12

590 93 9
                                    

— ¿Y bien? ¿Qué harás, Ruby?

...

— Creo que he dejado muy en claro mi posición, Rachel. Si tengo que alejarme de ti para estar con Lalisa, lo haré, y déjame decirte que no pierdo nada por hacerlo. Porque nunca recibí afecto de tu parte, absolutamente nada, siempre estás con tu novio idiota y no me prestas atención. — Iba a decirme algo, pero la interrumpí. — ¿Sabes lo que he sufrido por tu culpa? La alejaste de mi lado sin siquiera preguntarme, pero claro, era una niña, y por eso me tomabas por estúpida. Pero ya no más. No voy a permitir que sigas robándote mi felicidad cuando he estado sola toda mi vida a causa tuya. ¡Simplemente no! ¿Y sabes? Sí, amo a Lisa. La adoro con todo lo que soy y no voy a permitir que la alejes de mi lado jamás.

Finalicé, suspirando.

Pude ver en su rostro el horror; como si su pesadilla más grande estuviera hecha realidad. Como si fuese un monstruo.

¿Realmente lo soy por amar a alguien que "no tendría"?

No.

Soltó un jadeo lastimero, y pude ver que abrió la puerta y salió corriendo de la habitación. Acto seguido, un portazo.

Escuché los pasos rápidos de Lisa.

— Jen, amor, ¿Estás bien? — Se acercó a mi y tomó mi rostro con su mano.

— L-Lili... — Sollocé, y me envolvió con sus fuertes brazos. Se ancló a mis glúteos y me alzó, sosteniéndome como cuando era una niña pequeña.

— Bebé, todo va a estar bien... ¿Quieres hablar de lo que pasó? — Negué. — Está bien. Ya, mi niña...

Mi llanto se intensificó hasta llegar al punto de soltar lágrimas con violencia, hipar, jadear. Pero ella estaba allí para consolarme; acariciándome, besándome.

Realmente me parecía surreal que ella esté aquí; conmigo, y que finalmente, hayamos podido superar otro obstáculo más.

Pero, justo cuando creí que la tormenta había cesado, alguien tocó el timbre de manera insistente.

— Quédate aquí, voy a ver quién es. — Afligí mi rostro, y ella rió. — Sé una buena niña, JenJen, estaré de vuelta en un santiamén.

Atrapó mis labios en un beso lento, uno que duró pocos segundos, pero al menos pude deleitarme con su sabor por algo de tiempo.
Gemí cuando metió su lengua en mi cavidad bucal y apretó uno de mis pechos suavemente; estaba jugando conmigo.
Gruñí y carcajeó, levantándose y dejando mi cuerpo en el sofá.
Pasaron los segundos, minutos, y ella no venía. Me paré, dispuesta a ir a buscarla, ya se estaba tardando mucho.

Cuando salí de mi cuarto y me dirigí hacia la sala de estar, pude verlo.

Roseanne.

Jodida perra.

Estaba capturando los labios de Lisa en un beso apasionado. Mi madre no se inmutaba, simplemente tenía las manos a los costados y los ojos cerrados.

Me acerqué rápidamente, y fingí un carraspeo algo exagerado.

El rostro de mi pelinegra fue digno de enmarcar.

— ¡Oh, Jennie! — Sonrió hacia mí, alejándose del cuerpo contrario. — Me alegra que estés aquí.

— Lástima que no pueda decir lo mismo.
— Ahora yo sonreí de manera cínica. — ¿Ya te ibas? Lalisa y yo estábamos en algo importante. — Miré en su dirección.

Sus ojos me advirtieron que no la trate así, pero, me era inevitable.

— No. No de hecho. Quería quedarme a comer si es que eso no le molesta a Lili...

Apreté mis puños, intentando no golpearla.

Es obvio que estaba provocándome, pero al no recibir ningún regaño, siguió tratándome de esa forma tan insolente en la que suele hacerlo.

— Esto... Rosé. — La mencionada volteó. — Yo estoy muy ajetreada con el trabajo y no creo poder darte mucha atención. Lo mejor será que nos veamos mañana. — Sonreí.

— Oh... ¡No importa! Prepararé la cena para todas. ¿Qué les gusta? — Mi mueca triunfal se esfumó en segundos.

[...]

Ok, aunque deteste admitirlo, Roseanne cocinaba realmente bien.
Había hecho risotto, una de mis comidas favoritas, aunque ella no debía saberlo, pero estaba delicioso.

— Veo que les gustó la comida. — Sonrió.
— Bueno... Creo que ya podríamos ir levantando campamento. Es tarde y mañana tenemos que trabajar tu madre y yo. — Guiñó un ojo.

Asentí sin muchos ánimos, y levanté las bebidas, cubiertos, y platos. Lisa se encargaría de lavarlos y Rosé, se sentaría a tomar una copa del caro vino que compró mamá en su viaje a Italia.

Me fui a mi habitación y azoté la puerta. Segundos después, oí que Lisa venía detrás mía.

— ¿Se puede saber a qué se debe tu malhumor?

— Lalisa, ¿Me estás jodiendo? Después de todo lo que te dije... Te dije que te amaba, ¡¿Y ahora ella viene, te besa y se queda a dormir?! ¡Exijo una explicación! — Su rostro se endureció, pero no me echaría atrás.

— Entiende que no puedo dejarla, no aún, Jennie... Te pido que respetes eso.
— Inevitablemente reí, amarga.

— ¿Me estás pidiendo respeto cuando ni siquiera tú lo tuviste con tu novia? Debe ser una maldita broma. Te declaré todo lo que siento por ti, ¿Esto es lo que obtengo? ¿Que no tengas los huevos suficientes para decirle a Roseanne que me amas, que quieres estar conmigo y no con ella? — Reprimí mis ganas de llorar frente a ella.

— Jennie, yo...

— Vete de mi cuarto. — Demandé, y no se inmutó. — ¡Que te largues, carajo, vete ya!

Volteó y cerró la puerta con fuerza. Inmediatamente, rompí en un sollozo. Me arrastré hacia mi cama como pude y me envolví sobre las suaves mantas que consolaban mi llanto.

Ella estaba rompiéndome a cada segundo, y aunque así fuera, mi amor por ella era más grande.

No puedo dejarla ir. Simplemente no.

Pero su clara ignorancia sobre cómo me siento junto a ella me hacen sentir del carajo, aún más cuando la besó.

Cuando prestó sus labios a alguien ajeno a mí.

Dejé a mi mamá biológica por ella. Mis raíces, amigos, mi ciudad, mi vida.

Porque ella lo es.

Mi vida entera se basó en ella todo este tiempo, y al parecer, no logra comprender eso. No logra entender que dependo y vivo por su cuerpo y alma, que sin ella no sé qué me ocurriría.

Si las cosas siguen así, no voy a dudar en irme de aquí cuanto antes.

Lejos de ella.

Su amor cada día me rompe más. Es incluso bipolar la forma en la que reacciono a cada situación, pero no es mi culpa, simplemente Lisa logra sacar lo peor de mí.

[...]

¡Holaa! Espero que les esté gustando la historia.

Quería hacer un pequeño aviso; La historia no tiene mucho alcance, por ende, seria feliz si ponen mi libro en alguna lista de lectura o lo recomiendan a alguien que le guste el ship o BLACKPINK. No me siento muy segura de seguir con la escritura, porque me motivan ustedes, sin embargo, al no obtener votos o comentarios siento un vacío. Espero logren entenderme :(

𝗛𝗲𝗮𝗿𝘁 𝘁𝗼 𝗛𝗲𝗮𝗿𝘁 | 𝗝𝗟Where stories live. Discover now