Intenciones

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— ¿Hola?

Estaba en la cocina cuando escuché el saludo de Changbin.

Me asome desde la cocina esperando que se acercara más para responder.

—que bien que llegas, estoy muriendo de hambre.

Sonrió en su camino por el pasillo, sostenía un montón de bolsas, parecía que había ido por las compras de un mes entero, me acerque para ayudarle a acarrear las cosas, aprovechando para husmear dentro con la mirada.

— Traje lo suficiente para unas hamburguesas caseras, ¿te gusta la idea? — habló a mis espaldas con ese timbre animado, casi como una esposa consentidora.

—Me gusta, me gusta, — le sonreí de vuelta,

Estuve esperando toda la tarde por si Minho volvía, estaba esperando que viniera a echarme cosas en cara, que defendiera a Changbin, quería que me retara para retractarme, quería arrepentirme de lo que dije, decir que fue una broma, que era falso, que esto que tengo encima no fue él, ¡que la policía está enferma!

Quería arrepentirme de lo que hice, tenía en la cabeza la voz de lolo repitiendo <<estás jodido, amigo>>, ¿qué si fue y le dijo todo? Qué pasa si Minho encaró a Changbin y lo cuestionó por lo ocurrido, ¿cuál sería su reacción? Seguramente algún tipo de reprimenda, no quiero eso, estoy cansado de sentir dolor, causado por él o aparentemente por mí también, no importa la fuente, no quiero sentirlo más.

— ¿En qué puedo ayudarte? — me recargue en la isla central con los codos, con las caderas en alto y una amplia sonrisa para él.

<<pareces una puta>> parecía una puta, eso era un vago intento de coqueteo, sentía que tenía que ganármelo, tenerlo feliz, tarde o temprano se enteraría de lo que hice, de lo que dije, tenía que tenerlo bajo control cuando ese momento llegara, él me quiere a mí, quiere lo que tanto le cuesta conseguir de mí, amor, se lo daría para mantenerlo en mi mano, <<vamos Changbin, muerde el cebo>> esa era mi propia voz deseando que todo saliera bien, <<déjame consentirte>>

— ¿En serio? — tenía en sus ojos el brillo de un cachorro, casi podía ver una cola en su espalda meciéndose de un lado a otro, — ¡pues hay que cortar los vegetales! Yo haré la carne.

Era impresionante la capacidad de este tío de hacerme sentir culpable y a la vez, provocarme salir corriendo.

—Vale, lo tendré en un segundo, — me enderecé en mi sitio para acercarme a los cubiertos, tomé un cuchillo de esos grandes, bien afilado y una de esas tablas de cocina para comenzar a cortar.

Me había dado a la tarea de explotar más a fondo está área en su ausencia y descubrí que ya tenía de todo aquí, todo tipo de cubiertos y sartenes, era impresionante lo detallista que podía llegar a ser Changbin.

— Espero que también hayas traído patatas — murmuré apenas mientras pensaba,

— sí, las traje.

— perfecto.

Mientras preparábamos todo me sentía realmente cómodo, incluso creo que podía decir que me sentía feliz, de verdad feliz, me agradaba tener este acercamiento con Changbin, me agradaba el sentimiento de calidez y paz que emanaba de ambos en esta situación.

Una vez terminamos de preparar todo, le ayude a limpiar para no dejar todo el desastre, pero, él se veía tan cómodo también, estaba contento, y con motivo, tenía el tipo de convivencia que deseaba, pero eso no sería suficiente cuando Minho viniera a darle explicaciones, tenía que avanzar.

— Oye, tengo un problema en mi habitación, ¿me ayudarías a arreglarlo? — señale al girarme había el pasillo de mi habitación.

— ¿Un problema? ¿de qué tipo? — se acercó apenas un poco, — pero claro, te ayudo.

— En realidad no es nada complicado, será rápido, Changbin, — le llame con tono dulce, cómo en esos coquetos de broma que solíamos tirarnos entre nosotros, pero me aseguré de que me viera completamente cuando me retiré.

Anduve a mi habitación con algo de prisa para llegar antes que él, estaba completamente a oscuras, solo se podía ver un poco por la luz del exterior.

— ¿Qué pasa, amor ? Tendrás que encender la luz para mostrarme que sucede.

— ese es el problema, la luz no funciona — murmuré recargado en el apagador para no dejarle probarlo.

— ¿En serio? Qué raro, estás instalaciones son nuevas, — en su lugar, de acercó al centro de la habitación, estirando las manos buscando alcanzar la linterna principal.

No espere más, me acerque a él aprovechando su guardia baja para empujarlo directamente hacia la cama, lo derribe en ella con algo de brusquedad, y sin darle tiempo a cualquier reacción, subí sobre él tomando su rostro entre mis manos, acercándome a callar su próxima protesta con un beso.

<<Te estás convirtiendo en una zorra>> todo era para mantenerme a salvo, no es como que odie a Changbin, pero no hacía esto precisamente por nada,

— espera, Hyunjin — me separó poco después, confundido, pero con una suave sonrisa en los labios, — ¿qué estás haciendo?

— me he sentido muy solo cuando te vas, ahora quiero tenerte cerca, — murmuré bajando hacia su cuello, repartiendo un par de besos mientras volvía a encontrarme con sus labios.

Sin importar lo demás, descubrí que este contacto con él era algo que de verdad disfrutaba, continúe jugando con sus labios, soltando suaves mordidas por ellos, eran suaves y carnosos, sus manos subieron a sostener mis caderas con firmeza, poco a poco, las deslizo debajo de mi camisa para juguetear con mi pecho.

Parecía que mi cuerpo recordaba la otra noche y estaba ansioso por repetirla, mis caderas se movieron suavemente sobre las de Changbin, un lento frote, esperaba despertarlo, yo lo estaba haciendo, mi cintura hacia suaves círculos para tentarlo,

<<está noche, yo voy a devorarte a ti>> bangchan me lo había advertido, y creí que era consciente de ello, pero lolo también había hecho su parte, y tenía razón <<se siente bien>>

Missing [ChangJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora