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- ¡Sí! No te preocupes tanto, estoy bien. - El castaño reía detrás de la línea telefónica.

Una semana pasó y el día de la presentación ya a llegado. Minho se hallaba demasiado entusiasmado y contento por su novio, por ende no dejaba de llamarlo y mandarle mensajes preguntando por cómo estaba él y su bebé. Temía que algo le pasara en su ausencia.

Jisung guardó su celular en la mochila y terminó de alistar un poco su vestuario, mentiría si digiera que estaba listo, los nervios seguían presentes desde el día anterior y su corazón se aceleraba por el solo hecho de verse a si mismo en el escenario.

- ¿Ya estás? - Johnny lo veía con un gesto de tranquilidad. Ahora se sentía demasiado pequeño, el hombre a su lado le pasaba en altura y aseguraría que por eso él sería quien logre captar la mayor atención del público.

- Todo listo. - Sonrió ocultando los nervios interiores, dentro de poco sería su turno.

El ruido de aplausos se estuchó hasta los camerinos, eso significaba que continuaban. Las cortinas fueron abiertas y sus cuerpos eran alumbrado con luces circulares, al momento que la música sonó, sus cuerpos danzaron al ritmo de la música con bastante fluidez y delicadeza. Era una danza tan llamativa y artística que la atención de todos iba directo en ambos.

Los pasos eran coordinados y sus cuerpos parecían pequeñas plumas por la suavidad en que se movían; Y para finalizar, ambos se envolvieron en un cálido abrazo. Los aplausos y breves gritillos no tardaron en llegar.

Minho estaba en primera fila y sus ojos brillaban ante lo angelical que lucía Jisung, su cuerpo y rostro eran bastante despampanantes, los movimientos y gestos, era como ver un lindo ángel. Lo mejor es que era su hermoso omega.

El telón se cerró nuevamente, Jisung apretó su pecho y alzó su cabeza para ver a su acompañante.

- ¿Estuvo bien, verdad? - Johnny asintió eufórico y sin pensarlo se lanzó al pequeño cuerpo, sosteniéndolo con fuerza.

- Estuviste bien, estuviste bien. -

Aquel acto fue un poco inesperado, sabía que Johnny no era muy fanático del contacto físico, mucho menos ahora estando sudado. Cuando pasaba tiempo con su amigo Mark, cada vez que este trataba de rozarlo se alejaba rotundamente, no se dio demasiados rodeos y correspondió con dificultad debido al pequeño bulto en su vientre y el calor corporal después del baile.

Jisung se removió un poco incómodo cuando su estómago fue apretado y entendió de inmediato.

- No controlé la fuerza, perdón. - Dijo, simulando mirar de reojo a otro lado cuando en verdad veía el rellenito estómago del omega. - Oye, ¿Te gustaría ir a Lotte World? Tengo dos entradas, y Mark no quiso ir conmigo.

Jisung lo tomó por sorpresa, en verdad le encantaría ir, era uno de sus lugares favoritos aunque solo tuvo la oportunidad de ir una vez cuando niño. Aún así recordaba cada detalle del parque de diversiones.

- Yo... - Pellizcó su brazo en leve, sintiéndose en aprietos al no saber que contestar.

- No me des una respuesta ahora, puedes decirme más tarde. -

Intercambiaron sinceras sonrisas, antes de retirarse del acontecimiento. Jisung por su parte se apresuró hasta la salida, sus grandes ojos se estiraron por la hermosa imagen, Minho lo esperaba con un hermoso ramo de flojeles en las manos.

No lo dudo y corrió para aproximarse a su novio e impulsivamente dio un salto hasta él, enredándose en como un koala, cosa que casi hace caer al peli negro por el repentino peso.

- Cariño no hagas eso, puede ser muy brusco para el bebé. - El omega hizo un puchero y bajó sus ojitos hasta el pequeño volumen en su vientre, si tan solo...

cold kingdom - minsung !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora