BLACK LOTUS (HyunChan/ChanJin AU) [1° y 2° Temporada]

2.1

Era un día soleado, por suerte el clima estaba de su parte ya que el enorme cuadro que bajaban del camión se hubiese estropeado no era para nada barato, pero era un gusto culposo que el chico estaba dándose el lujo de comprar.

Observaba a los hombres dejar el enorme cuadro dentro de la sala, para ser repartidores no se veían nada mal para su gusto, pero prefería más al hombre vestido de traje oscuro que llegaba en esos momentos a la sala a hablar con los repartidores, les dio las gracias y los hombres se despidieron rápidamente dejándolos a los dos a solas.

— Tus caprichitos me van a dejar la cuenta vacía. – decía coqueto.

— No son caprichitos, la sala debe verse magnifica para cuando tengamos visita y sé que ese cuadro hará su trabajo.

— Lo que digas. – lo tomó su rostro y le dio un piquito en los labios. — Solo no hagas de las tuyas por estos días que no voy a estar.

— Déjame pensarlo.

— Sam...

— Ryan, sabes que amo comprar cosas para la casa, ropa para ambos...

— Lo sé, pero por el tiempo que no voy a estar nada de compras ni mucho menos salidas extrañas.

— Está bien lo prometo.

Resignado Hyunjin puso el meñique que Ryan tomó con el suyo aceptando la promesa.

— Bien, mi vuelo sale en tres horas. – decía Ryan viendo su Rolex. — Aun estoy a tiempo.

— Ten cuidado. — decía con preocupación quitando las diminutas pelusas del traje del mayor. — Llámame cuando llegues.

— Lo haré. — le dio otro beso en los labios. — Y recuerda que, si necesitas algo, lo que sea, dile a Mingi.

— Si cariño.

Hyunjin no deseaba que Ryan se fuera, pero tenía un negocio pendiente en Alemania que atender. Odiaba estar sin él, en el tiempo pasado se había convertido en una parte esencial de su vida.

Lo veía tomar una maleta de mano, el demás equipaje ya debía estar en el auto que lo esperaba a la afuera del dúplex.

— Oh, olvidaba decirte algo que creo que no te gustará. — rio un poco al ver el gesto de su novio. — Mañana tengo una fiesta que atender y...

— No. — el chico se alejó incómodo, sintiendo un malestar en su cuerpo.

— Cariño, sé que odias las fiestas por algo que te sucedió en el pasado, pero necesito que asistas por mí a esta.

— Ryan pídeme lo que sea, pero no asistir a unas de esas reuniones.

Odiaba ver el rostro del chico lleno de terror. Su novio tuvo una mala experiencia en una que nunca le había contado los detalles y había creado un trauma, de ningún modo lo acompañaba y prefería quedarse en casa, pero la presencia de él en esta sería importante para su empresa.

— Escúchame cariño. — se acercó y lo tomó suavemente por los hombros. — Es en un lugar exclusivo, no va a asistir mucha gente y habrá bastante seguridad.

— ¿Estás seguro?

— Te lo juro por la memoria de mi padre.

— Es que...

— Te juro que nada malo va a pasar. Vas a ir con Mingi y si en algún momento te sientes incómodo te vas ¿De acuerdo?

Se quedó pensativo unos minutos hasta que asintió, no podía dejar a Ryan mal, iba a terminar un contrato en un país y tenía esa fiesta que era de uno reciente que logró conseguir.