Capítulo XI: Miriel - I

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Ministerio de Relaciones Exteriores, Reino Elfico

"Señores, la delegación que acompañara a las personas de la LUN ya están preparadas"

"Por el momento ellos se ofrecieron con el transporte, si no mal entiendo navegarán por un tiempo y en la madrugada irán volando en ese dragón de hierro"

"Todo parece bien, pero ¿por qué la reina decidió enviar a su hija en esta misión?, aún no sabemos las verdaderas intenciones de estas personas"

"Parece cuestionable, sin embargo, la reina está dejando sus últimas esperanzas en estas personas, sumado al hecho que su hija se ofreció de voluntaria"

"Creo que no somos los únicos que buscamos salvar nuestro reino, hace dos días llego un grupo de diplomados del Reino Enano junto a Bofur, su actual príncipe"

"Si no me equivoco también buscaron ir con los hombres de la LUN y fueron aceptados tras unas horas de dialogo"

"Bueno, dejando eso de lado LUN decidió hacer un pequeño itinerario antes de ir con uno de sus líderes, como ya sabemos primero irán en sus barcos metálicos hasta la madrugada, luego subirán al dragón de hierro para llegar a una de sus ciudades al amanecer, parece imposible debido a la distancia, pero viendo la velocidad que pueden alcanzar en los cielos puede ser razonable"

"Luego de eso aterrizarán en una de sus ciudades costeras para hospedarse en una posada llamada Be-Air, donde se les explicarán sus costumbres y leyes para evitar inconvenientes"

"Solo espero que todo salga bien"

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Puerto Mayhaik, 20 de enero del 2300 – 1142h

Muchas personas estaban en las costas cerca al puerto, las cuales generaban un bullicio que estaba a la par con el romper de las olas, ¿qué originaba esto?, pues frente al puerto había un puñado de embarcaciones metálicas, tan grandes que perecían casi imposibles de recrear para ellos.

Dentro del puerto estaba un grupo en especial por un lado había siluetas altas con un pelo sedoso que varía entre el blanco y rubio, con rasgos delicados inclusive en los hombres, estos eran los elfos que esperaban el momento para ser trasladados a aquel "portaaviones".

Con un objetivo similar, a su derecha estaban los enanos, como su nombre indica, estos no poseen una gran altura solamente están entre los 1.10 y 1.50 metros de altura, ellos son robustos con una barba y bigote que inundaban parte de sus caras, su color de cabello esta entre el rojizo y el negro.

Por último, estaban los que para el resto eran personas algo inusuales, estos eran los soldados americanos, los cuales portaban uniformes azules junto a sus armas, o varillas mágicas para los elfos y enanos, que resguardaban al grupo junto a los diplomados que vestían trajes negros y bien refinados.

Una pequeña ráfaga de viento marino paso por el puerto, aportando un olor salado, pero agradable el cual movió las vestimentas de las personas y el cabello de las mujeres. Con su mano libre Miriel acomodo sus mechones que estaban desalineando su imagen, aunque a pesar de ellos igual se veía hermosa.

"Señorita Brown, ¿puedo preguntar por qué haremos un itinerario algo ajustado?" consulta la princesa a la diplomada estadounidense, a pesar de sonar algo demandante y engreída ella quería conocer un poco de información debido a que era parte de su misión.

"Bueno, si vamos en barco tardaremos cuatro días, eso sí vamos a velocidad máxima, por lo que tomaremos la decisión de ir primero en el portaaviones hasta cierto punto, aprovecharemos este tiempo para hacer un intercambio de información básica entre nuestras costumbre y leyes con las de ustedes", cuando termino de hablar miro a su colega Alfonzo dándole a entender que continuará.

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