Capítulo 4, Versículo 41

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Joemax estaba durmiendo como bebé, sin ningún problema de la vida, incluso la alarma no había sonado, todo era tranquilo, mientras rotaba al otro lado de su cama, sintió que alguien le había puesto el brazo en cima suyo-

Joemax: ¿Qué carajos?

El vaquero se levanta de la cama de un brinco, tomando una silla y golpeando al bulto que lo había tomado por sorpresa-

Taru: ¡OYE! ¿Acaso una damisela no puede dormir tranquila?

Joemax: ¿Acaso no tienes tu propia cama?

Taru: Sí, la tengo, pero me gusta dormir en la cama de otros.

Joemax: ¡Estás enferma!

Taru: Descuida, no te he violado mientras dormías, porque sé que lo tienes igual de pequeño que una bala de tu pistola.

Joemax: Carajo, como chingas.

Ambos se vistieron con sus respectivas ropas, saliendo del cuarto, y yendo a la sala para ver a los muchachos, viendo a cinco personas, te las presentare: Tomahook, el buen samaritano del grupo que tiene depresión, ya lo conoces; Jena, la tipa que le hace bullyng a Tomahook y odia a los que no conoce; Maurice, le gusta tocar tetas y ser echi en general, todos lo odian; Alexander, a este también lo odian por creer que tiene un harem por sus dos compañeras, y la única que no lo odia es la última; Sasha, la tipa a amenazado a otros para que no se le acerquen a Alex, incluso ha tenido varias peleas con Jena.

Casi todos siendo el típico estereotipo del anime barato de turno, por excepción de Tomahook, solo hace sus mierdas y ya. Estaban en su típico día a día, haciendo sus tonterías de estereotipo, hasta que Joemax les encarga una misión, acabar con un escuadron de la muerte, todos aceptan la misión, así que se preparan con sus armas y salen del hotel.

En el camino iban haciendo bromas, mientras todo estaba tranquilo-

Jena: Oigan ¿Cuánto apuestan a que Tomahook sea precoz?

Alex: Apuesto que cualquier mujer sea parte de mi harem.

Jena: Esa apuesta no cuenta gran enclenque.

Sasha: Si cuenta bastarda.

Jena: ¿A sí? Demuéstralo.

Maurice: Yo apuesto a que puedo excitar al público.

Jena: Ni de broma, imbécil.

Sasha: Cállate enfermito.

Tomahook: Cállense ustedes bola de imbeciloides, que estamos en una misión.

Jena: ¿Y tú quién te crees que eres para darnos ordenes? ¿El líder?

Tomahook: No me creo, soy el líder por decisión de Joemax, incluso Taru lo hubiese elegido así. ¡Por el puto odio de Zalgo! Morgan era muchas veces mejor que ustedes cuatro juntos.

Jena: ¿Quién es esa tal Morgan? ¿Acaso tienes algo con ella?

Tomahook: Era mi mejor amiga, desde que apenas éramos infantes, fue a una misión y no se supo más de ella, tristemente supuse lo peor. No me pregunten más cosas sobre ella, no quiero recordar nada.

Alex: Bueno, estoy seguro que podría ser buena candidata para mi harem.

Tomahook se voltea y apunta el Tomahawk que le había dado Joemax hacía Alex, mientras este se acercaba lentamente y amenazantemente-

Tomahook: No metas a Morgan en tus estupideces, porque si no te despedazare, te meteré a una bolsa negra, te tirare a un río, y borrare cualquier rastro que hayas dejado, sin importar como lo haga.

Sasha: ¡No te metas con él!-

Tomahook: ¿O qué? ¿Lo querrás acompañar en el proceso que mencione? Porque con gusto haré que se junten, a ver si en medio del río sus cabezas se topan al punto de besarse.

Sasha tembló en esos momentos por las amenazas de Tomahook, mientras los demás veían esa acción. Siguieron con su camino, esta vez callados, con Tomahook con su arma todo el rato, llegando a unos arbustos, donde se ocultaron, mientras oían algunos pasos, era aquel escuadrón de la muerte que tanto buscaban. Estaba compuesto por hombres demacrados, con algunos teniendo el ojo izquierdo colgando de su frente, otros sin mandíbula y otros ya de plano con una cara completamente cadavérica.

Los protagonistas saltan, atacando a estos con tanta fuerza que de una patada ya los atravesaban, o los sacaban volando, los del escuadron de la muerte disparaban a todos lados, sin dar en el blanco. Tomahook dejaba desmembrados a los cadáveres vivientes con apenas sus puñetazos o patadas. Cuando terminaron con el escuadrón, descansaron un momento, bebiendo algo de agua y platicando de paso, pero esa tranquilidad se desmorono cuando Maurice comenzó con el siguiente dialogo.

Maurice: Oye Tomahook, ¿Puedo preguntarte algo?

Tomahook: Lo que sea, solo hazlo rápido.

Maurice: ¿Qué tan grande las tenía Morgan?

Tomahook se levanta y le lanza el resto de agua que estaba tomando a Maurice, en señal de que no quería recordar eso-

Maurice: Vamos amigo, solo pregunto qué tan grandes las tenía.

Tomahook: No me vuelvas a preguntar eso.

Maurice: Solo quiero una respuesta, nada más.

Detrás de Maurice se encontraba Tomahook, teniendo la pierna del echi en su mano, mientras de sus ojos aparecía un aura de color negro y borde rojo, mientras Maurice lloraba en el suelo, sangrante por la falta de su pierna. Tomahook deja caer el miembro arrancado, calmándose en ese preciso instante-

Tomahook: A quien se lleve al estúpido llorón hacía el hotel, no importa si es cargado o arrastrado, le doy una barra de chocolate.

Jena: Nunca llegue a probar de eso, así que lo haré.

Y los protagonistas volvieron a la base, mientras Maurice era arrastrado y llevado al hotel.

En otra dimensión fuera del purgatorio, Tony se encontraba junto a Skiler, en una sala de una fundación de anomalías, mientras rastreaban a sus hijos, de paso descubriendo otra dimensión, viendo varias estadísticas, pero la que más destaco, es una que de nombre llevaba ''Energías brutas'' viendo que las estadísticas se disparaban por la nubes, tanto como el humano energizado como el mutante de grandes garras se sorprendieron de aquellas estadísticas, viendo de donde provenían, un ser, el cual, al parecer caminaba, pero este ser mira a donde sea que estuviese donde lo grababan y vigilaban, viendo directamente ahí, con ojos negros con un aura del mismo color con bordeado rojo saliendo de estos, y Skiler se sorprende y aterra a la vez, pues, la profecía se había vuelto realidad.

Cap 3. The AtheistDonde viven las historias. Descúbrelo ahora