- Está será tu habitación niña.- hacia unos minutos que acabábamos de llegar a la casa de Henry, y me estaba enseñando mi habitación.
- Puedes dejar de llamarme así Henry por favor.- le dije rodando los ojos.
- Eres una niña Abigail.
- Tengo 19 años, no soy una niña en absoluto.- le dije y me adentre a mi habitación.
- Eso lo sé muy bien Evans.- susurró, creí que era mi imaginación.
La habitación:
Valla, este hombre si que era millonario, podría hacerlo mi sugar, no estaría mal, empecé a guardar mi ropa, tarde una hora entera guardando toda mi ropa, tenía bastante, guarde mis zapatos, guarde mis cosas de aseó personal y mis cosas de esos meses, extrañaba a mi hermano, hacia casi 3 años que no lo veo, estudia en Canadá, casi no nos visita, extraño a James, y a los mellizos, y a Teresa, Dios, quiero que terminen las vacaciones ya.- Abigail, la cena está lista, podrías bajar por favor.- dijo Henry tocando mi puerta.
- Ya voy papi.- solté una risa cuando escuché el gruñido de Henry.
- Deja de jugar y baja ya niña.- dijo de mala manera y escuché sus pasos alejarse.
Esto va a ser divertido, molestar a Henry, hacerle la vida imposible, tengo que llamar a los mellizos, ellos son excelentes con las bromas.
- Abigail Evans!!.- escuché a Henry gritar desde abajo, upsi, olvide que el señor está en sus días y no aguanta nada.
- Que ya voy pesado!!- grite y baje las escaleras rápido.
Cuando llegue a la cocina me quedé quieta, por Dios, este hombre tiene unos gustos excelentes para las cosas.
Entonces puede llegar a enamorase de nosotras.Oh calla pequeña voz que no sé de dónde salió, cuando necesite tu opinión apareces.
Seguro lo haré seguido, lo único que haces en la vida es tomar malas decisiones.
Y lo único que tú haces es hablar contigo misma, estás loca.
Somos la misma persona cariño.
- Deja de mirarme así y siéntate ya niña.- rodeé los ojos e hice lo que me dijo, no porque el me lo haya dicho, si no porque tenía hambre.
Estábamos cenando en silencio, hasta que el hablo.
- Muy bien niña, cómo vivirás aquí, habrán reglas.
- Pero...
- Ni un pero, solo escucha. 1: No puedes traer a ningún hombre a esta casa, solo entro yo y mis amigos. 2: No puedes entrar a mi cuarto a menos que yo te de el permiso. Así como yo tampoco puedo entrar a tú cuarto a menos que tú me lo permitas. 3: Lo que diga se hace. 4: Ambos tenemos que organizar la casa, tu tendrás que arreglar tu cuarto y la cocina. Yo haré mi cuarto y lo demás. 5: Nos turnaremos para cocinar, se que sabes hacerlo. Y por último, ambos iremos por la despensa, no me importa si estás o estoy enojad@, ambos iremos y punto. Alguna duda.
Bueno y este que se creía, solo le faltaba la maldita regla de no puedes respirar el mismo aire que yo.
- Está claro o no Abigail.
- Si señor, quedo más que claro.
- Ahh, y te toca lavar los platos.- se levantó y se fue, cómo puede ser amigo de mis padres este bastardo.
Estaba terminando de lavar los platos cuando mi celular empezó a vibrar.
- Habla usted con el amor de su vida, con quién tengo el gusto?.- respondí sabiendo quién era
- Habla usted con el tío más increíble de toda la vida, y dudo que seas el amor de mi vida, pues ya tengo el mío, pero si puedes ser la niña de mis ojos.- solté una risa, cómo amo a este hombre.
- Hola tío Robert.
- Hola mi muñequita de ojos saltones, cómo estás linda, escuché que tus padres aceptaron el trabajo.
- Estoy bien, algo enojada, pero ya lo superare.
- Se que si linda, y te quedarás sola en casa.- preguntó algo alterado.- Mira que si es así, viajo ahora mismo y mato a tus padres y te traigo acá con nosotros linda.- solté una carcajada.
- Estoy bien, me dejaran con Henry.
- Ya veo muñequita, el me agrada, pero si trata de hacerte algo, no dudes en llamarme linda, estaré ahí tan rápido como un trueno.
- Lo se tío Rob, no te preocupes, si trata de hacerme algo, solo lo castrare y asunto arreglado.- el soltó una carcajada.
- Esa es mi muñequita, okey linda, tú tía Susan me llama para cenar, te manda unos besos y dice que te ama.
- Dile que yo también la amo, también les mando besos, te amo tío Rob.
- Y yo a ti mi niña, cualquier cosa me llamas linda.
Colgué y subí con una sonrisa en mi cara, siempre que hablaba con el tío Rob terminaba feliz, se que no es mi tío de sangre, pero es como si fuera el hermano de papá, el tío Rob me conoce desde que estaba en la panza de mamá, también está el tío Seb y la tía Scarlet.
- Y esa sonrisa, al fin alguien te hizo caso.- pregunto Henry con tono burlón.
- No, pero tú si que necesitas a alguien que te quite esa cara de amargado que te cargas.
Henry pudo mala cara y después sonrió.
- Con quién hablabas Abigail, hasta acá arriba se escuchaban tus risas, eres muy escandalosa cuando te ríes.
- No solo cuando me rio William.- le dije y le guiñe el ojo, el solo puso su cara de sorpresa, y después sonrió.
- Creo que tendré que averiguar en qué otras cosas eres ruidosa niña.- me dijo y fue su turno de guiñar me el ojo , yo me puse roja y entre rápido a mi habitación. El iba a entrar a mi cuarto cuando me di vuelta y el se detuvo en seco.
- Que hac...
- Regla número dos señor Cavill.- le cerré la puerta en la cara y escuché que susurró.
- Maldita mocosa tramposa.
- Te escuché Cavill.
- Ese era el punto niña.- solté una risa y me metí a bañar, necesitaba relajarme, mañana mis padres se iban por no se cuánto tiempo.
Estaba quedándome dormida en la tina, cuando de repente escuché el celular sonar.
Llamada entrante de:
Lim Lim.Era Liam, mi hermano Liam, tres años y no me había marcado, maldito idiota...
Nueva historia, espero que les guste 🥺, los amodoro 😼❤️, cuchau ✨
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Mi niñero (Henry Cavill)
Romansa- Pueden decir toda la mierda que querían, pero eso no cambiará lo que siento por ti Abby...