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Dentro de la oficina de Taneda, el padre de Atsushi esperaba por la llegada de su hijo, cruzado de piernas, haciendo un ligero tamborileo sobre el borde de la silla con sus largas uñas negras, al mismo tiempo que el director se secaba una gota de sudor que escurría de su mejilla, cortesía del aura tenebrosa, casi nebulosa del padre de familia que lo acompañaba en la oficina.

¿Cómo es que se había enterado el diseñador del incidente tan rápido? aun era un misterio, sin embargo, el hecho era que Shibusawa estaba ahí, a primera hora de la mañana y para pesar del director, no conforme con que el pobre hijo de ese hombre era nuevo, apenas recién llegado se vio envuelto en un asunto que lo llevo al desmayo y según en palabras del mismo diseñador "atentaran contra su salud física, su bienestar emocional, y en general su vida", lo pero apenas empezaba pues cuando fueron a buscarlo el chico, éste había desaparecido.

Mientras por los corredores de la escuela, el vapor de los rumores sobre el incidente de la noche anterior llenaban el vació de los pasillos con los alumnos alistándose para entrar a clases: "el chico nuevo fue poseído al liberar un demonio" susurraban un par de chicos, "dicen que se murió y por eso no encontraron su cuerpo en la enfermería" se escuchó dentro de un salón "oí que cerrarán el club de ocultismo para siempre, y la escuela también" "seguro corren a Lovecraft sensei" "oí que Oda sensei llegó a rescatarlo" "Oda sensei es tan guapo..."

— Oye... ¡Oye! — gritó la pelirroja que caminaba al lado del albino — ¿Seguro que estás bien? Te sigues viendo enfermo —

— Estoy bien Lucy san, sólo estoy un poco desvelado — contestaba el chico apoyándose sobre la pared mientras caminaba — Sólo necesito comer algo y estaré bien. —

— Mmmh, aun así, pienso que deberías ir a la enfermería — insistió Lucy — Sólo nos saltaos el desayuno y estás más pálido que de costumbre —

— De verdad estoy bien Lucy san — le aseguró Atsushi sonriendo.

— Bien... — contestó Lucy, poco convencida, dio un vistazo al reloj y borro su preocupación pues — Es casi hora de clase y debo ir a cambiarme, te veré en clase — se apresuró a despedirse y dando una ligera reverencia dejó al albino.

Atsushi hizo lo mismo con la poca resistencia que le quedaba, aguantando como un campeón a que la pelirroja estuviera fuera de su campo de visión, procedió a desmayarse una vez más. La madrugada anterior le había sido imposible conciliar el sueño, a pesar de encontrarse completamente en paz al lado de Kunikida y Kaji que dormían profundamente y de que aún tenía un par de horas de descanso antes de su cita de entrenamiento, un horrible sentimiento lo inundó, no sabía como explicarlo, pero si debía compararlo era aun peor que el miedo que había sentido mientras realizaba el ritual, era un presentimiento de muerte, algo mucho peor le estaba por ocurrir.

Al mismo tiempo, dentro de la dirección Tsujimura se apresuraba a entrar mientras negaba enérgicamente con su cabeza, a lo que Taneda sensei a punto del colapso debido a la presión que ejercía Shibusawa, gritó, lleno de determinación — ¡No es posible que no esté! ¡Yo mismo lo encontraré y traeré aquí, Shibusawa san, no se preocupe! — y se apresuró a salir junto con su secretaria.

— No —

— ¿No? — preguntó Taneda deteniéndose en seco, oyendo la perturbadora voz de su "invitado" que por primera vez hablaba.

— Lo encontraré yo mismo — sonrió Shibusawa saliendo de la oficina.

— Por cierto — se atrevió a hablar Tsujimura una vez estuvieron solos — Hay varios rumores circulando por la escuela, una asamblea sería...

— Sí, buena idea una asamblea será conveniente... — la interrumpió Taneda.

— Aclarando que no vamos a cerrar la escuela... — añadió Tsujimura, esperando una respuesta que no llegó — ¿Señor? — insistió.

— Organiza la asamblea luego de que Shibusawa san se vaya — fueron las ordenes del director — Sabremos que pasará una vez encuentre a su hijo — volviendo a secar su sudor y salió en busca del diseñador.

Por otra parte, se encontraban Chuuya, Dazai y Ranpo que se rehusaba a despegarse de su hermano y de la cama.

— ¡Vamos a llegar tarde! —

Tanto la cara de Dazai como la de Ranpo rompieron en risas ante tal declamación.

— Chuuya — canturreó Dazai — ¿Cuándo te ha importado llegar temprano a clase? —

— O la clase — corrigió Ranpo.

Chuuya respiró profundamente, cerró sus ojos y con la voz más tranquila que pudo se dirigió a Dazai — Osamu, lo intenté, pero ya no lo soporto, te espero el viernes después de mi entrenamiento — y con esas palabras azotó una vez más la puerta de Dazai y se esfumó.

— Ranpo — parpadeó Dazai perplejo aun sosteniendo por su hermano — Vas a hacer que se mate o te mate —

— Está bien — sonrió complacido Ranpo soltando a su hermano, su misión había sido completada — Si me muero al menos podré hablar con Poe kun como fantasma. — Dazai suspiró, era un asunto de familia, si uno era miserable, el resto también debía de sufrir.

— Veré que puedo hacer — lo intentó consolar el menor.

-x-

— Entonces... — Taneda hizo una larga pausa esperando alguna señal por parte de Shibusawa, que con total calma colocaba el cuerpo inerte de su hijo dentro de su auto, mientras se aseguraba de que aún respirara — Puedo confiar en que todo está bien —

El diseñador se limitó a sonreír, puso el cinturón de seguridad alrededor de Atsushi, cerró la puerta, entró a su auto y arrancó con un fuerte sonido de su motor dejando al director solo.

Una vez salió de la escuela, el convertible del diseñador se detuvo ante la presencia de un chico que esperaba por el en el camino.

Shibusawa bajo el vidrio de su ventana — Gracias por avisarme — se dirigió al joven.

— Un placer — contestó — Sólo cumple tu promesa y asegúrate de no dejarlo volver —

— Hasta luego Akutagawa kun.



No sé cuántas veces he dicho "volví" pero aquí voy de nuevo 

¡Volví!

Espero disfruten el capítulo y no tardar tanto en actulizar...

Gracias por leer y seguir aquí , les amo*u*

CandyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora