Mi ángel (Itanaru)

Capítulo 10

Naruto hacía cosquillas en las pancitas de Tatsu y Kichi -comieron muchos dulces -los sapitos eructaron -los dulces que te trae el pelo de escoba son deliciosos -el ahora rubio sonrió ligeramente -¿por qué estás triste Naruto? - los vio con cuidado -¿qué es triste? -kichi se golpeó su frente con su pata -debes ser preciso Tatsu, escucha niño, tristeza es cuando te sientes algo mal por un suceso, sientes dolor en tu interior, ¿tal vez extrañes a alguien que no has podido ver? -el Uzumaki abrió sus ojos al entender, recordaba las palabras de Itachi -dijo que vendría a verme, llevo tres meses aquí y no ha venido -el sapito apretó el ceño -tal vez ha tenido problemas, no seas negativo, verás que Jiraiya-sama lo traerá -el Uzumaki asintió, se levantó sacudiendo sus ropas, entró a la cabaña donde se estaba quedando, cerró sus ojos agitado, había jugado todo el día con los sapos.

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-¿A dónde vas Itachi? -el azabache apretó el ceño con algo de molestia por la actitud de Shisui los últimos meses -¿qué sucede?, has estado muy posesivo este tiempo, ¿te molesta algo?, sé claro -Shisui se relajó, sonrió con cariño, negó besando sus labios -sólo me pareció extraño que salieras de casa sin avisar a nadie -las manos del mayor tomaron el rostro de su novio, se ocultaron tras un árbol mientras ambos se besaban suavemente -Hokage-sama me llamó, debo irme -Shisui asintió con duda, no le agradaba este llamado, lo vio alejarse dejándolo en el bosque, bajó el rostro sintiéndose frustrado, avanzó hacia la aldea caminando sin rumbo, apretó el ceño al ver un bar, entró, no sabía qué demonios le sucedía últimamente, estaba enojado y celaba a Itachi de todo, pidió un platillo de sake, lo tomó de golpe, un segundo platillo pensando en qué demonios le sucedía, ¿por qué se había hecho tan inseguro después del ataque y perder su ojo?-

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Naruto siguió al sannin hacia el exterior de la cabaña, lo vio hacer sellos de manos, un sapo con un chico a su lado apareció, el rubio abrió sus gemas con sorpresa, sonrió ligero, Itachi sonrió del mismo modo -iré a ver a un informante, los sapos te regresarán Itachi -el azabache asintió, el sannin desapareció, el pequeño tomó su mano, jaló de él siendo un poco más expresivo, lo llevó a la orilla del lago donde ambos se sentaron.

El Uchiha observaba el lugar con sorpresa -es hermoso -Naruto asintió -creí que vendrías antes, te extrañé -Itachi se sonrojó un poco, se veía adorable el pequeño con un ligero puchero en sus labios, sonrió un poco -yo también te extrañé, me alegra verte de mejor ánimo y más sociable -el rubio sonrió un poco -los sapos son grandes conversadores -el Uchiha acarició su cabeza suavemente, su mano bajó a su mejilla comenzando a acariciar sus marquitas -perdón por no haber venido, dentro de los documentos de Danzo se descubrió que él alborotó a la aldea y a mi clan provocando la organización del golpe de estado, Shisui usó su ojo para manipular a mi padre y a los ancianos para detener el golpe de estado, aún no localizamos su otro ojo-

El rubio mordió su mejilla, él lo tenía, Danzo lo había guardado en su sello del kyubi, pero no pensaba entregarlo, no soportaba al chico, no sabía el porqué, pero cuando lo intento matar había sido con gusto -entonces ¿ya todo terminó? -Itachi negó -aún falta incorporar el clan a la aldea, pudimos manipular a padre, pero su carácter y ambición aún no termina, sólo sabemos que no atacará la aldea, por otro lado, el poder del mangekyou de Shisui sin el otro ojo es limitado, es poderoso, pero ahora tiene límites más marcados -Naruto pensó, nota mental, nunca mostrar el ojo al azabache, el menor lo vio con cuidado, se recargó en su brazo abrazándose a él.

Itachi sabía que se sentía un poco solo en el lugar el rubio -papá dice que regresaré para la elección de equipos, aún faltan muchos años, ¿no me olvidarás verdad? -el Uchiha negó con una sonrisa -no podría olvidarte, eres importante para mí -el rubio abrió sus gemas un poco sorprendido, sonrió ligero, se estiró un poco besando su mejilla sorprendiendo al mayor, a Itachi se le hacían actos inocentes que en realidad le agradaban, el pequeño ocupaba cariño y si él podía darle un poco no se lo negaría.

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Años después

Shisui buscaba con desesperación a su novio, corría por el bosque hacia su lugar de entrenamiento, cuando lo vio sus sentidos se calmaron, respiró con más calma, se acercó al azabache caminando -Itachi -el menor mordió su mejilla con una sensación de incomodidad -¿qué sucede Shisui? -el mayor se paró frente a él -acabo de regresar de misión, creí que estarías en casa -el menor negó con calma guardando su tanto despreocupado.

Shisui levantó su rostro, lo besó con desesperación, quería sentirlo, Itachi se dejó hacer, el mayor lo esquinó en un árbol, bajó su mano comenzando a acariciar el miembro del Uchiha -te extrañé demasiado -Itachi abrió sus labios excitado, podía sentir como acariciaba su miembro con insistencia, Shisui metió su mano en sus pantalones comenzando a masturbarlo, Itachi hizo lo mismo, el heredero tenía veintitrés años, la virginidad de ambos se había perdido hace cinco años, habían tenido discusiones donde Itachi no se dejó tocar hasta esa edad, a veces heredero lo tomaba, otras veces Shisui lo hacía -ahh -sus labios se arrebataron un beso desesperado, aceleraron el movimiento hasta que ambos se liberaron en la mano del otro -mnhhn -respiraban con dificultad viéndose el uno al otro bastante perdidos -vamos a mi casa -Itachi negó -Hokage-sama me llamó-

Shisui apretó el ceño -¿para qué? -el heredero negó sin querer hablar -demonios Itachi, siempre te desapareces un fin entero al mes desde hace años, ¿qué demonios haces? o más bien ¿a quién demonios ves? -el menor apretó el ceño, acomodó su ropa y su cabello -¿comenzarás con tus celos una vez más?, me estás hartando -Shisui golpeó el árbol a su lado-si fueras sincero conmigo no estaría de esta manera -Itachi lo vio con molestia, lo empujó un poco -secreto rango s es secreto rango s, eres un shinobi Shisui, maldita sea, déjame en paz, no te soporto cuando tus celos salen -el Uchiha menor desapareció en cuervos dejando a un cabreado Shisui, el mayor corrió desesperado a la zona roja de la aldea metiéndose en el bar de siempre, se sentía ansioso, celoso, desesperado, una chica llegó abrazándolo por la espalda -¿me extrañaste? -el Uchiha sonrió coqueto -demasiado preciosa, ven aquí, te necesito -la chica se sentó en sus piernas, comenzó a besarlo con deseo.