La cabeza me daba vueltas, las manos las sentía adormecidas y ni hablar de mis piernas, no sentís nisiquiera los deditos del pie.
Lo que si sentía era como toda la sangre de mí cuerpo bajaba lentamente hacia mí cabeza lo que me hizo pensar que estaba colgada de los pies.
Intente abrir los ojos para ver que estaba pasando pero no lo logré porque solo veía oscuridad, hasta que me di cuenta de que seguro me habían tapado los ojos con algo.
Intente moverme pero no podía hacer nada, nomás escuchar el ruido de las cadenas sonando cada vez que me movía un poco, moví las manos y sentí algo como unas cadenas así que tampoco podía mover las manos.
Ya estaba mareada y tenía muchas ganas de vomitar pero aún así trate de controlarme y respirar con normalidad sabía que mientras mas me alterar más sangre iba a bajar.
Todo era muy silencioso, no podía escuchar a nadie, no había gritos, voces, pasos, nada.
Estaba todo en absoluto silenció y la habitación estaba fria, tan fría que tenía la piel de gallina desde que me levanté, más porque en la nuca sentía una oleada de aire que me hacía temblar.Ya estaba por desesperarme cuando empecé a escuchar pasos fuertes y voces que hablaban el voz baja y rapida.
El sonido de una puerta de metal oxidada hizo que tenga muchos recuerdos olvidados y borrosos que odiaba tener pero al instante me obligue a no pensar en eso.Sentí como los pasos cerca de mi pararon y escuché una voz suave decir.
—Bajenla.
Me hice la dormida y no me moví en ningún momento, solo deje que me movieran a su antojo. Dos manos soltaron mis muñecas y otra persona me solto los pies, me sacaron la venda y yo seguía con los ojos cerrados pero senti como alguien me ponía sobre sus hombros volviendo a ponerme boca abajo y empezaban a caminar.
Abrí solo un poquito los ojos para ver si podía reconocer algo del lugar pero solo vi un piso marmolado y paredes color gris claro.
Volví a cerrar los ojos apenas vi unos zapatos de hombre para que no me descubrieran, no quería que supieran que seguía conciente o seguro empezaría a querer sacarme información, mientras más tiempo tenga para pensar un plan mejor.Escuché otra puerta siendo abierta pero esta vez la puerta no sonaba como oxidada si no como una puerta cualquiera de madera, el hombre me siguió cargando hasta que me soltó en algo suave y aterciopelado, me acomodo bien y después se separó de mí.
—Dejenle la ropa en ese sofá y que alguien venga en un rato para decirle que debe estar abajo en unos minutos.
—Si señor.
Dijeron los otros hombre al mismo tiempo y después de unos segundos se escuchó como la puerta se cerraba.
Abrí los ojos y lo primero que vi fue un techo color gris con detalles en blanco.
Me levanté un poco tocandome la nuca que me dolía y repase rápidamente todo el lugar, era un habitación de huespedes, tenía una cama grande, dos sofás, un puerta que supongo es el baño y una ventana cerrada protegida con barrotes.
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El Oscuro Sentimiento
RomanceElla es una asesina muy temida que tenía que terminar un trabajo en Japón pero algo salió mal y termino siendo la asesina privada de un mafioso muy peligroso. solo que se olvidó que no debía mezclar lo personal con lo laboral. "era matar para el no...