas que Victoria tenía sobre su esposo, le gritaba, la golpeaba, la obligaba a tener sexo aún si ella no quería, llegaba a casa ebrio, le era descaradamente infiel, pero la diferencia entre ambas era que Luciana en realidad no amaba a su esposo...
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Ojos Color Violeta.
General FictionEn un mundo en el que existen algunas personas con habilidades sobrehumanas, Dalila Eisenhide nació con el poder de distinguir a las personas comunes de quienes tienen esas habilidades, y por razones desconocidas, es apresada dentro de su propia cas...