Fue un beso demasiado hermoso, como el primero. Me sentí en las nubes. Nuestras lenguas se enredaban y todo a mi alrededor no existía, solo estábamos Lucas y yo en este momento.
Él fue quien finalizó el beso después de unos segundos.
-Alejandra Collins- dijo colocando mi cabeza entre sus dos manos
-¿Sí?- pregunté
-¿Me concedes una segunda oportunidad?
He aquí la pregunta. Era muy pronto para contestarla. ¿Qué hay de Leo? Bueno, está esperando una bebé de Kimberly, no tengo muchas esperanzas con él.
-Alejandra- Lucas me alejó de sus pensamientos
-Lo siento Lucas, tengo que pensar bien las cosas... Me enamoré de otra persona en todo el tiempo que estuve sin ti, y ahora no sé ni lo que siento. Perdóname, de verdad- me volteé y me fui
Caminé lejos, y no volteé, no lo hice. Estaba demasiado confusa, demasiado. ¿Que iba a hacer? Mis sentimientos estaban completamente encontrados. No sabía que sentía por Lucas, no sabía si era amor o era demasiado cariño, no sabía nada. Sin duda, ese beso revivió muchas cosas que habían muerto para mí, pero no, definitivamente no lograban llegar a lo mucho que sentía por Leo. Pero él ya no estaba, hace semanas que no sabía de él y estaba esperando un hijo.
Saqué mi celular y miré la hora, ya estaban a punto de ser las 4, mamá tenía que estar demasiado preocupada por mí. La llamé.
-¿Donde estás hija?- fue lo primero que preguntó
-Mamá, no me vas a creer quien está aquí- le dije
-Ay! ¿No me digas que ya lo sabes? Traté de que fuera una sorpresa- me confundí
-¿Qué?- pregunté idiotizada
-Sí, quería que te sorprendieras al verla y ahora ya lo sabes- continuó diciendo
-¿De quién hablas mamá?
-De Isabela hija, ¿de quién más?- mis ojos se abrieron del tamaño de dos grandes pelotas y mi sonrisa aumentó
¡Mi mejor amiga estaba aquí!
-¡Voy para allá!- sin pensarlo, salí corriendo hacia mi casa, con la felicidad de que me iba a encontrar finalmente con Isa...
Corrí, corrí tan rápido como pude. Una sonrisa en mi rostro apareció. ¡Iba a ver a Isa! Después de tantas semanas, iba a verla.
Llegué finalmente a la estructura que guardaba el apartamento y subí.
Se me había olvidado traerme las llaves, así que toqué. La puerta se abrió y quien estaba en frente de mí era una rubia de ojos castaños a la cual amaba con toda mi vida.
-¡ISA!- me abalancé sobre ella
-¡ALE!- la felicidad de las dos salía por nuestros poros
-¿Cómo estás? ¿Cómo llegaste aquí?- pregunté
-Bueno, larga historia...- dijo
-¿Cómo están todos? ¿Tu mamá? ¿Tu papá?- pregunté
-Anda... pregunta por el que verdaderamente quieres preguntar- mi mejor amiga me conocía demasiado
Miré al suelo
-¿Como está?- pregunté sin mencionar su nombre porque me dolía
-¿Quieres dar una vuelta?- me preguntó sin contestarme -Así te hablo de él mientras me enseñas esta bonita ciudad...
Acepté.
Salimos del apartamento y decidí ir hasta Downtown, para que viera la fuente de colores y todo lo hermoso que ese lugar tenía para ofrecer...
(...)
-Entonces...- dije mientras caminábamos por las calles -¿Como está? ¿Ya tiene a su bebé? ¿Como la llamaron? ¿Se parece a él?
Comenzó a llover y miré al cielo como buscando una respuesta.
-¡SI!- gritaron detrás de mí -Estoy bien, y no! No es mi bebé- me volteé y en medio de toda la gente que corría para taparse de la lluvia, se encontraba una persona con una chaqueta negra y pelo azabache completamente mojado que pude ver entre medio de las grandes gotas de agua que nublaban mi vista. No hablé -Siempre supe desde el primer momento que no lo era.
Lo miré detenidamente.
-Tengo muchas cosas que explicarte Alejandra- sus palabras se perdían por el extenso ruido de la lluvia -Si me das solamente un chance de explicártelo todo, te juro que me largo de tu vida y no regreso, pero no quiero que me veas como lo que no soy... No quiero que sigas creyendo cosas que no son de mí Alejandra. Te amo, y quiero que sepas que el hecho de que te estés alejando de mí no va a cambiar mis sentimientos por ti. Y vine hasta aquí para encontrarte, no me voy sin que me escuches.
Agradecí al cielo que las gotas de lluvia ocultaban mis lágrimas...
-Leo yo...- no dije nada, corrí hacia él y lo besé como siempre había querido pero nunca había podido, besé a la persona que me hizo sentir de nuevo
El mejor beso de mi vida lo estaba teniendo en estos momentos. Lo amo, oh Dios, si que lo amo. No hay dudas de que esto que siento por él es demasiado grande, pero mis sentimientos por Lucas también están.
-Alejandra- dijo finalizando el beso -Déjame explicarte...
-No tienes nada que explicar mi amor. Te creo, creo en ti y fui una estúpida por no darme cuenta todo lo que estaba pasando y creerle a Xavier- le di otro pequeño beso
-Él fue quien incendió tu casa Alejandra...
Me alejé.
-¿Qué?
-Sí, fue el quien provocó el incendio en el que casi pierdes tu vida Alejandra...
-Pero, ¿cómo?- no quería creer eso
Sabía que Xavier no era quien aparentaba, pero no lo creí capaz de querer matarme.
-Ahora estás a salvo Alejandra, él no te hará daño.
-Pero está aquí Leo, Xavier está aquí y quiso forzarme a estar con él...
Leo miró para otro lado y entre dientes dijo...
-Se repite la historia...
-Leo...- dije confundida -¿Qué historia?
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Lo mejor de mi vida
Novela Juvenil¿Será casualidad que después de 6 años, te encuentres con una persona y cambie completamente el rumbo de tu vida? Conozcan la historia de Alejandra, una joven con apenas 16 años, loca, libre, soñadora y de carácter fuerte. Un día de verano, no tan c...