Me desperté con un dolor de cabeza tremendo, no se que me pasaba estaba rara y me encontraba mal, muy mal.
No quería ir a clase, no porque no sea buena estudiante sino por los rumores y eso... No me apetece que Mark los escuche pero ¿que mas da?
Que no vaya yo no significa que el no vaya.
Me levanté de la cama y me di cuenta de que no estaba Lucía, nose donde está, pero seguro que está desayunando.
Me fui pitando al baño y me di una ducha rápida, de unos diez minutos aproximádamente.
Salí del baño con una toalla alrededor de mi cuerpo y otra en la cabeza, evitando mojar el suelo y mi cuerpo.
Al salir me puse el albornoz y mis zapatillas de conejitos. Agarré el secador y me quité la humedad rápidamente.
Al terminar cojí mis planchas (prácticamente nuevas, porque no tenía ni tiempo ni ganas de usarlas)
y me hice unas ondas en el pelo.
Yo lo tengo liso, y con volumen, pero hoy me apetece cambiar de peinado, y me apetece cambiar a mi actitud de siempre.
Es decir, ya estoy harta de tener que poner carita de felicidad, y una sonrisa como si fuera la mas afortunada del mundo.
Ya estoy harta de tener que fingir que soy feliz, y que mi vida es muy sencilla.
Porque no, mi vida es todo menos sencilla y feliz.
Tengo una mejor amiga que no hablo con ella desde hace tiempo, tengo un amigo que desconoce toda la verdad, me sale electricidad de mis manos y soycapaz de matar a alguien con solo rozarlo. Y para colmo mi hermano esta en un sitio que les mandan misiones suizidas. Si suizidas, porque estoy segura de que raptar niños y alejarlos de sus padres para utiliazar sus poderes no es plato de buen gusto.
Termiñe mi pelo y me sentía orgullosa de mi trabajo.
Del armario escogí unos leggins con rodilleras negras, unas botas de motorista, una camiseta negra básica, mi chupa o cazadora de cuero y un cogante de una cruz.
Me heché un poco de colonia y lista,
Coji un bolso negro con pinchos y metí dinero. Bajé las escaleras y en efecto estaban todos recien levantados, desayunando tranquilamente.
Al verme se quedaron callados, mudos si.
-¿Se os a comido la lengua el gato?
-¿Que te ha pasado? Preguntó Lucas
-Este es mi verdadero yo. Quería no mostrarlo y menos delante de vosotros pero ya es tarde.
-¿Te quedas a desayunar? Preguntó Mario
-Ni hablar.
Dicho eso abrí la puerta y salí de esa odiosa casa. Sí la casa tambien parece tener una estúpida sonrisa en la cara, o mejor dicho.. en las paredes.Holaaaa capitulo 20 terminadooo
Espero que os haya gustado
Besos y chocolate! :)
Emchocolaytor
Paula