Ella es una fugitiva

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1979

Frankie se había ido. Dejando a una triste chica de 17 años sola y enamorada. Lo había visto partir en aquel auto, el fin de semana en casa de sus tíos había sido divertido. Habían amado a Frankie.

El regreso fue silencioso, al llegar y visualizar su pequeña casa, noto que debería volver a su vida normal. Bajo su mochila y ayudo a los mayores. Entraron y Marlena subió a aquella habitación color Lila. No era la primera ocasión en la que Frankie se iba luego de pasar un asombroso fin de semana juntos.

Tomo aquella mochila con cosas y saco la ropa que ocupo. Al fondo de está encontró un sobre y aquella camisa de Queen del bajista. Sonrió y tomó de prisa aquella hoja de papel.

Frankie a pesar de su facha de chico rudo. Era un romántico total. Siempre que se iba a Los Ángeles, le escribía a aquella castaña de preparatoria. Le contaba sobre su banda, sus desastres, sus espectáculos, sus amigos, fiestas, etc. Por supuesto menos de las drogas y las chicas.

Nikki había ido y venido los últimos meses. Quería llevarla con él. Pero no tenía que ofrecerle. Y con menos razón permitirían que eso sucediera. Amaba y respetaba a Marlena cómo nada en el mundo. Y para calmar aquellas aguas, mejor le escribía contando todo y enterándose de novedades. No le permitirían desposarla y menos si sus abuelos notaban que no tenía más que un bajo, su auto y problemas. A pesar de la edad. La estabilidad financiera era importante.

Nikki en Los Ángeles, comenzaba a tomar el papel y la pluma para volver a escribirle a Marlena. Y ella en Seattle comenzaba a leer aquella carta. De alguna manera ambos estaban ocupados en lo suyo. Se extrañaban y no llevaban un día separados. Aquel papel entre sus manos la hizo sonreír.

Marlena.

Nena, me tome el tiempo de escribir esto mientras recuerdo cómo dormías en mi casa, el vino tinto no es tú fuerte, pero cuando duermes pareces un ángel, no se cómo es que alguien tan idiota puede tenerte. Este fin de semana eche vistazo a cómo sería mi vida contigo, aquella vida normal de película. Familia, amigos y cosas hogareñas. Es algo demasiado perfecto.

Te amé cada segundo de este fin de semana, el verte sonreír, escucharte hablar, verte dormir, el que nadáramos, aunque hubiera sido mejor hacerlo desnudos cómo hace unos meses. ¡Adivino!, has leído eso y ahora pareces un jitomate. Eres un hermoso jitomate, te lo garantizo.

Cariño, últimamente siento un vacío muy notable cuando no estás, no hay nada simplemente, las tardes solitarias, los espectáculos sin emoción, las mañanas sin abrazarte, todos los días son un martirio. Pero no lo puedo cambiar aún.

Te amo demasiado. ¡Por Dios Marlena Parker!, eres lo más jodidamente perfecto de este mundo y te amo por eso. Quiero una vida a tú lado. Aunque los sueños que tengo no se cumplan al carajo. Trabajaría en una puta oficina sólo con tal de tenerte a mi lado para la eternidad. Aunque ambos sabemos que es más divertido llenar mi cabello de laca y hacer travesuras tras el escenario.

Te extrañaré nena. Volveré pronto y quiero que la pasemos bien, me cuentes cómo te ha ido. Pero, sobre todo. Trata de esforzarte y hacer cosas para ti. La Universidad está cerca y sería fabuloso que te gradúes y hagas lo que amas. Te apoyaré tanto cómo tú lo haz hecho conmigo. Prepárate que nuestras vidas están para cambiar.
Quizá y en poco tiempo cambie.

Te amo demasiado.

Frankie.

Aquella carta le gustó. Tomó la hoja y la guardo con el resto. Suspiro cuán enamorada y se recostó en su cama.
¿A qué se refería Frankie?, ¿Quizá regresaría a Seattle?

THE SIXXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora