En mis manos

¿Un te quiero?

Nines observaba el techo sentado en el sofá de su departamento, Connor a su lado acomodaba su cabello una y otra vez, movía suavemente su fleco y lo acomodaba viendo cada suspiro salir de los labios de su hermano.

-Llevas dos semanas de suspensión y no has echo nada más que estar aquí encerrado ¿No crees que es tiempo de salir de casa y dar una vuelta? -Preguntó Connor al quitar su mano acomodándose para ver al frente- No es que me moleste estar aquí pero ¿No te aburre? 

-No quiero salir.

Connor suspiró, tomó el control de la televisión y la encendió viendo que aun el caso en el que trabajaba Nines seguía en los noticiaron, todos los días habían más chismes, noticias y escándalos.

-¿Has hablado con Gavin?

-No me interesa hablar con esa mierda de persona -Gruñó el androide más alto manteniendo la mirada fija en el techo.

El androide más bajo sonrió levemente, volteó para ver el perfil de su hermano mientras la televisión de fondo informaba sobre los años de prisión de Jareth Brown por trafico de drogas y personas.

-Aun así le diste tu caso, lo resolviste, trajiste a su hermana de vuelta, apresaste a quienes lo amenazaban y aseguraste que era un informante infiltrado, todo para que no estuvieran en prisión.

-No lo hice por él.

-Además -Prosiguió Connor- Dejaste que te castigaran para que no lo despidieran por guardar información importante, dejaste que te sancionaran para que el volviera al trabajo y lo volviste la estrella del caso mientras tú estarás aquí por dos semanas más sin goce de sueldo ¿Lo hiciste por ti?

Nines guardó silencio, volteó la mirada hacia su hermano y respiró profundo.

-Lo odio por lo que te hizo, lo aborrezco y sólo por quitarte de mi vida, aunque fuera por un corto periodo.

La sonrisa de Connor se hizo presente, acercó su mano al rostro de su hermano y deslizó su fleco hacia un lado, aquellas ondas rebeldes que solían cubrir su frente delicadamente.

-Me hice pasar por ti cuando el día que le dispararon -Inició deteniéndose un momento para aclarar sus pensamientos- Él supo enseguida que no eras tú, pero pude notar en su voz la desesperación que tenía, la angustia y miedo, él te necesitaba en ese momento y no sé bien por qué lo hizo, pero antes de desactivarme, creí en cada una de sus palabras.

-¿Por qué lo defiendes? ¿Y por qué todas nuestras conversaciones siempre son relacionadas a él? Brown ya está en la cárcel y espero se pudra ahí, Héctor será enviado a una prisión de alta seguridad, la red de narcotráfico fue disuelta, Oliver volvió con su familia y él es la estrella del departamento de policías ¿Cuál es el problema?

-¿Qué hay de ti? -Preguntó sin quitar la vista de su hermano- Lo quieres...

-No, no lo quiero, no me interesa -Interrumpió en un gruñido mientras erguía su espalda inclinándose hacia delante para acomodar ambas manos sobre su cabeza.

-Me preocupas -Susurró- Te agradezco por todo lo que hiciste por mi y agradezco que Gavin pagara la mitad de los gastos...

-Está quebrado Connor, yo soy quien pagará los gastos -Interrumpió al voltear hacia su hermano- Deja de defenderlo, te rompió y no sintió remordimiento.

-Lo hizo.

-¡Por qué lo defiendes! -Exclamó enfurecido haciendo que Connor relajara los hombros.

-Porque yo hubiera echo exactamente lo mismo si algo te hubiera pasado a ti.

Nines bajó la mirada, volteó al frente y volvió a reposar su espalda en el sofá mirando al techo.

-¿No crees que es suficiente con lo que le hiciste?