Capítulo 18

5 0 0
                                    

Zenda

~ Una hora antes~

Estábamos en el salón hablando sobre la relación de Leila y Asher.

--La verdad, yo ya sabía que estaba pasando algo-- Dije. Mi mejor amiga acababa de contarnos que estaba saliendo con Asher, era obvio que yo iba a saber algo. Ahora se acababan de ir a dar un paseo los dos juntitos. Eran super monos pero a la vez muy cursis.

Yo no era quien para opinar. No tenía novio. Aunque llevaba años enamorada del mismo chico.

¿Que le vamos a hacer? Él solo me veía como una amiga, nada más.

A Wener le encantaba leer y no creía que yo llegará a las expectativas que tenia por culpa de los libros. A si que tenía que callarmelo todo y esperar a ver si algún día él lograba sentir algo por mi.


-A mi me encanta la pareja que hacen-- Volví a centrarme en la conversación cuando Wener habló.-- Son como la pareja de un libro--

Ay, él y sus libros.

-- Yo veo a mi hermano más feliz desde que la conoció-- Está vez hablo Ian.

--Y yo veo un brillo en los ojos de L cuando habla de Asher.-- Mi hermano era el único que llamaba a Leila L, es un apodo ¿Corto? Bueno, literalmente es una letra, pero viniendo de mi hermano era bonito y con cariño.

--Yo creo que no es momento para parejas, ahora mismo deberíamos estar buscando a Dadan hasta encontrarlo. Hay que acabar con él.--Chay era muy estricto, pero le teníamos mucho cariño, le queríamos mucho. Más de una vez nos había sacado de problemas, era un grande.-- Pero se ven felices juntos, después de lo que está pasando Leila se lo merece.-- Casi siempre parece tener corazón de piedra, pero esta es una de las pocas veces en las que la piedra se rompe y nos deja ver un poco más de sus sentimientos.

Les dejé charlando en el salón y me fui a la cocina a por algo de beber. Abrí la nevera en busca de algo fresquito. Cogí el zumo de manzana y cerré la nevera.

En cuanto cerré la nevera lo primero que vi fueron los ojos marrones de Werner.

--¿Que haces aquí?-- Fue lo primero que pregunté. Tenerlo tan cerca no me dejaba pensar bien.

--Es la cocina, puedo venir cuando quiera.-- respondió burlón, se estaba riendo de mí el capullo.

--Claro-- Rode los ojos y me di la vuelta. Antes de poder dar un paso, Werner me agarró del brazo. Me di la vuelta y lo encare. No dejaba de mirarme y me estaba poniendo nerviosa.

-- No te vayas-- Dijo suplicante. Sinceramente prefería quedarme aquí con él. Estaba tan cerca de él que podía ver las pocas motas azules de sus ojos. Podía oler su colonia masculina, creo que a partir de ahora será mi olor favorito.

Mis ojos bajaron hasta sus labios y lo único en lo que pensaba era en las ganas que tenía de besarle. Pero ¿Que me lo impedía? Le agarre la cara con ambas manos y la acerque a la mía hasta que junte nuestros labios.

Werner me siguió el beso enseguida. Su boca sabía dulce. Al principio el contacto era suave, pero luego, como si necesitara más, me agarró la cara con las manos y profundizó el beso. Mis manos fueron automáticamente a su pelo. Sus labios eran cálidos y suaves.
En un rápido movimiento nos dio la vuelta hasta que mi espalda dio con la encimera. Poso sus manos debajo de mi culo y me impulso hasta que me quede sentada en la encimera, haciendo que nuestras caras quedarán a la misma altura .Nuestros labios no se separaron ni un segundo.
No quería separame de él pero la falta de aire no me permitió seguir besándolo. Me separé de él despacio y apoye mi frente en la suya. Nuestras respiraciones estaban aceleradas.

--Tu también me gustas-- Rompió el silencio Werner.

Iba a responder cuando la alarma sono.

--Mierda-- Fue lo único que dije. Baje de la encimera en un salto y me dirigí a la sala de mandos, donde ya estaban Zack y Chay. --¿Que pasa?-- Justo en ese momento Werner entro a la habitación.

--Las cámaras de tráfico han localizado a Dadan en un callejón cerca de aqui-- Me respondió mi hermano.

--¿Y a que estamos esperando para ir?-- pregunto Chay.

--Vamos-- Dijo Werner.

.................................................................

Lo primero que vi al entrar al callejón fue el collar de Leila tirado en el suelo.

¿Dadan y Leila en el mismo sitio? Esto no pintaba nada bien.

A lo lejos divisé un cuerpo tirado en el suelo encima de un charco de lo que parecía ser sangre. Automáticamente me asusté.

--¡Leila!-- Corrí hasta donde estaba el cuerpo. Al oírme gritar, Zack, Werner y Chay vinieron hasta donde estaba.

--¡Asher!-- Grito mi hermano al reconocer a la persona que estaba en el suelo.

--¡Joder! Eso es mucha sangre-- Comento Werner.

--Hay que sacarlo de aqui-- Estaba de acuerdo con Chay.

--¿Que ha pasado?-- Pregunto Zack.

--¿Donde está Leila?-- Pregunté asustada. Estaba Asher en un callejón, tumbado encima de un charco de sangre. Leila no estaba por ninguna parte pero su collar estaba en el suelo. Y Dadan había sido visto por aquí.

¿Que cojones había pasado aquí?

El chico de ojos verdes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora