Capítulo 15

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Asher

--Hola hermanito-

--Hola Ian- Acababa de llegar al salón después de la estúpida misión en el aeropuerto.

Se nota que él tal Jeff te cae mal.

No sabes cuánto.

--¿Dónde están los demás?-

--Esperando a que los policías puedan entrar al aeropuerto para volver aquí-

--Lo que significa que estaremos un ratito solos-

--Por desgracia- Respondí de mal humor, él tal Jeff me había cabreado demasiado.

--Oye, sé que en el fondo me amas, cambiando de tema, ¿Qué tal con tu Julieta?--

--La besé-- ¿Qué sentido tenía intentar ocultarselo si al final me iba a hacer decírselo?

--¡¿Qué tu que?!--

-- Si, la besé y luego dormimos juntos-- murmure

--¡¿QUE?! ¿Cuándo pasó eso?--

--Anoche--

--Ah, bueno, entonces te perdono porque no ha pasado mucho tiempo. ¿Le has pedido ya que sea tu novia?--

--No y no creo que vaya a hacerlo pronto--

--¿Qué? ¿Porque? Se nota desde lejos que ambos os morís de ganas de estar juntos--

--Y es verdad, me muero de ganas de estar con ella, pero no es el momento. Dadan está suelto por ahi, quiere matarla a ella y a los demás y quiere utilizarnos a nosotros como cebo. No es un buen momento para empezar una relación, además Dadan podría enterarse y utilizar eso en su contra.--

--Ay que dulce e inocente eres, hermanito--

-- ¿A que viene eso ahora?--

-- A qué no hace falta que le des razones a Dadan para que te utilice en su contra, ya tiene suficientes. A esa chica le importas mucho, estoy seguro de que arriesgaría su vida por ti, esta loca por ti.--

--¿Eso crees?-- Pregunté, se que me había hecho amigo de Leila, lo que no estaba seguro de si sentía lo mismo que yo.

--Segurisimo, veo como te mira, le gustas y mucho. Y Leila es una superheroina, simpre va a tener algun villano intentando acabar con ella, a sí que no pongas la excusa de que no es un buen momento, a este paso nunca lo será. No pierdas el tiempo comiéndote la cabeza con gilipolleces y hazla mi cuñada--

-- Lo hare, gracias-- Me encantaba tener a Ian de hermano aunque aveces nos molestaramos, era maravilloso tener a alguien con quien hablar y que te aconsejara.

--De nada. Te preocupa algo más, ¿verdad?-- No me lo estaba preguntando, lo estaba afirmado. A veces me preocupaba que me conociera tan bien.

--Hay una chica en mi instituto...--

--¿Te refieres a Leila o derrepente te gusta otra?-- Me interrumpió.

--No, solo me gusta Leila. Ahora, déjame terminar. Resulta que a esa chica, Madison, también le gustó y...

--Vaya, ahora le gustas a dos, cuidado que se te junta el ganado--

--¡Ian!-

--Vale ,vale, ya me callo. Prosigue--

--Madison ha intentado acercarse a mi varías veces y eso a Leila no le gusta nada. Hoy han empezado a insultarse en medio de la calle solo porque Madison me dijo que me fuera a hablar con ella.--

--¿A donde quieres llegar con todo esto?--

--A que me da miedo que algún día Madison provoque a Leila y ella acabe usando sus poderes. No quiero que revele su secreto a todo el mundo por culpa de esa chica.--

--Demuéstrale a Leila que solo te gusta ella, pídele ser tu novia o algo asi. Demuéstrale que solo hay sitio para ella en tu corazón y haz que sea más segura de si misma en lo que respecta a ti. Ella es lista, si Madison logra provocarla es porque piensa que puedes desarrollar algún tipo de sentimiento romántico hacia la otra chica. Demuéstrale que eso no va a pasar.--

--Tienes razón, gracias. Tengo que demostrarle que ella me gusta y mucho, que me encanta todo lo relacionado con ella.--

-- Hazlo--

--Lo hare, gracias Ian-- Me levante para ir a mi habitación a pensar en cómo debía hacer eso cuando oí que me llamaba.

--Asher-

--¿Si?-- Me di la vuelta lentamente.

--¿Estás enamorado de Leila?-- Me quede un par de segundos pensando, ¿lo estaba?

-- No, aún no, pero pronto lo estaré-- Me estaba enamorando de ella sin darme cuenta.

Ian asintió con la cabeza y se fue hacia la cocina, yo retome mi camino hasta mi habitación.
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Los chicos habían vuelto hace rato del aeropuerto. Tenía que hablar con Leila, tenía que decirle lo que sentía.
Estaba en mi habitación pensando que debía hacer respecto a Leila, no había salido de mi habitación desde mi charla con Ian. Decidí no posponerlo más y le mandé un mensaje a Leila.

Yo : "Sube a mi habitación, necesito hablar contigo"

Su respuesta no tardo en llegar

Enana<3: "Vale, ya voy, dame un minuto. "

Un minuto después oí como llamaban a mi puerta.

--Soy yo, cuco-- Dijo al otro lado de la puerta.

--Pasa-- Estaba sentado en mi cama cuando ella entró. Llevaba unos vaqueros rotos, un top negro y jna camisa de cuadros rojos, le quedaba perfecto. Estaba preciosa. --Hola enana.--

--Hola cuco, ¿Qué pasa?--

--Ven, siéntate-- Lo hizo, cuando se sentó al lado mía me giré para que quedáramos frente a frente. --Hay algo que quiero decirte--

--Pues dímelo, no te compliques, cuco.--

--Haces que suene tan fácil.--

--Es fácil, las cosas solo son complicadas cuando las complicamos nosotros.--

--Tienes razón. No sé por donde empezar.--

--Pues por el principio, no te compliques.-- Me quede embobado mirándo esos ojos que tanto me gustaban.

--Me gustas, Leila, me gustas y mucho. Eres tú el motivo de todas mis sonrisas tontas, de todos mis pensamientos locos y de todas mis fantasías, que espero se vuelvan realidad.-- Ya está, lo dije. Sus labios se curvaron hacia arriba, estaba sonriendo. Eso era buena señal, ¿no?

--¿En serio?--

--Claro que si, joder, me encantas.-- Acto seguido ella se acerco a mi y me beso, me pillo por sorpresa. Cuando me di cuenta de lo que estaba pasando le seguí el beso. Cuando nos separamos habló.

--Tu también me gustas, y mucho, y joder, también me encantas.-- Esta vez fui yo el que la beso, la cogí de la cara y estampe sus labios con los míos. Baje mis manos hasta su cintura y la acomode hasta que se quedó sentada en mi regazo. Nos separamos cuando nos hizo falta el aire.

--Hacia tiempo que ya no eramos amigos-- Comente.

--¿Entonces que somos?--

--No lo se pero yo no puedo ser tu amigo, no quiero, quiero ser algo más--

--Lo eres-- Dijo con esa sonrisa que me encantaba.

--Quiero que seas mi chica, mi novia, ¿Qué dices?-- Pregunté algo temeroso por su respuesta.

--Joder, Asher, claro que si-- Volvimos a unir nuestros labios.

Mi novia. Mi chica. Mi enana. Joder, sonaba genial.

Era el jodido chico más feliz del universo.

El chico de ojos verdes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora