𝗛𝗲𝗮𝗿𝘁 𝘁𝗼 𝗛𝗲𝗮𝗿𝘁 | 𝗝𝗟

O

Aún lo recuerdo como si hubiese sido ayer.

Sus amigables y grandes ojos mirándome con dulzura, pronunciando unas palabras que jamás olvidaré.

"¡Nos vemos el próximo fin de semana, Nini!"

Eso fue todo.

No volví a saber de ella.

Puedo recordar sus largos dedos acariciando mi cabello chocolatado y cómo tenía los orbes acuosos; cosa de la que no me percaté. Era apenas una niña, y yo realmente creí que volvería.

Me abandonó como todos.

Incluso si tengo a mi madre a mi lado, no es suficiente. Nunca lo será si quiero cerrar esta herida.

No puedes tapar el sol con un dedo.

Pero cuando ese mensaje llegó a mi bandeja de entrada todo mi mundo se derrumbó y cayó sobre mí, como si me hubieran dado una paliza.

"Estoy en la ciudad, Jennie. :)"

No podía creerlo cuando vi su foto de perfil. Estaba tan... diferente y tan igual a la vez.

Tenía el cabello por los hombros y ahora pintado de negro. Considerando que la he visto rubia y sin fleco, esto es totalmente diferente. Su sonrisa es cálida. Como si siempre hubiera sido feliz.

Como si nunca hubiera abandonado a su hija por once años.

Por supuesto que no le contesté, y de todos modos se esforzó en mandarme un mensaje cada maldito día. Es como si deseara que no me olvidara de ella, y para mi mala suerte estaba funcionando.
Pienso en ella día y noche y mentiría si dijera que no movería cielo y tierra para verle al menos una sola vez.

Recuerdo cuando era una pequeña niña y me fotografiaba en todos lados con su cámara nueva, en ese entonces. Cuando paseábamos, en pijama, recién despierta y con mi tutú rosado que usaba para ir a clases de ballet.

Y todo fue aún peor cuando estaba caminando por las frías calles de Los Ángeles y la vi, con su oscura sonrisa y ojos misteriosos.

[...]