De camino a casa Nía pensó en lo ocurrido. Cuando llegó se dirigió a la cocina y tomó un vaso con agua y caminó hacia su habitación.
El cuarto estaba frío gracias al aire que lograba pasar por las ventanas abiertas.
En el piso había muchas cosas amontonadas y sobre ellas Nía acomodó su mochila; quedando muy cerca de la puerta.
Una de las luces estaba encendida y se dirigió al interruptor y la apagó.
Ya en la oscuridad fue a su cama y se dejo caer con pesadez en ella.
El cansancio se apoderó de su mente y de su cuerpo haciéndola soñar con profundidad.Unas cuántas horas después, unas voces le despertaron y prestó atención y se dio cuenta que provenían de detrás de la puerta acompañados de unos golpecitos.
-¡Déjame entrar!- gritó la voz qué resultó ser su hermana mayor, Wen, quien forcejeó con la puerta hasta abrirla y tropezar con la mochila de Nía, cayendo a sólo un metro cerca de ella. Nía se sentó en la cama semi dormida...
-¡¿Ahora qué quieres?!-dijo Nía molesta y le lanzó una almohada; pero Wen fue más ágil y la esquivó. Antes de que Nía volviera a protestar Wen le regresó la almohada.
-Te he estado llamando desde hace tres horas para que bajes a comer ¿por qué no contestas?-gritó Wen
-Sorry, no tengo hambre- Nía respondió cinismo.
-Zorra-le espetó Wen a Nía-has estado encerrada toda la maldita tarde ¿sabes que hora es?
-Te diré que hora es-hizo una pausa para tomar aire- es hora de que te largues de mi cuarto... ¡Largate estúpida!-gritó-¡Porque a mi no me importa si duermo en viernes y despierto en domingo!-se puso de pie y empezó a empujar a Wen a la dirección de la puerta para que esta saliera de su cuarto, y una vez fuera, azotar en su cara la puerta Nía.-Pero ¿qué no tiene nada mejor que hacer?- murmuró.
Jaló la silla del lado su escritorio y la puso en la puerta a modo de evitar más visitas no deseadas.
Se dirigió a su cama para retomar ese delicioso sueño que tenía antes de ser interrumpido.«Como la extraño, sólo éramos las dos... sólo ella y yo... el grupo social pequeño del salón... Juntas para siempre» pensó
Todo tipo de frases depresivas pasaban por su cabeza mientras conciliaba el sueño. Poco a poco sentía como se iba...
En aquel sueño, veía reflejado algo que sólo Jess podría decirse y entender al verdaderamente reconocer su error.
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THE LAST CHANCE
Fiksi Remaja¿Qué pasa cuando dos mejores amigas se gustan? El problema es que ninguna de las dos lo sabía con certeza. Un pasado amoroso de una de las chicas descubrió su gusto a su mejor amiga; él estuvo dispuesto a arruinarle su relación, y lo logró... ¿Quier...