Me acompañó a dejarlo en la cocina y después nos dirigimos al salón.
Jeremy se saludó con Juli y Matt.
- ¿Qué ven? - preguntó el 16.
- Coco - respondió Juli.
Nos sentamos y comenzamos a ver la película.
La peli transcurrió lentamente. Jeremy y Matt se apoderaron de las papas mientras que Juli y yo de los Doritos.
Juli se había visto la película más de 15 veces, pero aun así, seguía viéndola con la misma emoción que la primera vez.
A la mitad de la película me levante para servir la gaseosa.
Me dirigí a la cocina por vasos.
Cuando regresé a la mesa vi a Sarmiento parado ahí.
- Te ayudo? - preguntó
- No te preocupes.
Sin embargo ignoró mi comentario.
El abrió la botella y comenzó a servir en los vasos que yo iba pasando.
Gran aporte el mío.
Hubo un silencio algo incomodo. Podia cortar con una tijera el hilo de la tensión que se había formado.
- Sabes, lo que pasó ese día en las entrevistas después del partido... yo eh..- dijo el.
- Jeremy..........
- Ya sirven? - Julian apareció de la nada.
El 16 y yo nos quedamos viendo y reímos.
- Ya enano - el agarro un vaso y fue al salón.
Volvimos al lugar anteriormente mencionado con los demás vasos.
Observe que la película iba en la parte en la que Frida le enseñaba su actuación a Miguel.
Todos estaban concentrados en la película, pero algo me distraía, solo, no lo sé.
La película transcurrió, y transcurrió, yo simplemente no me podía concentrar, prendía el celular, lo apagaba, veía al techo, intentaba dormir, pero no podía.
Luego de un rato, la película seguía pero decidí salir al patio trasero. Tal vez a tomar aire.
- Ya vuelvo.
Me levanté y salí del salón, me dirigí a la pequeña puerta de cristal y atravesando esta entre al patio trasero.
Hacía frío, y yo solo llevaba un top y un pantalón deportivo.
Fui a la hierba y me acosté en ella, después me puse a observar las estrellas. Brillaban más que las otras noches.
Sentía mi respiración y las brisas del viento.
- ¿Puedo hacerte compañía? - habló alguien.
Alce mi cabeza y vi unos ojos claros.
Reí
- No estabas viendo la película? -
- Bueno, prefiero estar aquí - cerró la puerta de cristal - Oh ah puedo?
- Claro, ven.
El caminó a mi dirección y se acostó a lado mío.
- Wow - dijo el, apenas vio el cielo.
- ¿Qué?
- Nunca había visto las estrellas de esa forma, ya sabes brillar tanto.
Su hombro chocaba con el mío. Y el silencio hacía que se escuchará la respiración de ambos.
- Sabes, no pensé que al ir a un evento de firmas conocería a alguien como tú.
- A qué te refieres?
El solo soltó una pequeña risa.
- Ah una presumida como yo acaso? - dije intentando animar el ambiente
- Si, exacto
Los dos reímos.
- Yo no pensé en conocer a un creído como tu.
- Lo sé, el mejor.
- No pienso alimentar tu ego - dije
- Que mal, quería que lo hagas.
Suspiramos y continuamos viendo las estrellas.
Nuestros cuerpos chocaban, yo sentía su respiración.
Mi mirada se concentró mucho en las estrellas de esa noche.
Me hundían en mis pensamientos.
Paso el tiempo, duró una eternidad.
Sentía algo sobre mi. Una mirada, algo que lo sentía desde hace rato.
Voltee a ver y vi esos ojos de los que me había enamorado desde el primer día. Esos ojos, que se posaban sobre mí. Su mirada sobre mí.
- ¿ Qué pasa? - pregunte algo nerviosa.
- Me gusta mirarte cuando no te das cuenta.
Noté que lo decía con una sinceridad única.
Y de mi boca, solamente salió.
- Ojala nunca dejes de mirarme así.
El soltó una sonrisa, al igual que yo.
- Que suerte la mía, ahora que lo pienso. - habló de nuevo.
- ¿Por qué?
- Por encontrarte.
Esas palabras, hicieron erizar mi piel. Noté que mis mejillas se calentaron.
