Roommates || Calum Hood (español)

Capítulo 32 // "Skating"

·Cassidy

"Hoy hace un calor insoportable fuera." Se quejó Calum, limpiando el sudor de su frente con la parte posterior de su mano.

Estábamos sentados fuera en nuestro porche trasero, el cual raramente utilizábamos, con vistas al sereno océano que estaba continuamente estrellándose contra la arena granosa. Nos hice a Calum y a mí unos sándwiches de queso a la parrilla, o sándwiches tostados de queso, o cualquier nombre que se les haya dado, y estábamos comiéndonoslos bajo los sofocantes rayos de sol.

"Bueno estamos a casi finales de julio en Los Angeles. ¿Qué esperabas?" Pregunté, un poco burlándome de él y un poco curiosa de por qué este clima caluroso era una sorpresa tan grande.

"No sé." Respondió Calum despreocupadamente, tragando un gran mordisco de su sándwich. "Pero sé que tengo un gran impulso de ir a esconderme en el congelador ahora mismo."

Sonreí mientras una ráfaga de aire acariciaba la parte superior de nuestras piernas desnudas, enfriándonos por un breve segundo. Extendí mis piernas ampliamente, quitándolas de la previa posición cruzada, y moví y flexioné mi pie para proporcionarle algún movimiento a mis músculos antes de que se durmieran.

"¿Quieres ir a nadar?" Sugerí, señalando hacia la vacía playa privada que no tenía a nadie ocupando las aguas.

"No." Respondió Calum firme y rápidamente, como si temiera el pensamiento de su cuerpo siendo rodeado por agua salada. "¿Por qué no vamos a la pista de hielo hoy?"

"¿Por qué haríamos eso?" Pregunté, mirándole con completo shock. Él siempre había odiado patinar sobre hielo.

"Porque ahí hace un frío que pela y es una primera cita cliché, ¿verdad?" Intentó Calum, levantándose de su asiento a mi lado y cogiendo mi mano. "Vamos, Cass. Estoy intentando ser romántico."

···

Patines que eran un poco demasiado ajustados apretados alrededor de mis pies. Podía sentir la formación de ampollas en la parte posterior de mis talones mientras el cuero y mis gruesos calcetines se frotaban contra mi piel. Até los patines fuertemente antes de tambalearme hacia el borde de la pista contra la cual estaba apoyado Calum.

"Me duelen los pies." Se quejó él, entrelazando su brazo con el mío mientras dábamos un paso en el hielo resbaladizo.

Me cogí a él para mantener mi equilibrio. Solía amar el patinaje sobre hielo cuando era pequeña, pero no he hecho esto desde que me mudé a Los Angeles. Usualmente pasaba mis días nadando o visitando la playa en cambio.

"A mí también." Acordé, mientras empezábamos a caminar a lo largo del hielo. El frío aire azotaba contra mi cara, haciendo que mi nariz se pusiera rosa y haciéndome desear haber llevado un abrigo más pesado.

Calum estaba luchando para mantenerse firme, significando que yo tendría que ser quien tirara de él. "¡Wow he encontrado algo en lo que Calum no es bueno en realidad!" Exclamé, riéndome suavemente.

Él me golpeó con su cadera, haciendo que me tropezara un poco, pero me enganché a él rápidamente antes de que pudiera caerme. "Cállate. Seré un profesional en poco tiempo."

"Lo que tú digas." Canté sarcásticamente, rodando mis ojos hacia él.

Mientras estábamos en medio de nuestro intento de patinar en sincronización sin casi tropezarnos cada pocos segundos, un grupo de chicas se acercó a nosotros. Tenía el sentimiento de que esto iba a pasar, especialmente porque este era un sitio público que estaba lleno de preadolescentes, pero aun así hizo que mi pecho golpeara con nervios.