Maldición, pensé que no me enamoraría de ti. Pero debo decir que tenías la razón.
Me habías dicho que yo—de ti—me enamoraría, y pensé que mentías. Pensé que era pura mentira, pero mírame. No puedo sacarte de mi mente. No puedo irme a dormir sin que mi corazón diga tu nombre.
Aunque no te tengo en mis brazos, quiero darte cariñitos, quiero darte besos.
Pero no significa que tengas la razón.
Aunque debo de admitir, sí la tienes. Pero si me enamoré de ti, quiero pensar que es lo qué querías, aunque puede que me equivoque.
Pero, si me equivoco, entonces no tenías la razón.
El problema no es la razón, es que—yo por ti—siento mucho amor.
Sabiendo el problema. ¿Todavía quieres andar conmigo?
No espero una respuesta, aunque contigo yo me quedaré.
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Una Gotita
PoesíaNo hay necesidad de una descripción cuando hablamos de poesía. Ódiame con intensión, pero recuerda, eso no es valentía. Por cada lagrima salida de ti, puedo darte miles razones para verte sonreír.