🔹El gigoló y ella 🌸 [Terminada]

~22~ ✨

4 meses después...

Marinette

Nuestra relación seguía muy bien, bueno, éramos una pareja normal, con sus más y sus menos, sus lindos momentos, peleas, y reconciliaciones.

Adrien estaba bien, ya que superó todo lo vivido, aunque ese día lloró porque ver a su tío le había hecho remover todos los recuerdos, pero ya todo había pasado, y ahora estábamos centrados en ser felices y en nuestra relación.

Él había encontrado un trabajo, y era dar clases particulares de piano, ya que él, a la edad de 15 años tocaba el piano.
Las clases las impartía en nuestra casa, ya que Adrien tenía un piano allí.

Estaba preparando la cena, y cuando la terminé, me quedé observando a Adrien y a uno de sus alumnos de 10 años, Adrien se veía alegre y simpático.

Ad: ¡Muy bien! Ya hemos terminado. Te veo el próximo día.

Niño: ¡Vale Adrien, gracias! Mi papá te hará llegar el dinero por Bizum.

Ad: Jaja, vale, gracias peque.

El niño abrazó a Adrien y él sonrió.

Niño: ¡Chao!

Ad: Chao *sonriente*

El niño salió por la puerta, y fuera estaba su madre, los dos se marcharon a su casa.

Ad: Señorita Dupain, la veo que me observa usted mucho...

M: *ríe* es que se ve un profesor maravilloso, señor Agreste.

Ad: ¿Ah, sí? ¿Tú crees?

Adrien me besó con suavidad.

Ad: Te quiero mucho.

M: Y yo más.

Ad: Nah, no lo creo, yo más.

M: Adrien.

Ad: Marinette.

Ambos nos reímos y nos volvimos a besar, esta vez con pasión.

Ad: ¿Vamos a la habitación?

M: Me parece bien, pero espera aquí, ahora vengo. Tengo una sorpresa para ti.

Ad: ¿Ah sí? Pero si aún quedan 2 semanas para mi cumpleaños.

M: Lo sé, lo sé, pero no es eso. Tú espera, ahora vengo.

Ad: Vale, no tardes.

Unos minutos después...

Ad: Uy, Marinette, has tardado mucho.

M: Que va, he tardado 3 minutos.

Ad: Pues eso es mucho para mí.

M: *risa* Que tontillo.

Ad: *risa* Oye, ¿Y esa bata? ¿Qué hay aquí debajo?

M: Mm.. una cosa.. *tímida*

Ad: *sonrisa* Quiero abrir mi sorpresa.

Dijo mientras tocaba la cinta de alrededor de la bata.

M: No, aún no.

Me senté a horcajadas sobre él y lo besé, enredando mis dedos en su pelo.
Mientras él me agarraba la cintura y mi trasero.

M: Mm.. guarrillo, no me toques el culo *risa*

Ad: *risa* perdón, perdón... *Beso en el cuello*

Ambos nos seguíamos besando, y se sentían tan bien sus besos que me empecé a mojar y él a ponerse duro.

Y el roce de su erección contra mi intimidad me hizo mover las caderas inconscientemente.

Ad: Mm.. amor, vamos a la cama..

M: Vale..

Adrien me cogió en brazos y una vez llegamos a la habitación, él me tumbo en ella y siguió besándome el cuello.

Ad: Mm.. ¿Puedo abrir ya mi regalito?

M: *Risa leve* Si.

Adrien me quitó la bata, revelando mi ropa interior.

Ad: Que sexy.. aunque... ¿Por qué nunca había visto esta?

M: Mm.. no me mires tanto..

Ad: No puedo evitarlo. Me gusta demasiado lo que tiene debajo...

M: Bueno, esta ropa interior es nueva, por eso no la has visto nunca...

Ad: Pues es preciosa, pero ahora mismo voy a tener que deshacerme de ella, muy a mi pesar...

Adrien me quitó las braguitas, dejándome solo con el sujetador y luego, se deshizo de toda la ropa de su cuerpo.

Adrien se tumbó sobre mí y reanudó sus besos en mi cuello.

Su mano se dirigió hacia mi intimidad, tocó ligeramente mi clítoris, haciéndome gemir.

M: Adrien, vamos a saltarnos esta parte, te quiero ya dentro de mi..

Ad: Uy, estamos más impacientes de lo normal... ¿No, señorita Dupain?

M: Si...

Adrien me besó en los labios y unos segundos después su miembro se deslizaba dentro de mi.

Ad: Ah.. Joder.. que mojada..

M: Ah.. cállate..

Adrien se rió con un tono de excitación, mientras se movía en un ritmo lento que poco a poco aumentaba de velocidad.

Luego de unos minutos, se salió de mí y se sentó en la cama.

Ad: Ven aquí amor.

Me levanté y me puse a horcajadas sobre él mientras le agarraba suavemente de los hombros.

Ambos nos besamos, pero me separé jadeando cuando su miembro se metió otra vez dentro de mi.

Ad: Ah... ¿Estás bien? No lo hacemos mucho así...

M: Mm.. estoy bien.. Ah.. se siente.. muy bien..

Adrien me movió con lentitud sobre su erección, provocando gemidos fuertes en ambos.

Él, pasó sus manos por mi cintura, alcanzó el broche de mi sujetador y lo desabrochó mientras yo me sujetaba de él y seguía gimiendo, para luego quitármelo y dejarme completamente desnuda.

Los dos jadeábamos en la boca del otro sin parar.

Adrien me besó el cuello, la garganta y finalmente mis pezones.

Ad: Joder, me queda poco.. *aprieta los ojos*

M: Ah.. y a mi..

Me abracé a Adrien, gimiendo fuertemente sobre su hombro, mientras él hacía las penetraciones cada vez más profundas y rápidas.

Luego me separé de su abrazo, lo miré y ambos nos besamos con mucha dificultad, mientras nos movíamos más rápido.

Ad: Marinette... No puedo más... Me corro...

M: Ah.. hazlo dentro.. estoy con las pastillas.. ah..

Adrien detuvo el movimiento de mi cadera a la vez que me apretaba con suavidad el trasero, mientras se corría dentro de mi, provocando mi propio orgasmo.

Ad: Ah.. mierda.. no me aprietes.. o no me detendré..

M: Perdón...

Ad: *risa casi inaudible* No importa...

Me abracé a él mientras Adrien seguía experimentando las replicas de su orgasmo.

Ad: Ah..

Una vez terminó, me volvió a tumbar en la cama, y ambos, con una leve capa de sudor seguimos besándonos y acariciándonos un rato más, hasta quedarnos dormidos.

Continuará...