Labios sabor Cereza

11

Nine no resivio el mensaje de vuelta y está preocupado.

—Deberia calmarse Yai es un chico fuerte y sabemos que no está donde no quiera estar— uno de los guardaespaldas de Yai intercede.

—No creo que con eso ayudes al joven Nine— responde el otro viendo cómo Nine paso de estar preocupado a enojado.

—Como puede ser posible que nadie vea lo que está sucediendo aquí?!— Nine está furioso.

—Y que es exactamente lo que está pasando?— Mangkorn llega a la mansión de Yai.

—Donde está Yai?!— Nine sujeta de la ropa a Mangkorn.

Mangkorn sonríe burdo.

—Nine que haces?!— el padre de Yai baja y detrás de él vienen mujeres de servicio con un montón de maletas.

—Señor dónde está su hijo?— Nine mira al padre de Yai.

—Esas son todas las cosas de Yai?— Mangkorn responde la pregunta de Nine.

Nine se gira y lo ve sorprendido, no podía ser eso posible.

—Señor...?— Nine está confundido.

—señoritas acompañen a Mangkorn, Nine ven conmigo— El padre de Yai se lleva a Nine y este simplemente ve como todas las maletas se van junto a Mangkorn.

—Escucha Nine, mi hijo se casará dentro de 3 meses, Mangkorn es el padre de mi futuro nieto por lo que te pido que te mantengas al margen, o no dejare que visites a Yai— el padre es duro.

—Por que hace todo esto, Yai es su único hijo y sabe muy bien que yo le gustó— Nine responde.

—Entonces por qué nunca hiciste nada?, Las señales estaban ahí, pero alguien más se te adelanto, respeta las desiciones de mi hijo— el hombre se retira.

Nine simplemente no lo va aceptar y va en busca de Mangkorn.

—Bastardo dónde está Yai?!— Nine sujeta del brazo a Mangkorn.

—Donde pertenece, conmigo— Mangkorn siente que ha ganado ahora que logro llevarse las cosas de Yai no habría impedimento para que esté permaneciera en su casa.

Nine suelta a Mangkorn sabe que retener a ese alfa es estúpido.

—Creeme Mangkorn, a quien ama es a mi no importa lo que hagas el tiempo te enseñará a qué no podrás tenerlo siempre— Nine se siente seguro de lo que dice.

Mangkorn no sabe por qué ahora siente celos de lo que Nine acaba de decir.

Mangkorn se retira no piensa dejar más tiempo solo a Yai.

.....

Yai llora desconsolado ha sido descubierto en su mentira y ciertamente tenía miedo de la reacción de Mangkorn, a pesar de que no hubo agresión física el siente que aún a perdido, no siente hambre, no siente más que ganas de llorar, entonces una idea llega a su cabeza si el bebé es la única razón para que Mangkorn este a su lado, el bebé debe irse.

Así que se levanta tembloroso y va hacia la cocina, ahí busca entre los cajones el objeto más filoso que puede encontrar.

Mangkorn llega al departamento con todas las cosas de Yai, realmente está noche va a reafirmar su autoridad sobre Yai haciéndolo gemir de placer por que su objetivo es que solo pueda pensar en él por todo lo dicho antes por Nine.

Mangkorn entra y un sonido metálico proveniente de la cocina le llama la atención así que deja todo de inmediato y va hacia el lugar del sonido.

—Yai?!— Mangkorn ve a un Yai sujetado del lavabo tembloroso y llorando.

—Solo déjame...— Yai habla con una voz débil.

—Que estás haciendo?— Mangkorn se calma un poco pero todo su sistema se pone nervioso y alerta al ver el cuchillo en el suelo.

—Hey que mierda estás haciendo?!— Mangkorn gira a Yai y abre los ojos sorprendido al ver toda la tristeza en su cara y aún así pensar que es lo más bonito.

—Dejame ir...no se que te ofreció mi padre pero no servirá de nada que me tengas aquí, yo no te amo, no importa lo que hagas incluso cuando lo hacemos pienso en otro para sobrellevar el asco que te tengo...— esto último realmente Yai no lo dice enserio, no odia a Mangkorn pero definitivamente aún no está enamorado de el, simplemente ninguno de los dos se conoce lo suficiente como para desarrollar algo.

El alfa de Mangkorn se siente erido y entra en desesperación no quiere perder a ese omega no sabe porque.

Yai siente como Mangkorn se acerca y cierra los ojos con miedo piensa que ahora sí será golpeado.

Los labios de Mangkorn se unen a los de Yai de manera suave mientras Mangkorn desliza su mano por la mejilla de Yai.

Yai ahora está confundido pero extrañamente su Omega se deja llevar por esa sensación tan cálida tan inesperada.

Mangkorn respira y profundiza el beso ahora pasando su mano por detrás de la cabeza de Yai afianzando un hagarre más profundo.

Yai se siente mareado pero fascinado por las sensaciones que ese beso le está transmitiendo.

Mangkorn carga las piernas de Yai y las enrolla en sus caderas para el poder meterse en medio de sus piernas.

Yai resopla excitado el contacto de cuerpo contra cuerpo lo hace emitir un gemido suave.

Mangkorn siente unas crecientes ganas de follarse a Yai así que se lo lleva cargado hasta la habitación entre besos.

Al llegar a la recamara Mangkorn recuesta sobre la cama a Yai y se quita la camisa mientras vuelve a besarlo, ciertamente no quiere dejar reaccionar a Yai no quiere que el piense en Nine quiere que piense solamente en lo bien que se sentirá su Verga dentro de él.

Yai es besado con pasión mientras su cuerpo es tocado por las grandes manos del Dragón.

—mmm!— Yai curvea la columna al sentir como le succionan el pezón mientras le quitan los pantalones y los interiores.

Mangkorn delinea todo el contorno de las piernas haciendo erizar la piel de Yai.

—Ah ah"!— Yai se desconecta al sentir como el Dragón se debora toda su hombría.

Mangkorn sube y baja con un ritmo lento y certero, besa la pequeña punta luego la succiona un poco hasta que desciende nuevamente succionando todo.

—Ah ah no"!— Yai quiere parar por qué está apunto de alcanzar el orgasmo.

Mangkorn no se detiene al contrario continua con el mismo ritmo descidido.

—Mangkorn"!!— Yai se contrae y deja salir su semen.

Mangkorn lo soltó y todo el líquido se le embarró en la cara.

Yai está rojo hasta las orejas esa sensación y la vista le han vuelto a parar la verga porque Mangkorn es un jodido hombre hermoso.