Capitulo 15

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El ruido de pequeñas gotitas descendiendo desde el cielo me despertaron, entreabrí los ojos procurando no lastimarlos cuando los cerré con fuerza para adaptarme a la luz del fuego en una de las esquinas de mi cuarto. Sentía doler mi cuello y parte la parte alta de la espalda, llevé mi mano a mi nuca tratando de aliviar el constante dolor inútilmente, sobé en círculos invisibles por unos segundos antes de abrir por completo los ojos listo para maldecir a la maldita lluvia que seguía cayendo sin pudor alguno. Un suspiró de resignación fué lo único que logré soltar al pensar en la idea de que la mañana había llegado, me levanté quedando sentando sobre mi cama con los cabellos despeinados por los probables movimientos que había hecho mientras dormía.

Bostecé aparentemente “Listo” para iniciar el nuevo día que me estaba esperando con un clima desastroso en el. Posicioné mis pies en el piso parándome para quedar en pie, estiré las extremidades de todo mi cuerpo con lentitud.

Caminé hasta donde mi bata, con las nubes rojas que me esperaban ansiosas por ser usadas como representación de ser parte de Akatsuki y cambié mi pillama por la ropa que solía usar habitualmente en mi día a día dentro ella, lavé mi cara y dientes antes de salir pasando nuevamente por ese pasillo oscuro que tan solo contaba con palos de madera adheridos a la pared rocosa de la cueva con mechas de fuego en cada uno para iluminarlo. Mis pasos eran lo único que hacía eco en el lugar por lo que supuse que debía ser temprano, y lo comprobé cuando al salir un momento afuera para ver la lluvia, el cielo tenía un tono celestino sin nubes. Deberían ser aproximadamente las ¿Cinco? ¿Seis? de la mañana. La madrugada del mismo día no había conseguido dormir mis nueve horas completas, tan solo unas dos horas me recibieron en el maravilloso mundo de los sueños en el cuál todo era ficticiamente posible. Los pensamientos continuamente me atormentaban pero está vez habían ido demasiado lejos.

La pregunta de "¿Cómo se lo diré?" Rondó en mi memoria tantas veces que hasta había perdido la cuenta de todas las respuestas que me planteé, tenía ojeras más notorias que él día anterior todo por eso, por pensar en él y su estúpido comportamiento que me asustaba pero no podía dejar de quererlo.

"Maldito Itachi, aveces siento que de verdad si te odio" Sonreí al pensarlo, y es que no había mentira en las palabras que me mencionaba interiormente. El estar constantemente pensándolo e intentando hallar una respuesta para confesarle todos mis sentimientos era agobiante, y mucho más si llevaba casi una semana así. Sin dormir bien mientras mi cuerpo y apariencia me pedían a gritos un momento de descanso.

El cielo era tan lluvioso que no me permitía siquiera caminar, de lo contrario un charco de lodo se crearía bajo mis zapatos, lo único que hice fue avanzar un poco para llegar al pasto a un lado de la cueva. Apesar de que las plantas se hidrataban con el caer de las gotas de lluvia, para mí no significaba otra cosa que un ambiente estresante, la lluvia jamás fue de mi completo agrado ¿Por qué? El día en el que Itachi me reclutó junto a Sasori y Kisame llovió, llovió tan fuerte que parecía querer provocarme cuando mojaba mi cabello haciendo que cayera sobre mis ojos impidiéndome ver.

Podía decir que ese día fue uno de los peores, ¿Y cómo no? Luego de eso sucedió todo esto y ahora estoy así, luchando internamente con mi corazón para que no vaya ahora mismo a lanzarse a los brazos de Itachi mientras dice palabras repitentes de odio mezcladas con el inmenso amor que necesitaba soltar y no sabía cómo. Tambien luchando con mi cerebro, que parecía ser el único conciente de la sitúacion en la que me encontraba, temiendo de expresarme por completo, con miedo a que nos separen, con miedo de todo y de todos. No era fácil, pero asumía la responsabilidad por haberme permitido a mi mismo que me gustase un hombre.

Levanté mi mirada al cielo sin importarme las gotas que caían en mi rostro; "Qué estúpido soy" Me afirmé sintiendo doler poco a poco mi garganta, como si un nudo se amarrase con fuerza dentro de ella.

Rain Of LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora