Capítulo 9

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CAPÍTULO 9:

En la aldea todas las chozas estaban construidas estratégicamente alrededor de la orilla, todas menos una...

Donde la arena y la hierba se rozaban, estaba erguida una simple cabaña.

Allí vivía Abu-Je'li, una distinguida anciana que destacaba por ser una fantástica cuentacuentos.

Junto a ella se encontraban sus nietas, la solitaria Zi'la, la mayor, y la encantadora Kala, la pequeña.

Durante años Abu-Je'li se había dedicado a la botánica y al espiritualismo, pero al verse obligada a cuidar a dos niñas, dejó aquellas aficiones y comenzó a contar historias.

Al principio eran leyendas, después se las fue inventando y al final, acabaron siendo historias que contenían privilegiadas enseñanzas.

Al llegar Teye a el clan, se dio cuenta enseguida de lo diferente que era aquella chica.

Mientras que los demás jugaban en el agua y se divertían montando a sus Ilus, Teye disfrutaba de la soledad y el silencio, le gustaba aislarse en el bosque y odiaba el mar.

Además contaba con su ''problema ́ ́. Las visiones que tenía eran básicamente asombrosas. Ya podían ser tanto como del pasado, del presente e incluso del futuro.

Desde hace dos años, se había dedicado a investigar sobre ella.

¿Por qué tenía aspecto de na'vi del bosque? ¿Por qué contaba con cinco dedos? ¿Por qué tenía los ojos marrones? ¿Por qué tenía visiones? Y la más importante... ¿de dónde venía?

No era la única que se preguntaba todas esas cosas. Ronal y Tonowori habían intentado sacarle información, pero la chica con su serenidad de siempre, se oponía a contestar.

Aún así, la joven era aceptada en el pueblo. Era amable, servicial y, de normal, no solía causar problemas, por lo que a los aldeanos no les importaban mucho los secretos que ocultaba.

No hace mucho que había conseguido que Teye se sincerara con ella.

Gracias a aquello, había descubierto grandes revelaciones de las cuales ya sospechaba.

Era ella quién aconsejaba a la chica y le intentaba guiar.

Su relación era igual que la de una abuela con su nieta.

                                                                  ***

Abu-Je'li acariciaba suavemente el hermoso cabello de su nieta pequeña, esta se había quedado dormida en su regazo.

Esperaba pacientemente la visita inminente de Teye.

Desde bien empezada la mañana, había tenido el presentimiento de que la iba a ver.

Y así fue, después de un rato, apareció en su puerta la joven de los ojos marrones.

- Abu-Je'li... - le dijo esta resoplando - Necesito hablar contigo... Es importante...

La chica iba despeinada, con la pintura corrida y las joyas enredadas entre sí. Un aspecto lamentable.

La anciana le indicó que pasara con un leve gesto.

Le obligó a sentarse en la alfombra, junto a la adormilada Kara.

Una vez las dos acomodadas, la mayor decidió comenzar la conversación:

- ¿Qué ocurre Tseo? - le preguntó mientras volvía a acomodar a su nieta en su regazo.

Abu-Je'li solía llamar a la chica Tseo, nombre que significaba "arte" en na'vi. Esto se debía a lo peculiar que era en sí la chica.

Flor de la oscuridad / Teye x Lo'ak Sully /Donde viven las historias. Descúbrelo ahora