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Minho manejaba en dirección a la mansión, hablaba con los menores que seguían en estado de shock.

— Cuando decimos que no salgan del auto no lo hagan ¡joder! ¿Tanto les cuesta entender una orden?

— Lo siento mucho. — Jisung, que iba en el puesto de copiloto, se hizo un ovillo de la vergüenza.

— No lo sientas. Ya vieron lo que vieron... y les queda de experiencia.

El de mejillas abultadas asintió limpiando sus lágrimas, había llorado del susto, los nervios... tantas cosas pasaron a la vez.

En pocos minutos llegaron a la mansión donde fueron recibidos por los empleados. Las mucamas llevaron a los menores a la sala donde les sirvieron té y galletas para que calmaran los nervios y tuvieran algo en el estómago.

Hyunjin era el único que no comía. El té a duras penas le daba unos sorbos.

Felix veía a Jeongin estar acostado en el sillón frente a ellos jugando con el móvil como si no hubiesen matado un hombre a sangre fría frente a sus narices pocos minutos atrás.

— ¿Desde cuando ves ese tipo de cosas? – preguntó el pecoso al menor.

Innie dejó de jugar y se quedó pensativo unos segundos antes de responderle.

— Creo... creo que desde los cinco.

— ¿Cinco años? — Jisung no lo podía creer, era a muy corta edad.

— Sí. Y fue justamente como a ustedes les acaba de pasar. – el chico se acomodó en el sillón para ver al trio. — Estaba con el señor Bang Senior y me dijo que no bajara. Yo, de necio como niño, me salí del auto y vi a mi abuelo matar a disparos a dos tipos... creo que casi como Chris lo hizo hoy.

El trio de amigo intercambiaron miradas por dos razones: la primera, Jeongin lo contaba como si fuese la anécdota de cuando aprendió a montar bicicleta ¡Que no lo era por ningún lado!; y segundo, porque la sonrisa al terminar de relatarlo les dio miedo.

— Ah...ya. — fue lo único que llegó a pronunciar Felix.

El menor siguió jugando con su teléfono hasta que la señora Roy llegó para llevárselo a la casa de los empleados.

— Vamos, mañana tienes clases y debes de dormir. — decía llevándolo del brazo. — Donde Mi Señor regrese y te vea despierto te castiga y lo sabes.

— Si, los sé. — respondió en tono aburrido.

El menor se despidió de los tres agitando su mano y con una sonrisa.

Cuando calmaron sus nervios, Minho se ofreció a llevarse a su casa a Jisung para pasar la noche.

— ¿Lixie? — El rubio menor vio a Jisung. — ¿Te quedarás aquí?

— No, me pueden llevar a casa.

— ¿A casa? ¿Solo?

Lixie asintió.

— Mejor ven con nosotros. — se ofreció Minho. — Para que no pases la noche solo.

— Ok. Gracias.

Los tres se despidieron de Hyunjin que seguía hundido en sus pensamientos.

Cuando dieron más de las once subió a la habitación de Chan donde se dio un baño rápido y se colocó unos de los tantos pijamas suyos que había dejado en la habitación del contrario.

No podía dormir, la espera le recordaba la vez que tuvieron una "cita" y al regresar Chan lo vio malherido. Solo de pensarlo su piel se erizaba, no deseaba que estuviese lastimado o que algo haya pasado después de lo sucedido. El televisor estaba encendido, pero no veía nada en concreto, el aparato estaba en mudo ya que deseaba oír la puerta o las voces del piso de abajo.

Oyó ruido y a los segundos vio a Bang abrir la puerta de su habitación...

Chris se sorprendió al ver a Hyunjin en su cama esperándolo, creyó que por lo presenciado lo estaría odiando y no deseando verlo nunca más pero ahí estaba viéndolo con ojos llenos de preocupación. Cerró la puerta y fue cuando el rubio se levantó de la cama presuroso y lo rodeo con sus brazos, no le negó el gesto porque él también necesitaba su cercanía, su calor.

