Roommates || Calum Hood (español)

Capítulo 4 // "Toothpaste"

·Calum

Mi mejor amigo volvió con nosotros, su larguirucho cuerpo cayendo en el espacio vacío del sofá al lado de Michael. Luke tenía una sonrisa de mareo plasmada en su cara y su radiación de felicidad me irritaba. "Hey chico enamorado. ¿Cómo se lo ha pasado la lame culos lavando esos platos?" Bromeó Ashton, riéndose por sus propias palabras.

Luke sonrió aún más ampliamente. "Bueno, ella se lo ha pasado bien considerando que Cassidy y yo tendremos una cita muy pronto."

Mi mandíbula cayó ligeramente y mis ojos se abrieron como platos. Estaba completamente desconcertado. La Cassidy a la que conocía nunca habría aceptado una cita con un chico tan rápidamente. Ella siempre ha sido increíblemente torpe con los chicos y se quejaba sobre cómo sus flechazos nunca sabían que existía. Pero lo hacían. Todos lo hacían.

"¿Enserio? Oh dios mío, ¡eres el amo! ¿Crees que dejará que le toques las tetas? Tiene un buen par." Dijo Michael, entonces procedió a usar a sus manos para dibujar el exagerado contorno de sus pechos en el aire.

Involuntariamente le fulminé con la mirada. Era muy chocante ver a mis amigos tan obsesionados con ella cuando era una de las personas más molestas del planeta con un terrible hábito de guardar rencor. Claro, Cassidy será muy guapa ahora, pero nunca ha solido ser así y la glorificación hacia mi antigua mejor amiga y actual compañera de habitación era repugnante e incomprensible.

Me alejé de escuchar a esos tres hablar sobre lo fantástica que era Cassidy y suficientemente pronto estaban dirigiéndose hacia la puerta mientras decían que era casi de noche y que no querían entrometerse en mi primera noche en mi nueva casa. Mis ruegos para que se quedaran a dormir fracasaron completamente y se me hizo un nudo en el estómago por los nervios de cómo iba a ir toda esta cosa de ser compañeros de habitación.

Mis pies caminaron contra la alfombra de felpa hacia el único baño para cepillar mis dientes antes de ir a la cama, y estaba completamente sorprendido de ver a Cassidy ahí con una ridícula máscara facial. Ella chilló al verme. "¿Es que te criaron en una granja? ¡Oh dios mío! No es tan difícil llamar a la puerta."

"Sabes donde he sido criado, Cass." Disparé, cogiendo mi cepillo de dientes de su soporte y poniéndolo debajo del fregadero. La estantería ya había sido ocupada por una variedad de productos innecesarios que parecían ser completamente extraños para mí.

"Por favor, sólo llama a la puerta la próxima vez. Podría haber estado cambiándome el tampón o algo." Dijo en un tono más ligero que el áspero anterior.

Me encogí ante la mención de esas femeninas armas de destrucción masiva y llevé mi cepillo de dientes hacia mis dientes. "Ew. No hables sobre tu región inferior sangrando cerca de mí."

"Para eso están los compañeros de habitación." Cantó, aún examinando su cara verde en el espejo como si tuviera que encontrar alguna especie de tesoro en una búsqueda del tesoro. Seguí cepillando alrededor de mi boca el cepillo mientras la miraba silenciosamente, y sintiendo la mezcla de mi saliva y el sabor a menta. Necesitaba escupir.

Cuando fui a escupir la pasta de dientes, Cassidy agachó su cabeza para aclarar la máscara de su cara solo unos segundos antes, haciendo que mi escupitajo aterrizara en su nuca. Cassidy instantáneamente chilló y no pude reprimir mi risa histérica. "¡Calum! ¡Eres asqueroso!" Gritó, abofeteando mi brazo con fuerza.

"Te juro que no he hecho eso a propósito." Admití, aun riéndome por mi impecable puntería.

Sus manos alcanzaron su blusa y la tiró por encima de su cabeza, dejando a Cassidy solo en su sujetador rojo con detalles de encaje. "¿Qué estás haciendo?" Pregunté en total confusión pero nunca alejé mis ojos de sus perfectamente alegres tetas. Michael tenía razón. Tiene un buen par.

