~ 48 ~ 🍽 Un paso a la vez 🍽

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Nervios.

Era lo único que tenía, por dos simples razones, la primera, estaba por entrar al salón donde serían sus clases, la segunda, el peliblanco estaba con ella en esa clase.

Entro al aula y muchos de los ya presentes se le quedaron viendo, unos sorprendidos y otros impacientes.

Muchos alumnos la recordaban, la tenían etiquetada como la alumna ex quinta consejera, muchos sabían de su potencial tras ser parte de vencer a Hayama en el examen donde fue expulsada al tener la victoria Yukihira, muchos lo sabían, y, ahora que ella estaba ahí, no durarían en poner aprueba todo aquello que sabían.

Y no sólo le conocían por eso, sino por ser un importante impulso en el nuevo cambio al agregar una SI, para el estudio de aquella cocina que ella práctica.

Los repentinos brazos de alguien abrazándole le sorprendió un poco, más solo lo acepto cuando noto de quien se trataba, aquella chica de cocina china y cabello morado le recibía.

Las risas de su parte aparecieron junto a un incremento de nervios por la tanta atención que tenía esos momentos, segundos después el profesor de esa clase teórica entraba y ponía orden, recibiéndola con palabras de bienvenida empezó la clase.

Se había posicionado aún costado de Hayama, quien le había indicado el lugar, y a su lado opuesto estaba su amiga, su primera clase y ya estaba bajo la mirada de muchos alumnos.

El día transcurrió normal a su parecer, descartando las 3 veces que varios alumnos se le acercaron para pedir una Shokugeki que terminó negando con la excusa de que quería reintegrarse bien antes de acceder a una.

Había estado atenta a todo lo que se veía en clases, en realidad nunca había prestado tanta atención e interés en alguna clase, pero debía ponerse al corriente y aprender todo lo que se había visto en el tiempo en el que no estuvo, agradecía a Erina por dar el consentimiento de la entrega del material aprendiendo ese tiempo para su estudio en la residencia donde estaban todos tras sus prácticas e investigaciones en sus correspondientes SIs.

Había acudido a Soma, a Akira, a Tadakoro y Takumi para que les explicara y les había agradecido por aquello.

Takumi no había dudado en asistir sin problemas a la residencia junto a Isami para enseñarle mejor. Aunque ambos haciendo la misma cocina era tan diferentes que le fascinaba aquello.

Shun le había explicado sobre ahumado y modos de emplearlo, Sakaki sobre curados y Tadakoro sobre todo lo que había aprendido en su repentino pero interesante viaje por el mundo.

Todo había cambiado tanto que le sorprendió y sobre todo le gusto, sus amigos habían cambiado, la rutina había cambiado, y sobre todo, ese peliblanco de piel morena había cambiado.

Esa día tocaba una plática que él daría y no había dudado en asistir, lo popular del laboratorio era increíble y los ojos emocionados y felices de Shiomi le habían encantado, se merecía eso y más.

—¿Por qué no se lo dices?— una voz a su costado le espanto haciéndole brincar levemente en el asiento

—¿A quién sobre qué?— respondió con otra pregunta, colocando su mano en el pecho donde su corazón latía rápido por el espanto

—A Akira sobre lo que sientes— la respuesta fue obvia, lo que ocasionó el ligero tartamudeo de la chica y la risa silenciosa de la contraria

—Alice, ¿qué dices?— la peliblanca sonrió a un más, Kurokiba estaba por detrás prestando atención a lo que sea que estaba anotado en la pizarra del frente—A todo esto. ¿Qué haces aquí?

—A veces asistimos a las conferencias de Akira, son muy útiles— volvió a hablar con obviedad haciendo que la pelinegra regresara su vista al chico, hasta ese momento había estado viéndole pero sabía que no le prestaba atención a nada de lo que él estaba hablando

SPICES (Akira Hayama)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora