"Solo tenemos cuartos matrimoniales" Aquellas habían sido las palabras que la recepcionista nos dijo.
Tristemente tuve que aceptar pagar por una, no podíamos desperdiciar el dinero, claro que no.
Después de unos minutos buscando la habitación la encontramos. Y ya estábamos dentro, Deidara y yo juntos en la misma habitación, quién lo diría. A pesar del ambiente incómodo que se había formado, tuve que ir a darme un baño, por supuesto que me despoje de mis prendas dentro, al igual que cuando me cambié, al salir lo ví de espaldas con una bata de baño. De seguro también se bañaría.
Fijé mi vista de desvío en su cabello, el cuál al cabo de unos segundos soltó dejando ver lo largo y bien cuidado que lo tenía, era brillante y sedoso al movimiento. Un rato antes de que volteara, quité mi vista de él y me dispuse a acostarme.
Dejé un gran espacio de distancia entre el lado de Deidara y el mío para evitar cosas que no deberían de suceder, acercarnos un metro a lo mucho. Al cabo de unos minutos bastante tardados, Deidara salió del baño ya con su pijama puesta, la cuál consistía en un polo gris manga larga que le llegaba hasta los muslos y resbalaba por uno de sus hombros dejando ver su piel. También llevaba unos pantalones de un gris más oscuro, eran sueltos hasta el piso, hacían juego con sus calcetas blancas. Se secó el pelo con una toalla y luego lo peino.
Todo esto lo ví sigilosamente sin que se percatara, la verdad no sabía que necesidad tenía de ver y examinar todo su atuendo, si después de todo no me importaba en lo más mínimo.
Apagó las luces de la habitación dejando que la de la luna la iluminara mientras se recostaba a mi lado, alejándose, igualmente tomando su debida distancia.
Al sentirlo comencé a descansar mis ojos y mi mente, pues tantos pensamientos juntos me hacían doler la cabeza, poco a poco el sueño se iba apoderando de mí hasta consumirme. Logrando así que me sumergiera en el lindo mundo de los sueños.
• ✦ ˚ * ✦ * ˚ ✦ •
Cálculo que han de haber pasado unas cuatro horas aproximadamente, cuando sentí una pierna rodear mi cadera haciéndome despertar de golpe, estaba apunto de golpearla pero miré a mi lado y ahí estaba Deidara, con sus cabellos alborotados cubriendo su rostro.
Relajé mi expresión cuando supe que era él, estaba abrazándome con su pierna por sobre mi cadera. En un rapido movimiento la quité, no estaba para ese tipo de tonterías, solo quería descansar.
En cuanto lo hice todo pareció estar tranquilo hasta unos minutos después, cuando sentí un brazo pasar por mi cuello.
Abrí mi boca antes de decir algo, pero me detuve al sentir como hacia un intento por voltearme, dudé por unos segundos hasta que decidí seguirle la corriente para ver hasta donde llegaba. Al voltear, el aún tenia los ojos cerrados, quitó su mano de mi cuello y la puso en mi hombro atrayendose él mismo a mi pecho “Te odio Uchiha..” Susurró entre sueños ¿Estaba soñando conmigo? Que rarito.
Se adentro ahí acurrucándose, dió un suspiro fuerte y largo antes de seguir durmiendo plácidamente.
Quería quitarlo. Pero luego de ver su cara relajada con una expresión que no era enojada como siempre, algo en mí se removió haciéndome sentir pena de botarlo, así que lo recibí colocando un brazo para rodearlo y colocarme de manera cómoda, aúnque era muy extraño, pues ambos éramos hombres, no creí que le incomode que lo abrace mientras duerme ¿O sí? Total, él también lo estaba haciendo.

ESTÁS LEYENDO
Rain Of Love
RomanceEn edición. ━Itachi, ¿Por qué llueve cuando mi corazón se acelera? Fanfic/ItaDei/UniversoNarutoShippuden