Nuestra Omega (BTS y tú) +18

Parte 6

— ¿Yang Mi? — la voz de Jungkook la hizo removerse en su lugar — ¿Amor, estás bien? — Yang Mi abrió los ojos con extrañeza a su pregunta y asintió.

— ¿Qué pasa?

— Me tenías preocupado. — le dijo el mayor mirándola aún con angustia — Has estado durmiendo casi toda la tarde. ¿Por lo menos has almorzado algo?

— ¿Qué hora es?

— Son las tres. Casi las cuatro. ¿Segura que te sientes bien?

— Sí. No te preocupes por mí. — le dijo sentándose en la cama — ¿Dónde están los chicos?

— Tae Ri, Sun Hee y Ji Hyun están en su habitación. Seo Jun parece que está tomando cursos en la escuela. Min Ho y Guk Mi están viendo televisión en la sala y Jun Seok ... Él debe estar por ahí, planeando alguna travesura.

— ¿Ya comieron?

— Ya. Apenas llegaron de la escuela, almorzaron juntos. Dijeron que parecías cansada, así que no quisieron despertarte.

— He dormido demasiado. Iré a ver cómo está todo por ahí.

— ¿Hoy no fuiste a la florería? — preguntó quitándose la corbata.

— No. Taehyung mandó a alguien para arreglarla. El local estaba algo... Descuidado. El techo necesitaba reparación y la pintura estaba opaca. Así que, me dijo que él se encargaría, a pesar de que le dije que podría cubrir los gastos.

— Como siempre. Taehyung tratando de hacerse el bueno.

— Él es bueno.

— Sí. Para tratar de llamar la atención.

Yang Mi soltó una risita.

— ¿Por qué estás tan enojado ahora?

— Le pedí que se encargara de un asunto en la empresa y no me hizo caso. ¿Adivina quién tuvo que hacerlo?

— ¿Tú?

— No. Hoseok. ¡Pero me enoja que no pueda concentrarse en su trabajo! — Yang Mi lo miró divertida.

— Creo que el más paciente de todos es Hoseok. A pesar de haber hecho el trabajo de Taehyung, no se está quejando. — dijo poniéndose de pie.

Jungkook la miró fijamente y ladeó la cabeza.

— ¿Estás dando a entender que estoy siendo dramático?

— Yo no he dicho nada, Kookie. — lo miró inocente.

— Claro que lo hiciste. Estás diciendo que soy dramático.

— Jungkook, tranquilo...

— Sólo intento hacer que la empresa se mantenga, por lo menos hasta que Seok Jin vuelva.

— Y lo estás haciendo muy bien. Relájate.

— Estoy relajado.

— No es verdad. Estás tenso. Respira un momento. ¿Sí? La empresa estará bien.

— Lo sé. — habló el pelinegro sentándose en la orilla de la cama — Sólo... Intento dar lo mejor de mí. ¿Sabes? Siempre he seguido las órdenes de Jin. Pero el que él me haya elegido para ser el presidente de la marca ... Me estresa un poco.

Yang Mi sonrió enternecida al ver a su Alfa nervioso. Sabía que estaba dando lo mejor de él. De eso no había duda.

La Omega se acercó a él y se sentó a su lado para besar su mejilla con cariño.