Daniela
Estaba entre sus brazos y no sabía que hacer, maldita sea la hora que me dieron ganas de hacer chichí.
—Me...me puede soltar por favor—dije muy nerviosa y ella se apartó poco a poco.
—Perdón señorita Calle no fue mi intención, pero olvidé las toallas—dijo cubriéndose o mejor dicho tratando de hacerlo porque realmente era grande.
—No se preocupe—me voltee—¿tiene otro baño?—
—Ocupe este, yo salgo ahora—se fue para la habitación y yo me quedé ahí procesando todo lo que ha pasado.
Tarde mucho en salir, no sabía cómo actuar con ella, últimamente he pasado con ella y maldita sea mi curiosidad aumenta cada día, estas ganas de probar sus besos me están volviendo loca.
Salí porque tenía que hacerlo, pero no la encontré, solo había un cambio de ropa con una nota.
Puede usar esta ropa, es totalmente nueva, la compré para usted.
Att: Poché
Era una blusa básica blanca con unos jeans y ropa interior de encaje blanco, me quité la pijama, pero quería darme un baño antes de cambiarme, busqué en su armario alguna toalla, pero como no sabía nada tuve que abrir cada parte del closet, encontrándome con su ropa perfectamente planchada y organizada por color, el olor a su perfume inundó mis fosas nasales era delicioso, abrí otra y estaban sus trajes, en otra su ropa interior y reí al ver que algunos boxers eran de diseño.
—Señorita Calle el desayuno está listo—me sobresalté al escuchar su voz.
—Ok ¿puedo tomar una ducha antes?—
—Por supuesto las toallas están en la parte de arriba puede tomar las que quiera—abrí y efectivamente ahí estaban.
—Gracias—tomé una y me dirigí a la ducha, vaya que sí necesitaba una, el agua estaba deliciosa.
Me sequé y me vestí, solo que mis zapatos no combinaban con este outfit pero ya qué.
Salí y ella estaba al teléfono nuevamente.
—Sí, llego esta noche, ya me hace falta dar una buena follada, perfecto—volteó y voltee mi mirada—hablamos luego—
—Gracias por la ropa—dije evitando su mirada.
—De nada—sentí que me reparó completa—¿qué talla de zapato usa?—
—37 ¿por qué?—no dijo nada y solo se fue para la habitación, segundos después salió con unos adidas blancos.
—Tenga, estará mas cómoda, usamos la misma talla, además le combinaría mejor—
—Gracias—dije tomándolos.
—Venga desayunemos—se dirigió al comedor pero por alguna razón me molestaba lo que había escuchado.
—Mejor me voy, así llego cuanto antes a mi casa, ya le he causado muchas molestias—dije y me vio sorprendida.
—Nada de eso, comamos y la llevo, recuerde que hoy me enseñará los viñedos—
—Tengo mi auto en casa de Laura, puedo irme sola, ayer no me dejó porque era de noche y por eso acepté pero ahora puedo hacerlo sola—no dijo nada solo se limitó a verme, sé que quería intimidarme pero no la dejaría.
—La llevo a casa de su amiga entonces—empezó a comer.
—No se moleste puedo irme en taxi o en uber—
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Ángel
RandomGip. María José Garzón una mujer dominante, su mayor debilidad las mujeres, se la pasa de fiesta en fiesta y no se enamora. Dueña de la empresa de "Vinos Garzón's" cree que tiene el poder de todo, sin embargo su vida da un giro inesperado al conocer...