Cassidy recogió su pelo a un lado de su cara y cogió mi brazo antes de que me pudiera retirar del baño. Dejé mi cepillo de dientes, mis cejas seguían fruncidas, y ella cogió la alcachofa de la ducha de la parte superior de la ducha. "Vas a quitarme esta mierda." Ordenó Cassidy, poniendo la cuerda enrollada en mis manos.

Suspiré, viendo como se encorvaba en la bañera de porcelana y las vértebras de su columna vertebral apenas sobresalían de su espalda. Encendí el agua y dejé que se calentara un poco antes de dirigirla hacia la mancha de mi pasta de dientes de su nuca. Cayó por su cuerpo y usé mis dedos para quitar cuidadosamente el exceso, haciendo que se le pusiera la piel de gallina ante mi toque.

Cassidy se escabulló del agua caliente después de quitar la máscara restante de su cara y se puso una toalla limpia alrededor de sus hombros. Un incómodo silencio se asentó sobre nosotros mientras ella cogía sus cosas y yo casi prefería cuando discutíamos que cuando hacíamos ver que el otro no existía. "No sé tú, pero me voy a la cama. Y yo me quedo con la cama de verdad." Declaró, pasando por mi lado.

La seguí de cerca ya que tenía la intención de ir a la cama también. Gracias a dios el colchón inflable ya había sido hinchado. "¿De verdad vas a tener una cita con Luke?"

"Sí, ¿por qué es tan sorprendente?" Murmuró Cassidy, con irritación obvia en su tono.

Me encogí de hombros despreocupadamente mientras ponía las sábanas en el colchón que pronto estarían envolviendo mi cuerpo. "No lo sé. No solías tener muchas citas antes."

Ella frunció sus labios fuertemente antes de que su pequeño cuerpo escalara por las sábanas. "No nos hemos visto en casi cuatro años, Calum. ¿En serio crees que soy exactamente la misma persona? Claro que he cambiado."

Levanté mi camiseta por encima de mi cabeza y la cambié por una de pijama. "No actúes como si no te conociera, Cass. Fuimos mejores amigos. Y podríamos seguir siéndolo si arregláramos las cosas." Argumenté, sintiéndome repentinamente frustrado con su actitud.

"Debiste pensar eso antes de que echaras a perder toda nuestra amistad." Silbó, envolviendo el edredón sobre su cuerpo mientras se acurrucaba en el colchón.

Un sentimiento parecido al del descenso en una montaña rusa se posicionó en mi estómago mientras era recordado sobre nuestro retorcido pasado. La culpabilidad tendía a ocupar mi cerebro cada vez que recordaba el incidente que nos separó años atrás. Aunque me arrepentía profundamente de lo que le hice, la condescendiente parte de mí no quería rebajarse su nivel y rendirse pidiendo una gran disculpa. En una manera inusual, casi disfrutaba de nuestras peleas. Porque si no discutíamos, estoy seguro de que no hablaríamos nada. La incomodidad dejó la habitación en silencio.

Cassidy se giró hacia el otro lado, agarrándose a la sábana y acunándola contra su pecho. "Bueno, sigo queriendo que tengas cuidado con Luke. Puede que parezca muy dulce e inocente pero no es el mejor con las relaciones y siempre acaba haciendo daño a la chica." Le avisé.

Ella se mofó, una pequeña risa fingida saliendo de sus labios. "No creo que pueda hacerme tanto daño como me hiciste tú, Calum."

Mi mandíbula se apretó. Tragué profundamente, dejando que mis párpados se cerraran. Su intento de hacerme sentir como una mierda estaba funcionando. "Lo sé." Le respondí débilmente mientras la realización de que su declaración era verdad me golpeaba como un tren a alta velocidad. Aclaré mi garganta. "Pero, uh, solo ten cuidado con él, ¿vale?"

"Puedo cuidarme yo sola" Protestó Cassidy, deslizándose por la blanda almohada para sofocar sus brillantes ojos. "Buenas noches, Cal."

"Buenas noches, Cass." Susurré tranquilamente antes de que las palabras que dije volaran por el ligero aire y el sueño se apoderó de mi cuerpo.