• 𝑪𝒉𝒂𝒑𝒕𝒆𝒓 𝑬𝒍𝒆𝒗𝒆𝒏 •
Té de lágrimas"Estás por tu cuenta, enana."
Esa era la frase que le había dicho su padre cuando le pidió ayuda en su primera misión, a los trece años, luego de haber caído de un monumento de 192 metros, con un rasguño en su brazo que le había hecho perder tanta sangre que pensó que se moriría mientras dormía.
"Lo siento, no puedo ayudarte."
Era lo que le decían sus profesores cada vez que les pedía ayuda con alguna tarea, o simplemente para estudiar para un examen. La trataban de esa forma simplemente por ser una "niña problema", cuando en la mayoría de peleas en las que se metía era para defender a su hermana o a Simon. Para ellos ella siempre sería un "caso perdido".
"Lo lamento, niña. Esta vez estás por tu cuenta."
Fue lo que le dijo su maestro Quirón en el momento en el que le pidió apoyo luego de que su vida completa se derrumbara en un lapso de dos días. "Esta vez estás por tu cuenta", ¿esta vez?, ella siempre estaba por su cuenta.
Nadie cuidaba de ella, nadie se preocupaba por ella.
Alyssa había dedicado básicamente toda su vida a completar misiones para mantener algo de paz en la vida de sus hermanos y amigos.
A los trece recorrió el país en busca del rayo maestro, para evitar una guerra entre dioses.
A los catorce navegó por el Mar de los Monstruos en busca del Vellocino de Oro, para evitar que la barrera que protegía su campamento, su hogar y su familia, fuera destrozada.
A los quince se embarcó en una misión de exploración por el Laberinto de Dédalo con su hermana, el cual la había dejado irreparablemente paranoica y con traumas inigualables.
Antes de siquiera cumplir los dieciséis ya estaba peleando su primera batalla, en busca de defender a su familia y amigos del ataque que llegó de parte de una fracción del ejército del titán.
ESTÁS LEYENDO
𝑫𝒂𝒏𝒅𝒆𝒍𝒊𝒐𝒏𝒔 || 𝑱𝒂𝒄𝒆 𝑯𝒆𝒓𝒐𝒏𝒅𝒂𝒍𝒆 || 𝑷𝑱𝑶 • 𝑪𝑫𝑺
Fanfiction¿Monstruos tratando de asesinarte a cada segundo de tu vida?, lo normal. ¿Dioses de hace miles de años pidiéndote favores sin importarles tu salud física y mental?, nada nuevo. ¿Misiones mortales en donde tu vida pende de un hilo y lo único que te d...