El despertador empezó a sonar y era como si me martillearan la cabeza.
Le di un manotazo y se paró pero el dolor de la cabeza no se iba.
Directa fui al baño y me metí en la ducha.
El agua relajaba mis musculos pero la cabeza seguía a lo suyo.
Eran las 7:30am. Últimamente me levanto pronto.
Me fui derechita al armario y me puse lo primero que pillé.
Iba a ponerme unos leggins pero la herida se me marcaba y se me pegaba asique me puse unos vaqueros, una camiseta,una sudadera y unas cuñas deportivas.
Preparé mi mochila y cojí mi movil y las llaves. Antes de irme me tomé una aspirina para el dolor de cabeza.
Eran las 7:50am llegaba de sobra para desayunat y ir a clase.
-Hey Carol, madre mía que madrugadora
-Hola Sam ¿que tal?
-Muy bien pero devería de preguntartelo yo ¿no crees?
¿Qué tal la herida?
-No te preocupes, ni la noto.
-Oye, ¿y que te a pasado en las manos?
-Nada, ¿por?
Bajé la mirada y vi mis manos rojas y con la piel levantada. No dolía, pero no era normal.
-Pero que ¿mierda te ha pasado Carol?
-No-no lo se ahora vengo.
Fui a mi cuarto y en los cajones del armario encontré unos guantes que no daban mucho calor. Eran bonitos, rojos y con puntitos.
No pegan mucho con mi ropa pero no tengo mas.
-Lista- dije
Bajamos a desayunar y nos pusimos en la mesa de siempre.
Por curiosidad miré a la mesa de los del equipo, pero no estaban.
De repente vi entrar a un chico que no había visto en ningún sitio.
La gente que comía y estaba leyendo se quejaba por que el chico se dedicaba a tirar sus cosas.
-Pero bueno, ¿esque no se dan cuenta de que es ese chico el que les tira las cosas?
-Carol, que chico
-Pues el que esta al lado de la chica del pelo rosa.
-Carol no hay ningun chico hay.
-Sam, estas cegata perdida, voy a cantarle las cuarenta.
Me quité los guantes por si se ponía chulo y había que darle un tortazo, asi le dolería más.
Me acerqué al chico y la chica del pelo rosa me miraba esperando que la dijera algo.
-¿Pero bueno tu de que vas?
-¿Tu puedes verme?
-Pero,¿que te piensas que eres invisible?
-Pues claro no lo pienso, esque lo soy
-Estas mal de la cabeza, chaval.
Estaba dispuesta a irme pero el me cojió de la mano. Empezaron a parpadear las luces y de mi salió una corriente electrica, el chico chilló y empezó a caer al suelo.
Empecé a pedir una ambulancia pero todos se quedaban en el mismo sitio.
-No lo intentes,no me pueden ver.
-¿Y por qué yo si?
-Por que eres una de los nuestros.
-¿Una de los vuestros? A qué te refieres.
-Luego te lo explico, y ponte los guantes.
-Los guantes
-Si los guantes, los que te quitaste antes de venir aqui.
Fui directa a la mesa y me puse los guantes inmediatamente. Sam me miraba con cara de que tenía que ir a un maricomnio pero yo la ignoré.
Salí corriendo de allí, con el chico a mi lado.
La respiración le iba a mil por hora, y debe ser de lo que le hice minutos antes.
-Oye, ¿pero a donde vamos?
-Pues a la enfermería supongo -respondí
-¿Pero no ves que los demas no me pueden ver ni oir?
-Ya, me ha quedado muy claro en el comedor.
-¿Pues entonces adonde vamos?
-Mira, no lose, estoy andando con un desconocido a mi lado, me pasa algo rarisimo en las manos y para colmo los demas piensan que soy una loca que hablo con las paredes.
-No solo en las manos- respondió
-¿Que?
-Que en el resto del cuerpo tambien te pasa.
-Estas de broma ¿no?
-¿No me crees?
-A estas alturas digo yo que si- respondí
Estuvimos caminando sin un rumbo fijo y terminamos en mi habitación.
Saqué las llaves y abrí la puerta.
-¿Que ahora piensas que mi habitación esta llena de cuchillos?
-No, no es eso
-Cierra la puerta porfavor
Me senté en la cama y me quité los guantes. De mis manos salian como chispas, como una carga de electricidad.
-¿Y tu sabes que es esto? -pregunté
-Algo asi, pero antes de llevarte al instituto tengo que asegurarme que no eres una espía.
-¿Una espía? Porfavor ya no tiene gracia la broma, venga que salgan las cámaras.
-Esto no es una broma.-dijo muy serio
Y no se por qué le creí
-¿Que es eso del instituto?
-Hasta que no esté seguro de que eres de fiar, no te daré ningún tipo de información.
Me dejó muy claro que aunque le suplicara no iba a ceder asique cambié de tema.
-Losiento por lo de antes ¿estas bien?
-Perfectamente -respondió
-Bueno yo me tengo que ir a clase ya, así que como si estuvieras en tu casa.
-Voy contigo, no tengo otra cosa que hacer.
-Vale tu mismo ven si quieres aburrirte en las clases.
-Toma los guantes.
Me puse de mala gana los guantes y me fui derechista a clase con el chico pegado a mis talones.Holaaaaaa esperó que os haya gustado mucho el capítulo, verdad es que Carolina es una caja de sorpresas... :)
Bueno muchas gracias por leer mi historia y deciros que ya estoy trabajando en el siguiente capítulo así que xao.
Besos y chocolate! :)
Emchocolaytor
Paula.