El menor se alejó un poco, no rompió el contacto entre ambos y pudo observar sus ojos húmedos, estaba evitando con todas sus fuerzas llorar. Le daba lastima verlo en ese estado, lo entendía y sabía que en algún momento explotaría, pero lo que jamás supo es que lo haría en ese preciso instante y de esa manera...

Hyunjin rompió el abrazo y lo comenzó a besar con demanda, con agresividad, reclamando todo con sus labios y su lengua que él igualmente correspondía porque también lo necesitaba.

Rompió el beso para poder desnudarse ambos, lo que los dos sentían era una urgencia. Una urgencia que tenerse, que estar juntos y sentirse cuerpo a cuerpo.

El menor no quería esperar más, deseaba sentir al mayor dentro suyo, que lo llenara, pero Chris lo que menos deseaba era lastimar a Hyunjin así que con delicadeza preparó al chico mientras lo distraía de su deseo momentáneamente besándolo en los labios, en el cuello donde dejaría unas marcas notables que le dirían a cualquiera que se acercara que Hyunjin tenía dueño y ese era solamente él.

Cuando lo sintió preparado, se acomodó sobre el rubio que abrió sus piernas listo para recibirlo y esa sola imagen de él abierto con su entrada rosada y húmeda lo volvió loco. Sus ganas eran inmensas, pero lo haría con sumo cuidado, se introdujo con delicadeza y no se movió hasta que se acostumbrara.

Hyunjin no quería que Chan fuese delicado, deseaba que lo poseyera, que lo lastimara si era necesario así que levantando su pelvis le indicaba que podía empezar a moverse y así lo hizo, el mayor comenzó primeramente con lentitud como los besos que se daban para progresivamente aumentar la velocidad y la rudeza. Se aferraba con fuerza de sus brazos introduciendo sus uñas, lastimándolo como lo hacía con él

Chris marcaba el ritmo con una mano sobre la cadera de Hyunjin y la otra... la otra rodeando su cuello, la imagen era poética juntos con sus gemidos, eran música para sus oídos.

Sintió las paredes del interior del chico estrecharse, estaba a punto de alcanzar su orgasmo y él también, así que las embestidas las dio dando en el punto exacto para hacerlo ver las estrellas y gritar del placer diciendo su nombre sin ningún tipo de vergüenza. A los pocos segundos también alcanzó su clímax dejándose caer sobre el menor que lo rodeo con sus brazos.

Sus agitadas respiraciones era el único sonido en toda la habitación hasta que oyó el sollozar a Hyunjin, no necesitaba que nadie le explicara, entendía a la perfección por lo que estaba pasando. Había sido un día difícil, muchas noticias, emociones fuertes, era común que quisiera buscar un alivio, sacar todo lo que había contenido durante el día y ahora lo hacía con él, no había buscado nado o a nadie más, solamente a él.

Los acomodó a los dos en la cama arropándose con las sabanas, Hyunjin se aferraba a él y no se lo negaba, le daba besos en el rostro mientras le acariciaba y le daba palabras de amor al oído. Lo que el chico necesitaba era calma, afecto, tranquilidad y se los daría como y cuando fuese.

Hyunjin era un chico que estaba viviendo todo a un ritmo muy rápido a diferencia de Chris que lo hizo deforma más lenta y él estaría ahí para ayudarlo a superar todos esos obstáculos,no lo dejaría a solas, no lo abandonaría.

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Hola!!!!!

Aqui de vuelta con un capitulo mas esta noche, como siempre ojala les haya gustado y ya saben que pueden comentar que los leo y respondo.

En estos días me puse a ver las estadísticas de la historia y en la demográfica sale todos los países que la leen (la mayoría de latam 🥰) pero me quedé shockeada al ver que sale Japón, Saudi Arabia, Alemania y... 

AUSTRALIA.

Tengo miedo. No quiero hacerme teorías ni paranoias solo pensaré que es un fan que vive allá 😂 ... o no? 😐

Ya dejo mis locuras.

Eso es todo, nos leemos!

Ruthie 🌷💗

BLACK LOTUS (HyunChan/ChanJin AU) [1° y 2° Temporada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora