-Buenas noches.-me dijo antes de entrar a su habitación.
-Buenas noches.-contesté fría, estaba molesta por su modo de hablarme hace unos minutos.
Me dirigí a la habitación de Yess, la abrí y estaba durmiendo graciosamente, la cabeza colgaba de la cama y los brazos también, la colcha tirada por ahí y toda la pillama desacomodada.
Me acerqué y la acomodé bien, le bajé la blusa de la pillama, (que se le había subido hasta el ombligo) ya acomodada, la tapé y le prendí la lucecita de noche. Al salir, me lleve una sorpresa, el padre de Yess, observaba todo lo que hacía recargado en el marco de la puerta.
-Gracias.-me dijo.
-Por nada.-dije fría igual,y lo traté de esquivar para pasar a mi dormitorio.
-Espere.-me dijo.-¿Porqué me habla así?
-Asi se le debe de hablar.-dije.-Es mi jefe, no mi amigo,no mi hermano.
-P-pero.-tartamudeó.
-Pero nada, yo estoy acá para trabajar,no para ser su amiga.-dije fría, realmente me caía muy mal que me hablaran de la forma que lo hizo.-Adiós.
No dijo más, y entró al cuarto de la pequeña, yo me metí a mi habitación y me di una ducha, y me puse la pillama y me acosté, encendí el aire acondicionado y caí en profundo sueño.
Mi despertador sonó a las 6:00 am. Tenía que bañar,vestir y arreglar a Yess para el colegio.
Me bañé me puse ropa cómoda, unos jeans y una blusa rosa algo holgada y unas zapatillas negras, sin tacón, debido a mi altura, no me gustaba usar tacón, ya que me vería aún más alta, y no me gusta para nada.
Entré a la habitación y Yess dormía, me acerqué y la moví hasta que despertó. Aún adormilada entró a la tina de baño y le ayudé a bañarse, salió la envolví en la toalla y la cambié poniendole su uniforme. Tomé un cepillo y acomodé en una coleta su cabello,que era hermoso. Esta vez, no se había quejado de nada. Tomó su mochila y bajó a desayunar, comió cereal y después subió a cepillarse lo dientes. Bajo sonriendo y se despidió de su papá.
-___.-me llamó en el camino.-¿Estás molesta con papi?
-No.-mentí.-¿Porqué lo dices?
-Esque nisiquiera le saludaste hoy.-dijo haciendo puchero.
-Ah, esque estoy algo dormida todavía.-expliqué.
-Ah, si eso debe ser.-rió.
Le tomé la mano y cruzamos la calle para llegar al colegio, la dejé en la puerta.
