CAPÍTULO III: ALMOST

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ATENAS, GRECIA

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ATENAS, GRECIA.

Puedo haber sido un buen día, pero Lisa tuvo que salir temprano esa mañana, pudo ser un buen día, pero Jennie tuvo que encontrar todos esos documentos en donde se veía claramente que grandes sumas de dinero eran agregadas a nombre de Lalisa Manobal

¿Quién era Lalisa Manobal?

Jennie se preguntaba cómo es que la tailandesa tenía tanto dinero, sabía que Lisa tenía un pequeño trabajo como editora de modas en el que ganaba poco más de dos mil euros al mes, pero en estos papeles la cantidad sobrepasa los diez mil euros mensuales. También sabía que Lisa no venía de una familia adinerada y pocas veces tenía contacto con ellos.

Ahora que lo piensa, constantemente hace salidas a horas extrañas, nunca dice con quien habla, no sabe como se llaman sus padres, no tiene un horario fijo para trabajar, prácticamente Lisa es una desconocida para ella.

Repentinamente Jennie comenzó a sentir un poco de miedo... ¿Quién era Lisa en realidad? ¿Estaba involucrado en algo ilegal? ¿Tráfico de personas? ¿Huye de la policía? ¿Mató a alguien?

Jennie quería llorar tan solo de pensar, justo antes de que su mente pudiese formar un catastrófico escenario, la puerta fue abierta revelando a Lisa con un par de bolsas en ambas manos.

—No creerás lo que acabo de ver... estaba en el super cuando... —Lisa se detuvo a ver que Jennie la miraba fijamente con un poco de temor reflejado en sus facciones —Oye, bonita, ¿estás bien?

—¿Cuál es tu nombre? —Jennie pudo ver la forma en la que el rostro de Lisa se transformó, pero eso fue quizá durante un par de segundos porque rápidamente mostró una expresión confundida en su rostro.

—Lisa... ya lo sabes... Mi nombre es Lisa Hong, ¿por qué la pregunta? —Era un hecho que ahora Lisa estaba notablemente más nerviosa.

—Tu verdadero nombre.

—¿Cuál es mi verdadero nombre...?

—Lalisa Manobal —Dijo Jennie con obviedad enviando escalofríos por el cuerpo de Lisa... ¿Cómo es que ella lo sabía?

—No tengo idea...

—¡Deja de mentirme! —Bramo furiosa lanzando los papeles que había encontrado en dirección a Lisa, notando la manera en que su rostro palideció al ver de qué se trataba —¿Por qué?

—Bonita... —Lo que Lisa más temía estaba pasando, sabía que Jennie exigiría respuestas algún día, pero no pensó que sería justo hoy, sabía que probablemente estaría molesta, pero Jennie estaba más que molesta.

—Deja de llamarme así... no sé quién demonios eres, pensé que al menos conocía tu nombre, pero no es así. Probablemente ni siquiera te gusta el amarillo, incluso dudo que seas tailandesa.

—Lo único que omiti fue mi verdadero apellido, pero mi nombre si es Lisa y cada pequeña cosa que te he dicho de mí es cierta —Lisa trató de tomar la mano de Jennie, pero esta se retiró rápidamente, eso dolió considerablemente.

NO TIME TO DIEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora