Grimm (Sterek)

Capítulo 18 - Libro de Job

"Oh, ¡recuerda que me formaste de barro! Entonces, ¿ahora me convertirás en polvo?"

—Libro de Job

El grimm entró en la tienda de armas con una sonrisa, el dependiente lo miró desconfiado limpiando el arma que tenía en las manos con lentitud. Stiles curioseó las vitrinas mientras silbaba caminando hasta el mostrador y apoyándose en este sin quitar su sonrisa. El hombre se tensó un poco notando la actitud extraña que este tenía.

- Necesito un arma.- Dijo Stiles en inglés, el hombre se rio al recibir esa petición tan básica.

- ¿Tienes permiso?- Le contestó este también en inglés, Stiles lo miró ofendido sacando el permiso de armas.- ¿Para qué la necesita?- Preguntó después de haber comprobado que era real. Stiles sonrió divertido apoyando la barbilla en la palma de la mano.

- Pues para cazar, pero aún no sé el que, venía a ver si me podía ayudar.- Dijo este antes de suspirar, enderezándose y poniéndose serio.- Soy un Grimm, quiero acabar con el rey Jean-Pierre Eliond, así que me gustaría tener toda la información posible.- Dijo notando como el hombre se reía negando mirando hacia la calle a través de la cristalera.

- Abandona mi tienda.- Dijo señalando la puerta, Stiles lo miró con odio apretando su puño con rabia.

- Supongo que las noticias vuelan entre los wesen del pueblo, así que te diré que estás delante del Grimm que mató a seis sicarios de las familias reales.- Dijo viendo la mueca sorprendida del otro grimm.- Y en esa lucha murió mi pareja, así que les voy a hacer pagar cada lágrima que he derramado.- Dijo lleno de odio, el tendero salió de detrás del mostrador y cerró la puerta con llave antes de poner el cartel de cerrado.

- Sígueme.- Ordenó girándose y mirando fijamente antes de volver a caminar.- Soy Henri Bittencourt, el grimm de esta ciudad.- Dijo caminando hacia la trastienda, Stiles lo siguió mientras sonreía victorioso.- Tengo que decirte que me parece una tontería lo que vas a hacer, nadie en su sano juicio se enfrenta a un miembro de las casas reales solo.- Dijo este abriendo un armario y sacando un archivador.

- No estoy solo.- Susurró antes de que el ruido del archivador al aterrizar en la mesa lo asustara un poco.

- Jean-Pierre Eliond es el último miembro de la casa Eliond, el pequeño de tres hermanos.- Dijo este girando el archivador para que Stiles pudiera leerlo y ver las fotos.- Y como toda su familia es un Taureus-Armenta.- Stiles se rio ante la ironía que eso le parecía. Un cura era el wesen que más se parecía a un demonio, aunque fuera un toro.- Rodeado por sus Hundjäger personales, cinco, de lo más salvajes, y viven todos en la basílica del centro.- Comentó pasando las páginas y enseñando las fotos de estos.- Si los esquivas no tendrás un mayor problema en llegar a él, ya que siempre está en el despacho de la basílica.- Dijo con seriedad, Stiles volvió a la hoja dónde la foto de Eliond estaba aceptando también los planos que Henri le daba.

- De los Hundjäger no me preocupo, tengo un compañero que podría distraerlos o matarlos.- Dijo Stiles con la mirada fija en la foto del rey.- Necesitará alguna cosa para enfrentarme a él, soy más de pistolas, pero cualquier cosa que me des está bien.- Dijo Stiles con una sonrisa, este lo miró con el ceño fruncido antes de girarse y abrir otro armario, de allí sacó un revólver y un subfusil.

- Escoge.- Ordenó señalando las dos armas, Stiles sonrió tomando el revólver y cerrando el tambor, apuntó hacia una de las paredes antes de chascar la lengua, dejándolo.

Agarró el subfusil, comprobó lo ligero que era antes de volver a dejarlo de nuevo en la mesa, Stiles miró ambas armas antes de desviar la mirada al armario, viendo algo que llamó su atención y le hizo sonreír.