Capítulo 7.

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Es tarde, me quedo dormida, 11:52 a.m., mamá debe estar preocupada, así que salgo en silencio del apartamento de los chicos, cuando estoy cerrando la puerta, camino hacia el elevador, presiono la planta baja, veo como Niall sale de su apartamento.
Presiono el botón varias veces más, el coloca sus lentes de sol, y es que luce tan bien, no quiero que estemos en el mismo lugar. El elevador está por cerrar, suspiro aliviada, hasta que veo su mano entrar y detenerlo. Vuelven a abrirse las puertas y entra, se coloca junto a mi y levanta sus lentes colocándolos sobre su cabeza.

-Buenos días, Luci.
-Buen día.- murmuro sin mirarlo. Mientras desendemos, el silencio es absoluto, hasta que el me mira durante unos segundos y devuelvo la mirada.
-Quiero disculparme por lo qué pasó anoche, no quería hacerte sentir incómoda, así que me disculpo... enserio.
-Está bien.- asiento y sonrío devolviendo mi vista hacia enfrente. Y el silencio vuelve a hacer posesión de todo el lugar, bajamos tal vez 5 pisos más.
-¿Enserio?- pregunta dudoso.
-¿Sabes? No soy mojigata, está bien. Me fui porque estaba ebria, y ebria no tomo muy buenas decisiones, no te preocupes, ¿si?- asiente en silencio y ríe mordiendo su labio.
-Nunca dije que lo fueras.
-Lo sé, pero no significa que no lo pensaras- me mira riéndose y frunce el ceño.
-¿Qué pensarías si te invito a salir?
-¿Y es una pregunt?
-Es una proposición, me gustaría mucho salir contigo.- el elevador abre sus puertas y bajamos, da un par de pasos adelante de mi y se coloca frente.-¿Qué dices, Luci?
-Tengo que irme, Niall. Hasta luego- me despido y camino, siento su cuerpo cerca de mi siguiendo mi paso.
-¿Y eso que significa?...

Cita uno.

Lucía.
Trato de buscar entre mi armario algo decente, no hay nada. Niall me invitó a un lugar que jamás había escuchado, y al contarle a Louis, googleamos, no entiendo por qué le dije que sí. Es un lugar muy costoso, fuera de mi alcance, literalmente, pagar una cena ahí, es lo que cuesta un cita en el tratamiento de mamá.
Después de pasar colgador por colgador en busca de alguna idea de que vestir, encuentro el vestido negro de mamá. Es un vestido muy viejo, pero precioso, no es corto, de hecho llega hasta mis rodillas cubriéndolas, es de tirantes y muy entallado, esa es la parte que no me gusta.
No puedo ponerme en esta posición de nuevo, mi ropa no es del tipo que llevarias a un lugar así de cara, no tengo opciones. Después de colocarme el vestido negro, ato mi cabello a una cola alta, junto con unos pendientes de aros medianos, elijo unas zapatillas bajas en color negro y un bolso del mismo color con una cadena. Recibo un texto de el

N: llegaré en 10 minutos, debía pasar a recoger algunas cosas. - 7:22 p.m.
L: está bien, avísame y saldré.- 7:23 p.m.

Neigbors- N. H. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora