Prometido.

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Tras haber terminado Ana se había retirado a su habitación para descansar un poco antes de levantarse para tomar un vuelo. Se había puesto una de las camisas blancas de los chico para no dormir desnuda y se fue a la cama. El par insaciciable decidió quedarse a beber en la sala pero esa idea de beber únicamente fue el pretexto perfecto para follar durante toda la noche de una u otra forma.

Para cuando el reloj marcó las cuatro de la mañana Taehyung aún poseía el cuerpo del castaño sobre el más largo sofá. Ambas piernas de Jungkook estaban sobre los hombros del pelinegro y lo tomaba por el cuello mirándolo a los ojos con pasión. Sus embemestidas lentas acompañadas de los armoniosos jadeos mientras Jungkook le acariciaba con fuerza la espalda de arriba abajo dejando algunos arañazos.

Tae, casi amanece, Ana se irá hoy.

—¿Qué importa? Nos ha visto antes cogerrespondió con dificultad sin dejar de moverse.

Jungkook gimió.

Vamos por ella antes de que se vaya. —hizo muecas.

Taehyung se detuvo mirándolo con el seño fruncido.

—¿Qué tienes en mente? —salió de él.

Jungkook tomó aire reponiendose.

—Se irá temprano ¿porque no ayudamos a que despierte?

Sonrió poniéndose de pie, le dio la mano para ayudarle a pararse también.

—Eres un jodido pervertido Jungkook.

Caminaron juntos a las escaleras para ir en busca de la chica.

—Empiezo a creer que te gusta más Ana que yo —dijo volteando a verlo alzando la ceja.

Jungkook sonrió mirándole también.

—Qué absurdo comentario, te amo a ti, pero se que cuando ella se vaya no habrá otra mujer que yo desee tocar con la misma intensidad.

Abrieron la puerta despacio y entraron encontrándose con la chica cómodamente dormida boca arriba con los brazos abiertos, una sencilla sabana la cubría de la cintura para abajo y por arriba solo tenía la camisa de alguno de los dos.

—Quizá deberíamos dejar que duerma un poco más —habló el castaño al verla tan tranquila.

—Por supuesto que no, ya estamos aquí desnudos y excitados, además mi erección solo duele más cuando la veo tan indefensa, ven, toma esto —recogió unas calcetas escolares en la mesa de noche y se las dio. —Ata cada una de sus manos a los costados de la cabecera.

—¿Porque haríamos eso? —preguntó obedeciendo.

Taehyung no respondió, espero a que lo hiciera con cautela para no incomodar a la chica. Una vez atada retiró la sabana notando que estaba solo en su camisa y desnuda de abajo. Taehyung se lamio los labios pero le dio la primicia a su amado.

—¿Quieres probarla?

Jungkook asintió sonriendo, rodeo la cama para quedar frente a ella, le tomó las piernas subiendolas a su abdomen y comenzó a lamer con movimientos lentos. Poco a poco la chica comenzó a moverse al sentir el cosquilleo y fue la luz verde para el castaño quien comenzó a succionar con algo de fuerza. La habitación quedó en silencio con el único sonido de los leves jadeos que Ana soltaba de vez en cuando y su piel al ser soltada por los labios de Jungkook.

Despertó confundida mirando abajo, lo único que vio fue el cabello del castaño hundido en su vulva, movió la cabeza a un lado y noto la presencia de Taehyung que la miraba fijo.

Clase 708  ||TaeKook|| [Concluida]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora