La muerte es dulce; pero su antesala, cruel
Se giró sobre su sitio para andar detrás de aquel árbol, aceleré el paso no iba a permitir que se me fuera el hijo de puta, todo en el interior me gritaba que me alejara de él <<¿es que estás idiota?>>
No razonaba correctamente, tenía la rabia subiendo por la espina, colorándome el rostro con esa presión aplastante en la frente que te indica el punto máximo del cabreo, quería comenzar a gritar pero no quería atraer la atención, quería este momento,
— ¡¿Que haces aquí!?! ¿QUIEN TE CREES PARA ESTAR AQUI!?-exclamé en un susurro cuandolo alcancé, tomándolo con fuerza por el brazo.
—Necesitaba estar aquí, ha sido difícil todo esto, pero tenía que verte.
— ¿Difícil? Estás de broma, no ha sido difícil, ha sido un puto infierno y no puedo creer que tengas el descaro de aparecerte en su funeral.
—Es mi amigo, Hyunjin es lógico que vendría a despedirme de él, lo que pasó con Minho es trágico en verdad, no podría haberme perdonado nunca si lo hubiese dejado de esa manera.
— Pero, ¡¿entonces si puedes perdonarte el haberlo puesto en ese hueco para empezar?! Tú eres el motivo por el que estamos velando a leer Minho ahora mismo, no deberías estar aquí.
—Lo que sucedió era inevitable y sucedió por su imprudencia, si no hubiese intentado interferir con nosotros no habría tenido que llegar tan lejos— se acercó a mí con calma, extendiendo una mano para peinar mi cabello.
Lo habría conseguido de no ser porque levanté mi mano para detenerlo, tomando su brazo con fuerza manteniéndolo lejos de mi rostro.
—Estás demente, ahora no sé si estás loco o si eres un grandísimo hijo de puta completamente consciente, de cualquier manera estás enfermo y me haces sentir enfermo también, eres un puto cáncer, silencioso mientras crece lo suficiente para joderte toda la puta existencia, no tengo ganas de estar más cerca de ti, ¡no quiero saber más nada de ti!
Solté su mano con fuerza haciéndola a un lado para girarme dispuesto a volver a mi tarea, mis manos estaban llenas de tierra, tierra que ahora también formaba parte de la ropa de Changbin, mordí mi labio con fuerza, sentí como en mis ojos se acumulaba el agua salada buscando salir, pero no, no le iba a dar el gusto de verme vulnerable una vez más.
De un momento a otro, sentí un fuerte tirón de mi hombro obligándome a girar, mis piernas se cruzaron en la tierra como reflejo, extendí mis brazos buscando sostenerme de lo primero que tuviera cerca y era el justamente, quedé frente a frente a su rostro, por el movimiento la capucha se le había venido abajo, podía verlo completamente, podía ver su barba y su cabello que aun que corto, siempre era suave.
—Suéltame, enfermo— sentencié acomodando mis pies para retroceder.
No dijo nada, pero pude sentir la progresiva fuerza de su agarre sobre mi piel, no estaba dispuesto a dejarme ir, tenía toda la intención de mantenerme ahí, o eso creí hasta que comenzó a retroceder llevándome consigo, mis pies se movían torpemente siendo arrastrados por la tierra, mis zapatos no me servían en este terreno, pero él parecía venir bien preparado, giré mi cuerpo para "correr" al lado contrario de vuelta con los demás, pero sus manos bajaron sosteniéndome del torso abrazándose como una cárcel a mi cuerpo.
<< ¡NO! >> comencé a entrar en pánico una vez más, mi respiración se aceleró de un momento a otro haciéndome marear, la idea de volver a un sitio donde este cabrón pudiese llevarme me aterraba, la presión era suficiente como para trepar hasta mi cabeza sintiendo como la sangre se acumulaba, sentía una progresiva fuerza en la frente, << ¡No! ¡déjame de una vez!>>

ESTÁS LEYENDO
Missing [ChangJin]
Rastgele"En lo profundo de esa oscuridad, observando detenidamente, siempre estuve allí... preguntándome, temiendo, dudando. Soñando sueños que ningún mortal jamás se atrevió a soñar antes." El amor... ¿qué sabemos realmente de él? Changbin siempre ha amado...