Tal para cual

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Nines permanecía sentado en el sofá de su casa, estaba desnudo y con su piel desactivada mientras Connor cambiaba la pieza de su muslo.

-¿Cómo va tu caso? -Preguntó el androide mas bajo mientras desensamblaba cuidadosamente para no estropear la pierna de su hermano.

-Mas complejo de lo que esperaba, pero bien ¿El tuyo?

-Ya concluimos, ayer apresamos a la cabeza de la banda y la policía está en búsqueda y captura de algunos miembros, Hank nuevamente es la estrella.

-¿No te molesta? -Preguntó Nines al ver un momento a su hermano.

Connor suspiró, levantó la mirada y detuvo lo que hacía.

-Eres el único obsesionado con tener toda la atención ¿Por qué debería molestarme? estoy agradecido de mantenerme en el lugar que estoy, de estar rodeado de gente que quiero y de hacer lo que me gusta.

-No me obsesiona ser el centro de atención, sólo me molesta no tener el crédito que me merezco.

-Si debes recalcarlo muchas veces, no creo que en verdad te lo merezcas, pero ese es problema tuyo -Bajó la mirada y volvió a desatornillar algunas piezas para desarmar el muslo- Hoy me di cuenta que finges respirar y parpadeas casi con naturalidad ¿Algo cambió?

-Gavin me llamó muñeco y odio que me comparen con un objeto.

-El Detective Reed es una persona muy difícil ¿Me ayudas con esto? -Apuntó una pieza para que Nines la levantara y así lo hizo- Hank me dijo que mientras no te cruces en su camino, nada pasará.

-Supongo que tiene razón -Susurró y vio cómo Connor por fin retiraba la pieza estropeada y acomodaba la nueva para luego atornillarla- Me da lastima que siempre esté solo.

-Se lleva bien con Tina...

-Tina se lleva bien con todo el mundo -Corrigió y puso su mano sobre el muslo para ayudar a hacer presión mientras Connor atornillaba.

Cuando las piezas comenzaron a encajar, Nines quitó su mano y reposó su espalda en el sofá, cerró los ojos un momento pensando en lo sucedido el día anterior, habían terminado yendo a investigar a las vías del tren en donde solía aparecer los jóvenes y terminaron volviendo a casa a eso de las diez. Gavin como siempre tan considerado, abandonó a Nines en medio de la autopista a eso de las diez y treinta y debió volver a casa caminando, momento en que comenzó recibir avisos sobre su pierna y debió hacer una compra rápida con envío a su hogar, teniendo que llamar a Connor para que le ayudara con aquello.

-¿Mañana trabajas? -Preguntó Connor en cuanto encajó todas las piezas dando leves palmadas a la pierna de su hermano, este abrió sus ojos y lo miró un momento.

-No -Respondió y pasó una mano por su pierna mientras actualizaba su sistema para que dejara de enviar error.

-¿Me puedo quedar? -Preguntó y tomó postura para sentarse junto a su hermano quien hacía una mueca con la boca- Vamos... Y así mañana salimos. Necesito comprar thirium, ya me quedé sin botellas, ni siquiera tengo concentrado.

-¿Desde cuándo no tomas? -Preguntó con tono algo molesto, quizás algo fastidiado.

-Ayer me tomé la ultima botella, pero no estaba llena, así que necesito con urgencia.

Nines gruñó, se levantó de su puesto y fue a la cocina en donde sólo habían algunos vasos en donde solía servirse thirium. abrió un mueble y sacó dos botellas pequeñas para luego volver donde Connor para entregárselas.

-Es peligroso que no tengas thirium.

-Tengo suficiente hasta mañana...

-Tómalo -Regañó mientras dejaba las botellas en las manos de su hermano para luego sentarse a su lado- ¿Le dijiste a Hank?

En mis manosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora