Capítulo 20: Sólo un amigo

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— ¡Mikasa!—la voz de Eren se escuchó lejos y detrás de ella. Mikasa  detuvo sus pasos y giró para ver hacia atrás y encontró a Eren trotando desde la esquina

—Saliste más temprano hoy, por poco no te alcanzo—le dijo Eren, mientras recuperaba el aliento al alcanzarla. Bajó la mirada un momento y después la vista hacia ella con una sonrisa

—Eren...buenos días—ella le sonrió de vuelta—me hubieras enviado un mensaje y te hubiera esperado

—No, no...Yo pude...—Eren cambió sus palabras antes de confesar que había estado pendiente desde su ventana—logré verte al salir, pero olvidé algo, sólo no pensé que caminaras tan rápido


Ambos empezaron a caminar hacia la parada del autobús. El viento sopló despacio, pero frío y Mikasa bajó un poco el rostro, escondiéndolo en su bufanda.

—¿Quieres mi chamarra?—preguntó Eren y Mikasa se sorprendió un poco. En años de infinitas caminatas juntos, Eren nunca le había ofrecido algo similar.

—No Eren, estoy bien...la bufanda es bastante abrigadora

—Si, veo que te ha servido mucho, me da gusto

Continuaron caminando y viajaron en silencio en el autobús distraídos con el camino y su respectivo celular.

De vez en cuando Eren lanzaba un mirada furtiva a Mikasa. Aún no podía creer lo que Armin le había dicho, ella actuaba tan normal, tan tranquila junto a él, le sonreía como siempre. ¿De verdad era posible que sus sentimientos hubiesen cambiado?

No podía decidir lo que debía hacer, le agradaba su compañía, como siempre. Era divertido compartir y pasar el tiempo a su lado, como siempre. Nadie había tenido oportunidad de conocerlo tan bien como ella y ahora...¿De verdad Mikasa sentía algo más por él?  No se atrevía a preguntarlo..sólo sabía que su piel parecía más tersa y blanca entre esa bufanda que cubría parte de su mejillas y que se veía más adorable que nunca cuando pasaba su cabello detrás de sus orejas...


Ella seguía siendo Mikasa...



Su Mikasa



Mika...su vecina tímida, que se asustaba con los relámpagos



«Mika...» repitió en su mente al verla sonreír con los labios y no pudo evitar notar que Mikasa lucía bien descansada y feliz.

 Pero al bajar la mirada pudo ver que Mikasa sonreía y respondía a los mensajes de Jean.


—Ah, oye Mika—la llamó—traje esto—abrió su mochila sobre sus piernas y le mostró una bolsa de papel conteniendo una par de sandwiches envueltos—me aseguré de incluir jamón de pavo para que tengas proteína

—Oh...Eren—Mikasa lo miró con preocupación— no sabía que traerías comida...—procedió a abrir su propia mochila y mostró una lonchera doble—hoy comeré con Jean, yo...

—Si, si...no te preocupes, debí avisarte antes, está bien—Eren cerró rapidamente su mochila—igual creo que a Armin le hará falta


—Mañana traeré huevos cocidos rellenos, puedo hacer algunos extra para ti—continuó Mikasa, tratando de resolver la situación


Lo que es el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora