Aclaración al principio porque es importante para entender el capítulo: En la Orden Jedi estaban prohibidos el apego y la posesión porque podían provocar celos y miedo a la pérdida, y eso los podían llevar al lado oscuro (vean que pasó con Darth Vader antes conocido como Anakin). Por eso no podían casarse ni relacionarse de forma romántica.
Y algo que se me olvidó en el anterior: Existen rangos: Iniciado, Padawan (estudiante), Caballero, y Maestro (quien ya podía elegir un estudiante).
El Consejo Jedi son doce Maestros Jedi que básicamente gobiernan al resto de la Orden, y como Drex antes de volverse malo era uno de ellos, se encargarían de juzgarlo.
Ahora sí, adelante.
Henry dejó que el cálido rastro lo guiara hacia la Reina, caminando por los pasillos sin mirar nada en particular. Salió del palacio y se dirigió a los jardines traseros, pasando junto a fuentes y arbustos hasta que sintió la presencia tranquilizadora de aquella mujer cerca de él.
Se detuvo cuando la vio, sonriendo suavemente y maravillándose de lo hermosa que se veía bajo la azulada luz de las lunas gemelas. Era un espectáculo que nunca se cansaría de ver.
Estaba sentada en el borde de una fuente, todavía vestida con su túnica de antes. Sus trenzas estaban sueltas, cayendo sobre sus hombros, aunque él prefería cuando ella soltaba sus rizos. Tenía la cabeza ligeramente levantada hacia el cielo, pero sus ojos estaban cerrados. Podía sentir que ella estaba tratando de mantener su mente clara y en paz, tal como él le había enseñado a hacer muchos años atrás. Para un ser no sensible a la Fuerza, era bastante buena meditando, mejor que él, o al menos más paciente, pero en ese momento era una tarea difícil porque su mente era un torbellino de pensamientos angustiosos sobre el ataque a su palacio, su prisionero Jedi Oscuro, sus invitados y la otra versión de Henry inmerso en bacta.
No quería molestarla, así que se acercó por medio de la Fuerza, enviándole su propia calidez y paz para hacerle saber que estaba cerca. Si pudiera representarlo en una imagen, sería como si estuviera sosteniendo su mano con fuerza en señal de cariño y apoyo.
Ella lo sintió, fue como una ola de calidez que calmó sus pensamientos inquietantes y la llenó de alivio. Abrió los ojos lentamente y giró la cabeza hacia la dirección de donde él venía, sonriéndole cálidamente.
Esa sonrisa que siempre hacía que su corazón diera un vuelco por lo sincera y hermosa que era. Una sonrisa que estaba orgulloso de ser responsable de provocar en sus labios cada vez que podía.
Acortó la distancia, sentándose a su lado, y después de una rápida mirada a su alrededor tanto con sus ojos agudos como a través de la Fuerza para asegurarse de estar solos, se giró para mirar su hermoso rostro nuevamente. Él tomó su mejilla con una mano y se inclinó para besarla tan dulce y tiernamente como había querido hacerlo desde muy temprano ese mismo día.
Ella recibió su beso con alegría, inclinando ligeramente la cabeza, suspirando al sentir sus fuertes manos bajando para tomar su cintura y atraerla suavemente hacia él.
Como cada vez que lo hacía, sintió que la Fuerza zumbaba alegremente a su alrededor como si cantara en aprobación de su unión. Disfrutó de la sensación de su calor tanto físico como a través de la fuerza, profundizando el beso y abrazándola con fuerza contra sí mismo. La Reina se inclinó ligeramente hacia atrás, rompiendo el beso y riéndose de su entusiasmo mientras Henry seguía el rastro de besos en sus mejillas, bajando por su barbilla y cuello para regresar rápidamente a su boca por más besos.
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Dark Danger
FanfictionUn enemigo conocido de un universo desconocido. Un amor esperado en un universo inesperado. Una situación de vida o muerte tal vez sea un aliciente para que finalmente den el paso.